Javier Mariscal, diseñador: “¿Rupturista? Igual sí que lo soy pero no sé... nunca me he parado a pensarlo”
El creador de la carismática mascota Cobi ha participado en el Festival Ilustrado de TeruelEl diseñador valenciano afincado en Barcelona Javier Mariscal es una de las referencias nacionales que han participado en el III Festival Ilustrado de Teruel con una conferencia sobre su larga experiencia en el gremio, donde más allá de ser el creador de Cobi en 1992 ha trabajado en numerosos proyectos de todo tipo. Mariscal confirma algo que ya dijo hace casi diez años, cuando visitó Albarracín durante el Curso de Diseño e Ilustración. No se considera alguien reflexivo y prefiere la improvisación a la planificación.
- En el Festival Ilustrado se han realizado conciertos de música mientras dibujantes realizaban ilustraciones que todo el mundo podía ver a través de la pantalla. ¿Había participado en alguna experiencia similar?
- Sí, en realidad hace años lo hacíamos bastante. La experiencia depende un poco del día que tengas, pero en general es buena, y a mí me gusta improvisar. Lo que pasa es que acabo de salir de un catarro muy fuerte y espero estar recuperado del todo.
- En su formación ha habido mucho de autodidacta. ¿Hoy en día usted recomendaría a los futuros ilustradores que se salgan de los cauces formativos reglados, como las Escuelas o las Facultades, o no?
- Cada cuál debe hacer lo que crea oportuno. Yo nunca me he visto como alguien capaz de decirle a la gente lo que debe hacer.
- Los demás le han considerado siempre como rupturista. ¿Se autodefine así?
- No lo sé porque no pienso en estas cosas. Yo trato de hacer lo mejor posible mi trabajo, y eso te lleva a darte cuenta de que has nacido estropeado y sabes muy pocas cosas, nada más. Siempre estás tratando de aprender... ¿rupturista? Igual sí, pero no lo he pensado.
- El rupturismo suele valorarse mucho en el diseño, como la capacidad para reinventarlo continuamente. ¿Cree que la ruptura es un valor en sí misma?
- Sí, la ruptura es fundamental en todos los órdenes. Recibimos siempre la herencia de un lenguaje, en este caso gráfico, que continuamente se está cambiando. Yo escuché por primera vez la palabra ecología a los 18 años, soy de una generación que estaba convencida de que los mares eran infinitos y el agua no se agotaría nunca. Cuando yo nací estaba muy extendido que las mujeres debían quedarse en casa a cuidar a los niños, y hoy en día nadie puede llamar a mi nieto por la calle para que acuda, como ocurría cuando yo era niño. Estamos evolucionando y veo un mundo que socialmente y moralmente cada vez es mejor, el lenguaje tiene que adaptarse y para eso hay que romper continuamente con lo anterior. Hoy un niño de 14 años te entrega un trabajo con fotografías y textos ordenados, que es lo que hacía un director de arte de una revista en los años 80. Somos hijos de gente que ha propuesto cosas que rompían. Desde Darwin a Galileo o los primeros que dijeron que Dios es un invento que no existe en realidad, supongo que estarían acojonados porque se jugaban la vida pero rompieron con lo que había antes que ellos.
- ¿Cree que las máquinas llegarán a sustituir al dibujante? No solo para plasmar el diseño o el dibujo en el papel, que eso ya ha ocurrido, sino para concebirlo e idearlo...
- Sustituir por completo no creo, pero cada vez hay más programas informáticos gracias a los cuales ya no hay que hacer trabajos que eran muy mecánicos. Antiguamente cuando trabajabas en animación había que pintar una a una todas las caras animadas, por poner un ejemplo, mientras que hoy pulsando un botón lo tienes hecho. Estoy convencido de que cada vez habrá más soluciones informáticas que te ayudarán a mejorar y a evitar trabajos que a mano son aburridos o no tienen mucho sentido.
- Pero la chispa, el ingenio necesario para inventar un diseño es más difícil de sustituir...
- Bueno, no creas. no tanto. En el futuro las máquinas harán muchas cosas muy bien hechas. Y eso es bueno.