Síguenos
José Javier Luis Tello, coordinador de la Global Game Jam en Teruel: “Teruel tiene que darse a conocer en el ámbito de videojuego, no todo es carboncillo, óleo y barro” José Javier Luis Tello, coordinador de la Global Game Jam en Teruel: “Teruel tiene que darse a conocer en el ámbito de videojuego, no todo es carboncillo, óleo y barro”
José Javier Luis se dedica al desarrollo de videojuegos por pura afición

José Javier Luis Tello, coordinador de la Global Game Jam en Teruel: “Teruel tiene que darse a conocer en el ámbito de videojuego, no todo es carboncillo, óleo y barro”

Cien personas se enfrentarán en Bellas Artes al reto de programar un juego en 48 horas a partir del 24 de enero
banner click 236 banner 236

Por primera vez Teruel será una de las 17 sedes españolas y cerca de mil en todo el mundo que acojan esta semana que viene la Global Game Jam anual, en un evento que aquí organiza la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad de Zaragoza junto a la asociación de desarrolladores de videojuegos. Entre el 24 y el 26 de enero cien personas competirán en el edificio de Bellas Artes competirán por ser capaces de crear en 48 horas un videojuego totalmente funcional. Ingenieros, desarrolladores, informáticos, ilustradores, guionistas, pintores, músicos o simplemente aficionados a la programación intercambiarán experiencias, conocimientos, pizza y líneas y más líneas de código.

-¿Qué perfil predomina entre los cien inscritos en la Global Game Jam de Teruel?

-Principalmente artistas relacionados con el diseño gráfico y programadores, que son los que suelen acudir a estos eventos. También vienen músicos, aunque normalmente estos ya estan incluidos en un equipo determinado. En cuanto a la distribución geográfica, contamos con la asociación aragonesa de desarrolladores de videojuegos Aradev por lo que más o menos la mitad de personas vienen de Zaragoza, con muchos alumnos de ciclos formativos de Animación y Desarrollo de Entornos Virtuales. Además habrá unas 10 personas de la Facultad Politécnica o de Bellas Artes de Teruel, y en torno a veinte personas de Barcelona o Valencia.

-¿Pero hablamos de profesionales?

-Vienen algunos estudios profesionales independientes, y también gente que estuvo en el estudio turolense Teku o de Crimson Birds, aunque estos más bien como organizadores. Damos premios pero son simbólicos, el espíritu de la Game Jam no es competitivo, sino que sirve para que la gente se conozca y experimente. Así que vienen muchos alumnos de programación y también gente que, como me ocurre a mí, programan videojuegos por pura afición.

-¿Qué perfiles académicos adecuados para la programación de videojuegos pueden estudiarse en Teruel?

-Pues Bellas Artes, Telecomunicaciones, ingenieros informáticos, músico del Conservatorio... el tema es que hay muchísimas disciplinas que intervienen. Un videojuego no solo es mover un muñeco, no todo es Candy Crush; también tiene una historia, unos gráficos, una música y unos modelos que alguien tiene que diseñar. En Hollywood muchos guionistas se están pasando al mundo del videojuego, porque con la misma tecnología se pueden hacer muchísimos tipos de contenidos.

-¿Cómo se desarrolla una Game Jam de estas características? ¿Responde al tópico?

-Pues sí (risas). Te puedes imaginar a un montón de gente sentada con una pizza en una mano y con la otra picando código sin parar. El desarrollo medio de un juego lleva entre 1 y 2 años, y aquí tienen que hacer un prototipo perfectamente funcional en 48 horas, entre las 17 horas del viernes 24 a las 17 horas del domingo 26. Es muy, muy estresante, pero muy divertido, con todo el mundo gritando en las últimas horas.

-¿Cuánta gente participa en todo el mundo?

-En España hay 17 sedes, todas en grandes ciudades, y por el mundo el año pasado fueron 796, desde Tokio a Nueva York, en 102 países, con 35.000 participantes creando un total de 10.000 juegos. Y nosotros hemos logrado meternos en ese grupo, gracias a que el edificio de Bellas Artes, donde se celebrará, reúne todas las condiciones necesarias. Pero es que en Teruel tenemos una ventaja que no ocurre en ningún campus del mundo: en 50 metros tenemos telecos, ingenieros y gente de Bellas Artes, los tres gremios necesarios para programar videojuegos. Tenemos que darnos a conocer, que los estudios profesionales conozcan gente de aquí y que se generen proyectos... Teruel no tiene que ser solo carboncillo, óleo y barro.

-Un minuto antes de empezar a programar, los participantes conocerán el tema del videojuego... ¿qué puede ser?

-Como participante a mí me ha llegado a tocar en alguna Jam Enanitos de jardín, Waves -entiéndelo como quieras, Si parpadeas te lo pierdes... normalmente son términos ambiguos que te obligan a pensar y permiten que la creatividad explote.

-Entonces no se puede traer un guion, o parte del trabajo adelantado...

-No. Hay gente que se le da mejor el pixelart 2D, los entornos en 3D, o la realidad virtual... y se supone que van a tirar por ahí. Pero es muy habitual que la gente prefiera salirse de su círculo de confort y experimentar.

-¿Los participantes vienen inscritos formando grupos, o los forman en la propia jam?

-Lo normal es que ya estén hechos, de gente que se conoce, que ha colaborado antes o sencillamente que son amigos. Pero también los hay que vienen por libre y una vez aquí se incorporan a algún equipo.

-¿Existe algún juego comercial cuyo germen haya surgido en una Game Jam de este tipo?

-Por ejemplo Minecraft, que es muy popular. Esto es así, si inventas algo nuevo y funciona puede convertirse en un triple A -videojuego de alto presupuesto y rentabilidad-. A otro nivel, el estudio zaragozano Sideral Games creó Enchufao en una Jam y se ha lanzado a través de Steam.