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José Manuel Bullón, presidente de la Asociación Astronómica de Aras de Los Olmos: “Una de nuestras luchas es combatir la contaminación lumínica de las ciudades” José Manuel Bullón, presidente de la Asociación Astronómica de Aras de Los Olmos: “Una de nuestras luchas es combatir la contaminación lumínica de las ciudades”
Joan Manuel Bullón i Lahuerta dentro de Galáctica en Arcos de las Salinas

José Manuel Bullón, presidente de la Asociación Astronómica de Aras de Los Olmos: “Una de nuestras luchas es combatir la contaminación lumínica de las ciudades”

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Joan Manuel Bullón es presidente de la Asociación Cultural Astronómica de Aras de los Olmos (Valencia), donde al igual que en Arcos de las Salinas gozan de un cielo privilegiado para observar las estrellas. Colaboraron en la última star party celebrada en Galáctica y son partidarios de que los pueblos se impliquen en evitar la contaminación lumínica para que no se pierda este recurso tan importante que tienen.

- ¿Qué es Astro Aras?

- En realidad Astro Aras es la unión de varios amigos a los que nos gusta la astronomía y el cielo, de tal forma que todos los proyectos que íbamos haciendo en solitario ahora los hacemos en equipo e invitamos a más gente a que se nos pueda unir. Esa unión ayuda a disfrutar a veces más de lo que es la observación astronómica, y ayudar a que la gente que no conoce se pueda nutrir de los conocimientos de los demás. Los aficionados a la astronomía tratamos de compartir proyectos para poder aprender todos.

- ¿Son todos de este municipio valenciano?

- Qué va, qué va, tenemos aquí la asociación porque es donde tenemos un pequeño observatorio, pero mucha gente es de pueblos vecinos tanto de Teruel como de Valencia porque no tenemos ninguna frontera.

- Ese observatorio al que se refieren, ¿cómo surge, lo hicieron ustedes mismos?

- Sí, en realidad es un conjunto de telescopios que tenemos y que guardamos en una nave, y al lado tenemos una plataforma donde podemos sacarlos y observar con ellos, y ahí tenemos también un pequeño observatorio fijo con un telescopio para poder hacer astrofotografía. Como tenemos varios telescopios, los podemos utilizar de manera que sin movernos mucho del lugar hacemos múltiples observaciones. 

- Son 30 socios para un municipio pequeño, aunque haya de otras localidades.

- Sí, eso es.

- En cualquier caso probablemente sean la asociación con mayor número de astrónomos aficionados por habitante.

- Sí, sin duda alguna. Todos los fines de semana cercanos a la luna nueva, e incluso a veces entre semana, nos juntamos todos y observamos. La verdad es que hay bastante gente aficionada para un municipio tan pequeño. Más que nada esto lo hace también el cielo.

- ¿Qué tiene ese cielo que comparten con Arcos de las Salinas y el resto de la comarca?

- Lo primero que tenemos es que dentro del conjunto de la península Ibérica, la contaminación lumínica es algo que nos invade a todos. Hay muy poquitos cielos que se salven, y uno de los pocos que lo hacen es el que hay en este rinconcito entre Cuenca, Valencia y Teruel, que se alarga un poco hacia Soria, y que es una pequeña mancha oscura que permite ver el cielo a simple vista como se podía ver hace mil años, pero con la diferencia de que no estamos en el pasado, sino en un momento en el que las ciudades, aunque estén lejanas, se dejan ver y molestan. Esa es una de nuestras luchas, combatir la contaminación lumínica de las ciudades, porque si no, esos pequeños rinconcillos oscuros que quedan irán desapareciendo.

- ¿Podrían peligrar incluso los cielos de Arcos de las Salinas y de Aras de los Olmos?

- Sí, sí, totalmente. De hecho ya tuvimos que pelear cuando nos instalaron un parque eólico con luces blancas rafageantes y tuvimos casi que sublevarnos porque una cosa era hacer electricidad no contaminante y otra contaminar con los molinos el cielo. Al final tuvieron que cambiar por luces rojas. Lo lamentable es que siguen quedando lugares en España donde nadie lo denuncia ni le pone remedio.

- Y además cada vez más.

- Sí, parece que haya una avaricia por querer especular con la energía renovable diciendo que no contamina, pero sí lo hace aunque sea de otra forma. Los cielos oscuros son como las banderas azules en las playas y es muy importante que no los contaminemos para poder desarrollar tanto la investigación científica, como que la gente pueda disfrutar de las estrellas. Es más o menos nuestra cruzada, salvaguardar más o menos los cielos impolutos.

- La realidad es que no parece importarle mucho a la gente hasta que sale al campo, lejos de las ciudades, y descubre lo que es disfrutar de las estrellas.

- Es un problema de nuestra propia civilización, porque todo son estrategias para poner en orden, digamos, la arquitectura de los pueblos, el tráfico y demás, pero en cambio nadie pone en orden el despilfarro energético. Es algo que siempre se contradice con el respeto a la naturaleza.

- En Aras de los Olmos ya han tomado medidas para evitar esto, ¿verdad?

- Sí, me atrevería a decir que es el primer pueblo del Estado español que ha cambiado el alumbrado público que tenía contaminante, de vapor de mercurio y que era luz blanca, por luz led Tc ámbar.

- ¿Se entienden estas cosas, o estamos a años luz de entenderlo?, nunca mejor dicho tratándose de aficionados a la astronomía.

- Por eso es importante poner todo esto en valor y hacer una Reserva Starlight como se ha hecho en Gúdar-Javalambre, a la que nosotros también nos hemos adherido.

- ¿Qué supone esto?

- Bueno, supone un compromiso por parte de los ayuntamientos de intentar no contaminar más el cielo e incluso descontaminarlo, que es lo que ha hecho el término de Aras y lo que está haciendo ahora mismo el término de Arcos de las Salinas cambiando las luces sin renunciar al alumbrado público.

- ¿Valora la gente que se tomen esas medidas para poder ver las estrellas de noche?

- Sí, la gente nos lo dice, lo que pasa es que hay pueblos cerca que iluminan hasta las carreteras para que la gente pasee y se están perdiendo el espectáculo de ver el cielo. En cambio otros lo valoran e incluso se van a cenar bajo las estrellas para disfrutar de los cielos nocturnos.