Carolina Ferrer, cantante del ensemble Carolina y los Alisios: “Las identidades nacionales se desdibujan con la música, que es un continuo viaje de ida y vuelta”
La turolense, junto a las guitarras de Jesús Bellosta y Paul den Holder, acaba de publicar el EP ‘Vientos pasados’Carolina Ferrer, Jesús Bellosta y Paul den Holder son Carolina y los Alisios, un trío que acaba de publicar el EP Vientos pasados como carta de presentación. Una de las mejores voces turolenses revisita boleros, sones cubanos o la nana en portugués O leaozinho, vestida con dos guitarras españolas que derrochan buen gusto y virtuosismo. Escuchen si no Tico tico, uno de los cortes -por mencionar uno- del disco que ya puede encontrarse en las plataformas digitales de música.
-¿De dónde surge este nuevo proyecto musical?
-Empezó porque Jesús y yo buscábamos repertorio de temas populares, y dando por hecho que eran españoles, investigándolos un poco vimos que en muchos casos esas canciones procedían de México, Argentina y el resto de América. Las identidades se desdibujan en la música, porque estamos en permanente contacto en un viaje de ida y vuelta. Y quisimos revisitarlos, darles nuestra propia intepretación y, en el futuro, componer temas propios basados en esos sonidos y esa sensibilidad.
-¿Alisios?
-Buscando un nombre para el proyecto nuestro amigo Osvaldo, que estaba sacándose el carnet de patrón de barco, nos sugirió los alisios por su relación metafórica con ese intercambio musical. Los alisios son unos vientos suaves, constantes, que van de Europa a Latinoamérica. Nos pareció muy oportuno porque fueron muy importantes en el intercambio cultural y comercial que hubo entre ambos mundos.
-Dos guitarras y una voz. Menos es más.
-Confieso que tenía mis dudas con la percusión, sobre todo, y el bajo, y de hecho no descartamos que en el futuro incorporemos algún músico más. Pero la premisa era ser capaces de hacer que las canciones funcionaran con dos guitarras españolas y voz únicamente, ser capaces de hacer algo bello sin grandes artificios, que se basara en la -aparente- sencillez. Paul den Holder es hispano-holandés y Jesús y él se conocen desde hace quince años, tienen una conexión mágica y se entienden muy bien tocando. Estuvo unos años viviendo en Asia y teníamos claro que en cuanto regresara le propondríamos formar un proyecto juntos.
-¿Cuánto lleva funcionando?
-Hace un año empezamos a buscar temas para versionar, hacer los arreglos, ensayar y ver cuáles funcionaban. Y en eso estamos, descartando ya algunas canciones y empezando a componer temas propios, que es la intención que tenemos desde el principio.
-El disco ‘Vientos pasados’ sin embargo incluye ocho versiones, incluida una canción en portugués de Caetano Veloso...
-Yo tengo raíces brasileñas porque mi padre es de allí, aunque yo no fui educada en ese idioma. Sin embargo se me quedó su musicalidad y en mi casa siempre se ha escuchado música brasileña. Y O Leaozinho es una nana que me cantaban de pequeña. No la recordaba, pero al nacer mis hijas -Lola y Nina- he vuelto a reconectar con esa canción, y ahora creo que será una de esas nanas que pasan de generación en generación.
-¿Dónde se grabó el disco?
-Lo hicimos en Lacasia de la Música, en Yeste (Huesca), con Sergio Lacasia. Todavía estábamos arrancando y lo hicimos sin demasiadas pretensiones. Simplemente queríamos tener unas grabaciones para que se nos pudiera escuchar. Pero el resultado superó nuestras expectativas y decidimos que fuera un disco.
-Tras formaciones como Lina Decaro, Hush, Chía o An Extraordinary Band, sorprende que este sea el primer disco de Carolina Ferrer.
-Siempre he sido muy tímida para grabar, y me ha costado mucho tiempo confiar en mí misma para hacer lo que estoy haciendo. Fui muy reticente para entrar en el estudio, pero había que dar el paso y ahora no quiero parar. Este verano estaremos enfrascados componiendo y ojalá en otoño tengamos suficiente material para otro disco, esta vez con temas propios.
-¿Quién es el encargado de escribir las composiciones?
-Funcionamos entre los tres. De vez en cuando nos enviamos a través del móvil algún texto, o una melodía, o a veces un simple tarareo que después va tomando forma. Y yo siempre he escrito mucho, desde que estuve en Chile con 22 años siempre voy con un cuaderno encima, y lo escribo todo. Así que cuando empezamos a buscar temas propios saque todos esos cuadernos y fui extrayendo frase, conceptos y vivencias inspiradoras. Yo diría que ahora mismo tenemos más material del que nos cabe en un disco, pero tendremos que pulir y descartar muchas cosas.
-Ya han actuado en una veintena de ocasiones, las últimas el viernes pasado en Vinaceite o el miércoles en Caixa Forum de Zaragoza. ¿Cómo tienen la agenda por delante?
-De momento la tenemos ligera, unas diez fechas confirmadas, pero pensamos que irán saliendo cosas. Tenemos San Juan de Plan el día 21, y bastantes plazas de pueblos el verano, por la provincia de Teruel y Zaragoza. En Teruel capital todavía no tenemos nada pero buscaremos algo para presentar el disco. La verdad es que mi ritmo estos últimos cinco años ha sido muy bajo porque he preferido cuidar de mis hijas, pero a partir de ahora, con la ayuda de nuestras familias, vamos a acelerar.