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Juanjo Cubo, del gimnasio Anymafis: “Hay que ver la expectativa de los clientes, porque el miedo está ahí y no se puede luchar contra ello” Juanjo Cubo, del gimnasio Anymafis: “Hay que ver la expectativa de los clientes, porque el miedo está ahí y no se puede luchar contra ello”
Juanjo Cubo posa en la sala de pesas del gimnasio Anymafis, que atenderá a sus clientes a partir del lunes. J. L. R.

Juanjo Cubo, del gimnasio Anymafis: “Hay que ver la expectativa de los clientes, porque el miedo está ahí y no se puede luchar contra ello”

Los responsables del centro explicarán a sus clientes los nuevos protocolos de trabajo
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José Luis Rubio

La entrada en vigor de la fase 3 de las desescalada del confinamiento decretado por el Gobierno por la epidemia de coronavirus el pasado 14 de mayo permitirá abrir de nuevo las puertas de los centros deportivos y de los gimnasios. Es el caso de Anymafis, que tiene previsto retomar su actividad el lunes 15, después de una primera semana de apertura para atención al público.

-¿Se ve la luz al final del túnel tras más de dos meses de confinamiento?

-Vamos a poder empezar a trabajar, aunque con una serie de limitaciones. Estamos pendientes del BOE y del Gobierno de Aragón, a ver qué decide a partir del lunes, pero por el momento parece que se va a seguir las normas marcadas por el BOE del sábado pasado.

-¿Cuando van a abrir sus puertas al público?

-Abrimos las puertas este lunes, 8 de junio. Hasta el viernes solamente para atención al público. Todo aquel socio que quiera puede venir a preguntar cómo se va a actuar o por los protocolos que va a haber que seguir o qué actividades va a haber. Cuando abramos, en principio vamos a ofrecer solo las actividades de la sala de fitness, las pesas. Ahora hay que ver la expectativa de los clientes, porque el miedo está ahí y no se puede luchar contra ello.

-¿Se van a concentrar en las actividades de la sala de fines, mientras que las actividades colectivas seguirán en suspenso?

-Seguirán en suspenso en función de la demanda de los clientes. En principio, tenemos pensado retomarlas en julio, pero  como abrimos la sala este próximo 15 de junio cuando se supone que habremos pasado de fase y estaremos  fuera de la desescalada, si el lunes siguiente los clientes lo demandan empezaríamos con una serie de clases, aunque no todo lo que teníamos antes porque hay que seguir una serie de protocolos de limpieza  y de higienización.

- La “nueva normalidad” de la que tanto se habla, ¿cómo va a ser en los  gimnasios?

-Desde  la misma entrada al gimnasio los clientes encontrarán una alfombra  para limpiar el calzado. Se accederá a través de unas zonas delimitadas. Después, la persona que está en recepción les tomará la temperatura y si es correcta le permitirá el acceso al recinto. Después habrá que limpiarse las manos con gel hidroalcohólico antes de acceder al vestuario. Se les va a pedir a los clientes que vengan ya cambiados para estar en el vestuario el menor tiempo posible, y ya se podrá acceder a la sala a hacer las actividades. Habrá que usar la mascarilla, aunque entendemos que , por ejemplo, cuando se está corriendo en la cinta puede resultar agobiante y podrán retirársela, pero sí habrá que usarla mientras se esté en la zona de pesas.

-¿Se va a notar en el aforo?

-Hasta hace poco se hablaba de una limitación del 30 por ciento pero en el BOE del sábado pasado se establece en el 50. También se autoriza la apertura de los vestuarios y las duchas al cincuenta por ciento. Aunque normalmente no alcanzábamos el límite del aforo porque en la sala de pesas hay una cantidad máxima de personas para poder trabajar en condiciones adecuadas, y de forma habitual no se alcanzaba. Vamos a marcar una serie de pautas y horarios e intentar que no todo el mundo venga a la misma hora. Se trata de una reeducación de los socios para alargar las horas en las que se viene y limitar la estancia en el gimnasio.

-¿Están preocupados los socios por la limpieza de las máquinas que ha de compartir con otros usuarios?

-Antes de todo esto, nosotros ya teníamos una forma diferente de trabajar. Nos hemos educado primero los profesores para poder educar después a los socios. Ellos mismos ya se preocupaban de limpiar las máquinas antes y también después de utilizarlas. Esa es la mejor forma de saber que esa máquina está limpia, disponible y libre de virus. En este sentido se ha incrementado la compra de dispensadores de solución hidroalcohólica, de bactericidas y de papel.

-Eso en cuanto a la sala de fitness, pero ¿se interesan los clientes por la fecha de vuelta de las actividades colectivas?

-Sí que nos están preguntando ya, pero tenemos que esperar a ver cómo se va desarrollando todo y de qué nos permite hacer y qué no la legislación. Ahora estamos ofertando las clases virtuales, alquiler de material y el poder ofrecer al cliente por un poco más  puedes entrenar desde casa con acceso a las clases virtuales, desde ciclo indoor, zumba, GAP, AB.

-¿Prevén que se haya resentido el volumen de su clientela tras la pandemia?

-Se cree que por las limitaciones que va a haber a partir de ahora los gimnasios van a repuntar. Además, parece que se van a dar cuenta que una de las armas contra el coronavirus es  el deporte, porque es deporte es salud.

-¿Se mantendrán las tarifas?

-Sí, tanto a los clientes que ya eran socios como a los nuevos. Lo que no vamos a cobrar ahora es la gestión administrativa del alta. Esta semana vamos a estar atendiendo al público, y los clientes que quieran seguir viniendo tendrán que acudir a renovar su inscripción como si fuera el primer día. Así les podremos explicar cómo se van a tener que hacer ahora las cosas y todos los protocolos. Se les explicará también por escrito y tendrán que firmar su conformidad.