José Fernández Martínez, un joven de Albarracín becario Erasmus en Turín: “La cuarentena se alargó en Italia un mes por las cifras de contagios”

José Fernández Martínez es de Albarracín, aunque ahora está en Turín con una beca Erasmus desde el pasado mes de septiembre. Estudia Información y Documentación en la Universidad de Valencia y este año se trasladó a la Universidad de Turín, en Italia. Allí le pilló la pandemia, concretamente en la capital de la región de Piamonte, a 2 horas de distancia de Milán, la zona italiana más afectada por el Covid-19.

-¿Se planteó regresar a España cuando estalló la crisis del coronavirus?

-Sí, cuando se habló de cerrar fronteras unos amigos y yo llegamos a coger un vuelo pero fue cancelado. Lo estuvimos pensando porque en ese momento, cuando se empezaban a cerrar las fronteras en España, acababa de estallar y había más nerviosismo que aquí en Italia, que la cosa estaba más tranquila, aquí estaba todo normalizado. Así que lo hablamos con mis padres y decidimos que me quedara de momento.

-¿Todos los Erasmus se quedaron?

-Varios se fueron antes porque habíamos terminado los exámenes y algunos regresaron a casa, pero otros nos hemos quedado.

-¿Cuánto tiempo ha durado el confinamiento en Italia?

-Empezó el 9 de marzo y duró hasta el 4 de mayo, porque en principio dijeron que hasta el 3 de abril pero luego lo alargaron hasta el 4 de mayo. Desde entonces ya se empiezan a poder hacer ciertas cosas, a visitar a padres y a la pareja, pero no a los amigos. Se pueden celebrar bodas y funerales pero no ir a misa, también se puede ir al parque a pasear y hacer deporte pero manteniendo la distancia y con mascarilla.  

-¿También se está haciendo por fases?

-Sí, ha sido progresivo y no se marca por fechas, sino que cada día va cambiando. La cuarentena iba a durar hasta el 3 de abril y la alargaron en vista a las estadísticas de contagios hasta el 13 de abril y luego hasta el 4 de mayo. 

-¿En qué situación se encuentran ahora mismo?

-Ya se puede salir a pasear, no hay un horario como en España, mientras lleves mascarilla, guantes y mantengas las distancias.

-¿La gente lo cumple?

En mi zona que es residencial y viven familias sí lo cumplen, en la zonas más de gente joven hay quienes están más cerca y sin mascarilla, hay gente que lo cumple y gente que no.

-¿Y los establecimientos están abiertos?

-Los de primera necesidad sí. Los restaurantes y peluquerías abren el 1 de junio y los comercios, museos y bibliotecas el 18 de mayo pero a un 30% de su capacidad. De momento no se puede viajar, me mantengo en contacto con la embajada de España, con el consulado que está en Génova, para ver cuándo puedo viajar a España, pero todavía no se sabe si va a haber conexión de vueltos porque Estaña está en estado de alarma.

-¿Su idea es volver pronto?

Sinceramente no tengo muy claro lo que voy a hacer.

-¿Cómo está evolucionando la pandemia en Italia?

-La curva se está empezando a doblar, pero en la zona de la Lombardía que es donde estoy yo está yendo relativamente lento. Piamonte es una de las más afectadas y se intenta ir de forma lenta, muy poco a poco.

-¿Cada territorio avanza de forma diferente en función de los casos?

-No sabría decirte, cada periódico dice una cosa.

-¿Hay desinformación?

-Por mi parte sí, en España sé de qué periódico puedo fiarme o cómo compararlos, aquí me cuesta más entenderlos y encontrar información. Además tampoco quiero estar todos los días informándome, necesito desconectar la mente.

-En España al principio hubo cierta psicosis con las compras en supermercados. ¿Notó esa histeria en Italia?

-Aquí comenzó el tema de coronavirus en Europa y la histeria se pasó pronto. Los supermercados enseguida empezaron poner medidas de protección, regularon las entradas controlando el acceso de las personas. Sí salió que en varios supermercados del sur de Italia se acabaron algunos productos, como el papel higiénico, pero nada más.

-En España ha habido muchas quejas por la falta de material entre el personal sanitaria. ¿Ocurrió algo así en Italia?

-Los primeros días sí hubo quejas porque las farmacias no daban abasto, todo el mundo quería mascarillas, pero lo curioso es que ibas por la calle y nadie la llevaba puesta.

-¿Ahora sí la llevan?

-Sí, la llevan para todo.

- ¿También los guantes?

-Sobre todo cuando entras a los sitios, en la puerta de los supermercados te dan guantes y  mascarilla si no llevas. Es obligatorio.

-¿Cómo ha cambiado su día a día?

-Bastante, de ir a clase de forma presencial, de ver a la gente hablar en italiano a verlo en vídeos no tiene nada que ver. La vida Erasmus se basa en hacer mucha vida social, ahora seguimos muy conectados pero estás en casa, es una vida más solitaria.

-¿Ha echado de menos su casa de Albarracín?

-El apartamento donde estoy es bastante grande, pero sí echo de menos Albarracín, el clima y el estar con mis padres en una vida más hogareña, aunque estoy en un piso bastante grande y tengo todos los recursos que se necesitan para estar bien. 

-¿Vive solo?

-No, vivo con compañeros, uno es español y eso ayuda a socializar con alguien.

-¿Ha recibido clases durante este tiempo?

-Ha habido clases online, pero algunos profesores viven en pueblos y no pueden dar clase y nos dan los materiales por audio y Power Point, porque hay pueblos que no tienen la capacidad que tiene la ciudad. Con ciertas materias sí he tenido problemas porque no contestaban a mis emails, seguían avanzando materia y yo como alumno Erasmus no he podido seguirlo bien, no es lo mismo que hacerlo en tu lengua materna.