Espido Freire, escritora y directora del Curso de Creación Literaria en la UVT: “Teruel es un territorio espléndido, una ciudad que hay que descubrir pero a primera vista no se ve así”

Espido Freire (Bilbao 1974) es una escritora de éxito, con una obra muy extensa a pesar de su juventud. Es casi una turolense más, si tenemos en cuenta que lleva más de veinte veranos impartiendo el curso de Creación literaria en los cursos de la UVT.

-Ya son varios años en Teruel con este curso ¿Se va a convertir en un clásico?

-Es un clásico ya. Así lo presentó el director de los cursos de verano y como tal me enorgullezco de presentarlo. Es una cita que desde hace muchos años mantengo. En la tercera semana de julio venimos a Teruel y el público siempre ha respondido, porque hemos tenido dos tercios de los alumnos que son repetidores de más de un año; bien de forma continua o de forma salteada han venido durante varios años.

-¿Qué le atrae de Teruel?

-Si tengo que ser sincera, creo que son más las gentes de Teruel, que Teruel en sí mismo. Teruel es un territorio espléndido, Teruel es una ciudad que hay que descubrirla, porque a primera vista no refleja su belleza ni sus vistas ni su patrimonio. En cierta medida está cerrada sobre sí misma, incluso físicamente. Hay que descubrir el modernismo, las cúpulas internas de alguno de sus lugares; hay que descubrir la comarca. Pero, desde el primer momento, lo que sí que cala. y deja muy buen recuerdo, es la calidad humana, el trato, y la forma en la que te hacen sentir que eres de aquí.

-Como escritora, la historia de los Amantes ¿Tiene material para hacer un libro?

-Uy, pero ya ha habido muchos autores antes que yo, que le han dedicado un libro, incluso hemos tenido un escritor, Javier Sierra, que se ha encerrado con ellos. Esta muy bien al conocerla, pero ya ha habido muchos otros que, previamente, se han dedicado a ella.

-¿Ha pasado ya mucho tiempo desde el premio Planeta ¿Qué supuso?

-Hace mucho, muchísimo tiempo. Se ve ya como otra etapa vital. Otra vida. En su momento fue la consolidación de una carrera que era breve pero que tenía aspiraciones de continuidad. Supuso la estabilidad económica para una chica muy joven, que entonces arrancaba, con una independencia mayor. Incluso un ejercicio de visibilidad enorme, que, posiblemente, pocos otros autores, que hayan ganado el Planeta, han tenido. En mi caso fue muy especial. No se ha vuelto a repetir y fue muy llamativo, hasta el punto que, 25 años más tarde, la gente se sigue acordando de ello.

-¿Cómo se inspira?

-No creo mucho en la inspiración. Es lo que les comento a los alumnos. Creo mucho en la fijación de una idea o por una idea. Hay un momento en el que hay un pensamiento, no tanto obsesivo como recurrente, que no nos abandona y que es el germen de una idea, y de ese germen hay que tirar hasta ver a dónde nos lleva. Y casi siempre tiene que ver con una conexión o un vínculo emocional. Esa inspiración de ir a un lugar, y, de pronto verte atrapada por la magia, tiene más que ver con la lírica que con la narrativa. Yo, principalmente, soy narradora.

-Premio Planeta 1999, Ateneo de Sevilla 2007, Azorín 2012 ¿Es coleccionista?

-No, no. Ojalá . No, de hecho hay autores que tienen más premios que yo. Lo que ocurre es que, en mi caso, he intentado recorrer todas las disciplinas literarias. En ese punto sí que soy un poco coleccionista. Más que coleccionista es, me falta el guión, me falta el libro de poemas, me falta la... Y ahora puedo decir que los tengo todos.

-¿Qué ha cambiado en Espido Freire desde ‘Irlanda’ a ‘La Historia de la mujer en 100 objetos’?

-Es toda una vida. Desde el arranque de una jovencita que publica un libro, muy joven, pero que ya había escrito más joven y que tiene el impulso, la fuerza y la capacidad narrativa de alguien con una enorme ambición literaria, pero con muy. poca experiencia. Y ahora estamos hablando de alguien que ha dedicado la mitad de su vida a estudiar, a formarse, a formar a otros, a escribir, a viajar con un afán investigador y que, por lo tanto, ha perdido mucha energía, porque la edad te la arrebata, pero que ha ganado en técnica, en madurez y en profundidad. Seguir, sigo siendo la misma. Creo que he pulido mucho los defectos de mi carácter, de mi obra y de mi carrera, pero, cada vez que pulo, continuo descubriendo otros. Se pierde la vivacidad pero se gana en equilibrio.

-¿Qué está preparando?

-Una novela, más un miniensayo y un libro ilustrado. Verán la luz de manera inversa. La novela será lo último; espero entregarla a finales de verano. Quiero retomar algunas cosas.