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Carlos Sánchez, coordinador de la Jamón Cup de Calamocha: “Vimos a Salma Paralluelo cómo jugaba y hemos asistido a algún fichaje para grandes canteras” Carlos Sánchez, coordinador de la Jamón Cup de Calamocha: “Vimos a Salma Paralluelo cómo jugaba y hemos asistido a algún fichaje para grandes canteras”
El ‘staff’ de la Jamón Cup, en representación del centenar de colaboradores que la hacen posible

Carlos Sánchez, coordinador de la Jamón Cup de Calamocha: “Vimos a Salma Paralluelo cómo jugaba y hemos asistido a algún fichaje para grandes canteras”

La octava edición de este torneo referente en fútbol base acaba con balance más que satisfactorio en la localidad
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De no haber mediado pandemia de coronavirus, este año la Jamón Cup de Calamocha habría cumplido su décimo aniversario. De momento son ocho ediciones, pero ya sí una década de trayectoria que permite a su director, Carlos Sánchez, hacer un buen balance de lo que para la localidad, para el fútbol de la provincia de Teruel, para los aficionados y para los propios deportistas supone contar con un evento de estas características en plena Comarca del Jiloca.

-¿Cómo fue la primera Jamón Cup?

-Empezamos el torneo con 16 equipos, no pensamos que fuéramos a tener la aceptación que tuvimos, y a partir del siguiente ampliamos a 24. Y, desde luego, en la primera edición nos cayeron por todos los lados. Teníamos poca experiencia en las cuestiones logísticas y de organización. Pero quedamos muy satisfechos con la respuesta y el beneplácito de los equipos y del pueblo.

-¿De dónde surge la llama para ponerlo en marcha?

-Bueno, somos gente de fútbol, vinculada al fútbol. Yo soy miembro de la junta directiva del Calamocha, un club ya con equipos en todas las categorías, el Senior en Tercera, equipos femeninos... Nos gusta trabajar en este ámbito. Vimos que no había en nuestra zona competiciones de alevín de primer año, nos surgió la idea de organizar esta Jamón Cup, y un amigo nos propuso incluir equipos profesionales, que pudieran convivir y competir con aficionados y con los equipos de nuestra zona. Lo vimos claro. E invitamos al Real Zaragoza, el referente de nuestra tierra.

-Pero no fue el primero que respondió.

-Escribimos al Zaragoza, al Real Madrid, al Betis, al Celta y al Deportivo de La Coruña. Y curiosamente el primero que respondió, aceptando nuestra propuesta, fue el Madrid. Y eso fue el impulso definitivo que nos dio pie a creernos que el proyecto merecía la pena y sería bonito.

-Y de ahí a estos diez años.

-A partir del segundo año ya mejoramos esas cuestiones organizativas, y empezamos a crecer y a consolidar esta competición, que se complementa muy bien, como fin de temporada, con los calendarios de fútbol base. En el momento en el que vemos que se empiezan a sumar el Real Madrid, el Zaragoza, el Betis... Va teniendo un calado importante, con un formato de 24 equipos que da mucho más trabajo pero que podemos sostener en cuanto a infraestructura, alojamientos y todo lo necesario.

-¿Cuál es la clave del éxito de la Jamón Cup?

-A nivel social, un gran equilibrio entre competición, deporte, convivencia, buen ambiente y la difusión de nuestra zona, del medio rural en Calamocha. Y en lo deportivo, el formato nos permite juntar una buena cantidad de partidos; los equipos vienen a jugar, y la combinación de juego con descanso, el número de partidos y clubes y el propio formato de la competición resulta llamativo y atractivo. Es importante además esa combinación de equipos aficionados con profesionales e incluso internacionales. Y luego el cariño que le pone toda la gente que está dentro de la organización, que no les falte de nada a ninguno de los participantes, mimarlos a todos, igual a un equipo amateur que al de máxima élite. Les preguntamos a todos cómo han estado y qué han echado en falta o cómo podríamos mejorar para el año siguiente.

-¿Cómo consiguen esa presencia de equipos extranjeros?

-A partir del segundo año, que ya se van sumando el Barcelona, el Atlético, el Valencia, Villarreal, ya se ponen en contacto con nosotros equipos de fuera de España interesados en participar. A raíz de ahí empezamos con un equipo de gales, y desde la quinta edición, Wakatake de Japón, algo que pensábamos que era inimaginable. Desde entonces no han fallado.

-¿Cuánta gente está detrás?

-Alrededor de cien personas entre todos. Todo el mundo se desvive, todos los bares, restaurantes, comercios, hoteles, se desviven. Estamos hablando de 500 jugadores más sus familias, y las facilidades que pone todo el mundo para estar preparado es algo fundamental. A nivel comarcal da mucho, tiene gran impacto. Y tenemos que empezar a planificar cada edición desde el mes de septiembre, nueve meses antes ya empezamos a reservar alojamientos y hostelería, autobuses... El 90 por ciento de esta actividad es además de la zona.

-Muchos jugadores han pasado por Calamocha ya.

-En efecto, y vamos siguiendo a algunos interesantes. Vimos jugar a Salma Paralluelo, con unas condiciones ya excepcionales. Y aquí se han fraguado operaciones entre canteras. El actual jugador del Barcelona Gavi vino a la Jamón Cup con el Betis, y le fichó el Barcelona entonces viéndolo jugar en Calamocha. Es un gran escaparate para los futbolistas.