Enrique Conde, secretario técnico de la Asociación Española de Arboricultura: “Si antes el chopo cabecero se usó para construcción, ahora se puede reconvertir en otro tipo de cosas”
Una expedición de la Asociación Española de Arboricultura visitó el Parque Cultural del Alto AlfambraEnrique Conde, secretario técnico de la Asociación Española de Arboricultura, participó la semana pasada en la visita que miembros de este colectivo cursó al Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra, donde pudo conocer este modelo de explotación de un bosque de ribera.
- La Asociación Española de Arboricultura se ha desplazado hasta Aguilar del Alfambra a conocer la experiencia del Chopo Caballero. ¿Por qué?
-Bueno, pues, por un lado, profesionalmente somos arbolistas, o sea que todo el tema de la gestión de arbolado nos interesa y seguimos aprendiendo día a día, con lo cual, aunque sea una gestión no urbana, que es donde solemos trabajar, siempre nos gusta ampliar conocimientos. Sobre todo, porque dentro de la asociación se promueven una serie de certificaciones, que son reconocimientos profesionales de ámbito privado, tanto del arbolista, digamos más, de ámbito urbano, como de una nueva certificación, que es la certificación de árboles veteranos, sin ser un árbol urbano, tampoco es realmente un árbol silvestre. El chopo cabecero tiene intervención, es una explotación realmente económica del árbol.
-¿Cómo afecta eso a estas catalogaciones, a su perspectiva del Chopo Cabecero?
-Pues tiene distintos o diferentes valores. Tiene valor cultural, valor histórico, valor paisajístico... Al final es un lazo de unión secular entre el hombre, el campo y el entorno, en este caso el árbol, como medio de sustento, ya bien sea energético de comida o de acompañamiento a otras explotaciones como puede ser la agraria o la ganadera, o sea que tiene mucho valor añadido.
-Durante la visita que realizaron a la chopera de Aguilar de la Alfambra les llamó la atención que algunos de los ejemplares estén en dominio de la Confederación y que sigan teniendo cierta catalogación privada.
-Sí, es chocante en ese aspecto y lo hemos preguntado, pues porque muchas veces entrar a cazar en el Coto Real es un problema. Entonces, el hecho de que el árbol esté al lado de la cuenca y que pueda seguirse gestionado o solicitado por un privado que tiene el campo al lado es algo chocante en cuanto a la gestión, en cuanto a saber cómo se resuelve ese problema.
-Hace 50 años se explotaba económicamente los chopos cabeceros para sacar material de construcción. Ahora ¿varía de alguna manera su tratamiento arborícola siendo que ya no tiene esa rentabilidad económica?
-Ahora existe el problema real de qué hacer con ellos ya que esa explotación de cara a construcción no se da o no se mantiene, y es el futuro del árbol en sí. Es decir, salir del ciclo de podas en cuanto a la estabilidad del árbol de cara a futuro puede ser un problema. Pero aún así, hay que seguir innovando y buscar otros usos para la madera que se extrae después de las podas. O sea si antes se utilizaba para la construcción ahora se puede reconvertir en otro tipo de cosas ya para leña, ya para pelets, ya para hacer cualquier tipo de industria asociada a ese tipo de materia prima, o sea que al final reinventarse es lo que puede ayudar a este tipo de soluciones.
-Durante el recorrido que realizaron los miembros de la AEA en Aguilar del Alfambra destacaron la riqueza de este tipo de paisajes en cuanto a biodiversidad.
-Es que se ve que es un paisaje agreste, digamos, limpio o muy trabajado agricolamente, con lo cual el único oasis o zona verde que hay, además asociado a agua, es este tipo de paraje. Entonces, con verde, sombra, agua, esto tiene que ser un hervidero de biodiversidad que también hay que mantener y estudiar. Nos han comentado que habían descubierto que había hasta unas 200 especies de coleópteros delos que no había constancia en ningún otro sitio, por lo menos que se conozca europeo, que tenga tanta biodiversidad. Hay que valorar el patrimonio ecológico que hay aquí, que es muy, muy, muy importante. Sí, hay que ver al árbol como individuo, pero también como hospedante, hábitat de otra serie de especies.
En el entorno urbano, del que también se ocupa la Asociación, en las ciudades se están talando árboles porque los sus raíces estaban levantando las aceras y el pavimento. ¿Es una política acertada? ¿Habría otras soluciones?
-Realmente es un patrimonio heredado en el que cuando se plantaba no había tanto conocimiento de cómo gestionar una nueva plantación para que a futuro no diera problemas en la convivencia con el ser humano. Ahora que empezamos a tener bastantes más conocimientos de los que había hace 50 años, se han descubierto muchas más técnicas y formatos de plantación en urbano que no llevan asociado este tipo de problemas. Ahora, lo que hay que aprender es a gestionar el árbol heredado que da este tipo de problemas. Y cualquier tipo de tala o cualquier tipo de actuación sobre todo este patrimonio tiene que venir justificado con un informe técnico de por qué sí o por qué no, y si realmente es la solución la tala, porque muchas veces hay otro tipo de soluciones más baratas. que realmente no se ejecutan. Al final, muchas veces es falta de conocimiento por parte de las administraciones de cómo solucionar este tipo de problemas.