Joaquina Sánchez Dato, becaria de Pintura de la Fundación Santa María: “Entrar en Albarracín y ver su color es entrar en un mundo de inspiración"
Joaquina Sánchez Dato es una de las becarias de pintura, junto a Irene Persa, de la Fundación Santa María de Albarracín. Es de Cieza, Murcia, y se dedica profesionalmente a la pintura. En su currículo hay tanto exposiciones colectivas como individuales en diversos espacios culturales y cuenta con numerosos premios tanto en pintura rápida como seca. Adora pintar al natural y, debido a ello, Albarracín es el entorno idóneo para hacerlo.
-¿Ya había participado en otras ediciones del Curso Superior de Pintura de Albarracín?
-Sí, estuve en anteriores ediciones, cuando la temática era el desnudo, y luego volví siendo ya directora paloma Peláez.
-¿Qué le aporta este curso?
-Empezando por los profesores, que son muy cercanos y te instruyen en el color, técnica y en todo, además están los compañeros y Albarracín, es todo.
-¿Qué supuso la beca?
-Es un reconocimiento por parte de los profesores, supone saber que lo que estás haciendo lleva buena dirección y saber que vas a exponer en la Torre Blanca, un sitio emblemático .
-Y están las estancias.
-Por supuesto, recibes una atención exquisita por parte de todo el personal de la Fundación, disfrutas del paisaje, son rincones que cada día te aportan situaciones y colores que, dentro de que es lo mismo, siempre ofrecen cosas nuevas.
-Poder estar varias jornadas continuadas pintando, sin pensar en nada más, tiene que ser muy gratificante para un artista, ¿no es así?
-Sí, estas ahí dedicándote a eso, olvidándote de otras cosas, te va orientando la mente.
-¿Qué aporta Albarracín a una pintora ya con trayectoria?
- Entrar en Albarracín, ver su color, sus luces, es una inspiración para cualquiera que tenga un poco de sensibilidad, sea pintor o música, es entrar en un mundo de inspiración.
-¿En qué estilo pictórico se encuadra su obra?
-Se me engloba en la figurativa, pero bastantes ataduras tenemos ya para atarme yo en la figuración, me muevo entre la figuración y la abstracción, no pretendo ni ir a la abstracción ni sujetarme en la figuración, busco que lo que hago en ese momento tenga algo de mí y esté dentro de una calidad.
-¿Cómo fue su proceso creativo en Albarracín?
-La primera idea fue ir en dos temporadas diferentes, cogí otoño para reflejar los ocres de esa temporada. Estuve muy a gusto, incluso me llegó a nevar y también quise reflejar ese frío. Los primeros días hizo mal tiempo, llovía bastante, y lo que hice fue pintura en los soportales y las calles que se vacían desde allí, sobre todo reflejar los colores de ese otoño. Luego en primavera volví y me centré a hacer panorámicas en las que se percibieran los toques de color.
-¿Cuando trabajaba en los cuadros de Albarracín pensaba que iban a exponerse en la Torre Blanca?
-Por supuesto, llevaba años yendo, el sitio lo conozco, había estudiado las parees y lo que quería es que no fuera algo monótono, que tuviera ritmo, que los cuadros, siendo de la misma mano, te llevaran, te fueran conduciendo.
-¿Va a seguir participando en el curso?
-Sí, por supuesto, me da mucha alegría llegar a Albarracín encontrarme con profesores, amigos, con el paisaje y volver a pintar el lugar. Para este año ya me he apuntado, me inscribí el primer día.
-¿Considera que es difícil actualmente vivir de la pintura?
-Muy complicado, no solo de la pintura sino de las artes, predomina bastante la mediocridad.
-¿A qué se refiere?
-El tener un criterio para valorar la pintura es muy difícil, es muy difícil tener ese punto y si hace unos años la pintura o cualquier arte estaba más abierto a un público, ahora ese público no puede acceder y muchos de los jurados son populares, con poco conocimientos profesionales.
-¿Cada vez hay más concursos?
-Hace unos años había más y posiblemente de más calidad que ahora, a un buen jurado tienes que regalarle, que pagarle, y actualmente no les pagan para que vayan a hacer de jurado a la gente que realmente podría valorar las obras.
-¿Qué receptividad tuvo el público con la obra expuesta en la Torre Blanca?
-Estuvimos muy contentos el día de la inauguración porque vinieron muchas amistades, les gustó mucho la obra y se veía claramente que tenían interés por ver esa obra.
-La muestra va a estar todo el verano, lo que supone que mucha gente admirará su trabajo, ¿no es así?
-Es un sitio precioso pero no tiene el reclamo turístico que tienen muchas salas.