David Sánchez, propietario de una tienda de enmarcación, bellas artes y manualidades: “Me gustaría que alguien quisiera continuar con esta actividad y mis clientes también me lo están pidiendo”
Tras 40 años, dejará en abril su negocio, pionero en la ciudad en la enmarcación de cuadrosEn la calle San Andrés, en pleno Centro Histórico de Teruel, David Sánchez está al frente de su negocio dedicado a las manualidades, la enmarcación y las bellas artes desde hace 40 años, aunque ya antes su padre inició la actividad como carpintería. El próximo mes de abril se jubila y ya lo ha comunicado a sus clientes y amigos por si alguien estuviera interesado en coger las riendas de un negocio que fue el primero en la ciudad en trabajos como la enmarcación de cuadros.
-¿Cómo fueron los inicios con su padre?
-Mi padre era carpintero, luego comenzamos con decoración y empezamos a poner suelos, persianas y moquetas pero todo eso a mí no me gustaba y poco a poco fui cambiando y virando hacia las bellas artes y las manualidades.
-¿Ha continuado esa línea?
-Sí y también algo que ya inició mi padre y de lo que fuimos pioneros en Teruel como es las enmarcaciones. Mi padre fue el primero que puso una tienda de marcos y todavía lo seguimos teniendo, ha sido la actividad principal de la tienda.
-¿Hay relevo para este negocio?
-No. Quiero traspasarlo pero lo veo difícil tal y como están las cosas. Me gustaría que alguien lo cogiera y también los clientes me lo están pidiendo.
-Usted impulsó un concurso de pintura rápida. ¿Cómo recuerda esa iniciativa?
-Primero comenzamos con el Centro Comercial Abierto pero hubo un momento que seguí para adelante solo y estuve unos doce años. Las dos últimas ediciones ya no se ha celebrado. Este por la pandemia y el anterior porque ya tenía intención de dejarlo. Cuando empezamos los premios eran importantes, pero luego se fueron reduciendo las subvenciones y fue bajando las cantidades de los premios. La gente entonces fue dejando de venir y últimamente los que venían eran pintores que les gustaba venir a Teruel.
-¿Le gustaría que se pudiera recuperar un concurso de estas características?
-Si la pandemia nos deja sí me gustaría y creo que es la intención del Centro Comercial Abierto.
-¿Usted fue de los primeros socios de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico, que gestiona el Centro Comercial Abierto?
-No de los primeros pero enseguida me sumé. Estuve nueve años en la junta de la asociación y entonces fue cuando se desarrolló el Plan Urban. Muchas de las cosas que se hicieron entonces salieron de las propuestas del Centro Comercial Abierto.
-¿Cree que tendríamos que valorar aquello que se hizo, por ejemplo la peatonalización del Centro Histórico?
-Sí porque en aquel momento hubo muchos problemas, muchos tiras y aflojas con eso y con la entrada o no del autobús urbano al Centro. En aquella época también fue cuando se montó Sabeco, que hizo un gran daño al comercio. Nos opusimos y algo se consiguió pero sabíamos que con el tiempo todas esas superficies iban a llegar.
-¿Cómo ha visto la evolución del Centro Comercial Abierto con 30 años de trayectoria?
-Se ha evolucionado mucho y se han hecho muchas cosas, algunas muy importantes como la tarjeta Soy de Teruel, que se ha dado a conocer por toda España.
-¿Qué supuso la titulación de Bellas Artes en el campus de Teruel para su negocio?
-Al principio lo cogimos con muchas ganas, pero luego poco a poco ha ido cambiando y ahora tienen clases de pintura, pero pintan muy poco. Se han reducido los horarios y se han dedicado a otras cosas como la fotografía y el ordenador. Es el futuro, pero el diseño gráfico no correspondería a Bellas Artes, sería otra titulación. El pintor tiene que pintar con la mano. Es una discusión que he tenido durante mucho tiempo. Me quejé por ejemplo cuando dejaron que los carteles de la Vaquilla se hicieran con ordenador. Eso ha ido cambiando y los carteles que se presentan ahora a este y a otros concursos se presentan así.
-¿Hay afición a la pintura en Teruel más allá de los ámbitos académicos de la universidad o la escuela de arte?
-Sí que hay. De hecho, existen por lo menos seis academias de pintura en Teruel. Ahora ha bajado por la pandemia, porque no se pueden juntar como antes, pero en Teruel hay mucho artista.
-¿Hubo un incremento en la afición a la pintura y las manualidades en el confinamiento como ocurrió con la cocina?
-No hubo movimiento porque la tienda estaba cerrada, a diferencia de lo que ocurría con los comercios de alimentación. Estuvo todo muy parado y después las academias volvieron a abrir pero limitados por el espacio. Está muy complicado. La gente está animada pero donde antes pintaban 20 ahora lo hacen 10.
-El Covid va a suponer una crisis para el comercio pequeño sin precedentes.
-El problema es que no se sabe cuándo va a acabar y no se puede hacer una previsión. Si se supera te preparas y haces un estudio, pero como no lo sabemos la gente tiene miedo y nos estamos acostumbrando a vivir al día. Yo seguiré en la tienda hasta abril y me gustaría que alguien estuviera interesado en continuar con ella.