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Beatriz Martín, arquitecta y ponente de las Jornadas de Patrimonio de Gúdar-Javalambre: Beatriz Martín, arquitecta y ponente de las Jornadas de Patrimonio de Gúdar-Javalambre:
La investigadora Beatríz Martín, el pasado sábado en Puertomingalvo. Rubén Sáez

Beatriz Martín, arquitecta y ponente de las Jornadas de Patrimonio de Gúdar-Javalambre: "El Maestrazgo conserva 28 masías fortificadas, pero si no se actúa pronto serán menos"

"Son torres que no forman parte de una red militar y se dan en masías vinculadas a élites rurales", dice
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Cruz Aguilar

Beatriz Martín es de Teruel, arquitecta y profesora del Grado de Arquitectura Técnica de la Escuela Universitaria Politécnica de La Almunia, donde imparte las asignaturas de Restauración monumental e Historia de la Construcción. En septiembre presentó una tesis doctoral en la Universidad Politécnica de Valencia sobre las masías fortificadas del Maestrazgo y el día 16 ofreció una ponencia sobre el tema en las VI Jornadas de Patrimonio de la Comarca de Gúdar-Javalambre, que están centradas en las masías fortificadas y continuarán mañana sábado día 23 en San Agustín.

-¿Cuántas masías fortificadas hay en el Maestrazgo?
-He documentado 28, pero he hecho un inventario que incluye 63 basándome en que tienen el término torre en su nombre o se consideran masías fortificadas en un inventario previo.

-¿Qué características tienen las 28 que ha documentado?
-Son muy diferentes a nivel formal, aunque todas son rectangulares o cuadradas, la altura varía entre los 8 metros y los 16, la más alta es  Torre Piquer de Tronchón. La mayoría, un 60%, son casas fuerte, una tipología que indica que tienen uso residencial, con ventanas grandes, en muchas con cortejador o festejador, que son aquellas ventanas que tienen unos asientos a su interior. Eso indica que la estancia era de prestigio, además suelen estar bien talladas, con buenos sillares, algunas responden al estilo arquitectónico gótico o renacentista. En cuanto a las que no tienen tipología residencial, la mayoría parecen agrarias; otras, al menos cuatro, el uso de la torre es como palomar. No descarto que alguna, pero no lo he comprobado, fuera torre de vigilancia, aunque en general no lo parece. Su uso no iría más allá de defender las fincas del propietario y tenían un objetivo de representación porque la torre es el símbolo de poder.

-¿No tienen un carácter defensivo entonces?
-En general no parece que sean torres que formen parte de un sistema militar, no están en puntos estratégicos para defender una frontera, lo que no quiere decir que alguna no lo fuera. Entre algunas de las que existen en las inmediaciones de Cantavieja sí hay relación visual, pero en general no parecen construidas para constituir una red militar. Están vinculadas a una masía y servirían para defender las tierras y la explotación vinculadas a la masía. Está claro que esta tipología se da en las masías más importantes, vinculadas con las elites rurales. Es un fenómeno muy heterogéneo, algunas tienen mucha categoría a nivel arquitectónico y otras son más modestas, como las torres palomar.

-¿De qué época son?
-Las más antiguas de la Baja Edad Media, del siglo XIV, aunque no descarto que alguna sea del XIII, y creo que la mayoría serían del XVI, aunque a nivel documental solo hay catalogadas un par, la Torre Sancho y la Casa Sisca, construidas en el siglo XV.

Estado de conservación

-¿En qué estado de conservación están?
-Salvo cinco casos, que están en estado de ruina, el resto se encuentran en buen estado. Están muy bien construidas, con muros de mampostería y sillares de piedra en las esquinas, aunque también hay variedad. Se mantienen en pie en un estado bastante bueno a pesar de que hace mucho tiempo que no tienen uso.  Pero están en mucho riesgo porque solo cinco se utilizan. Muchas de las masías sí tienen los campos arrendados y están en funcionamiento, pero no utilizan las torre para nada. Solo cinco tienen un uso distinto al almacenaje en la planta baja, que es un uso además perjudicial.

-¿Qué uso tienen esas cinco?
-Torre del Monte Santo, que alberga un hotel, tiene un uso turístico y residencial, porque los propietarios viven ahí; Torre Santa Ana, en Mirambel, tiene de vez en cuando un uso residencial; Casa Ayora, de Tronchón, que es una residencia habitual durante gran parte del año para sus propietarios; Torre Piquer de Tronchón tiene un uso eventual como segunda residencia y, por último, está la ermita de San Blas de Cantavieja, con un uso religioso. El resto no se emplean, salvo algunas en su planta baja que sirven de almacén, y tampoco tienen un mantenimiento general.

-De esos 28 mases, ¿cuáles destacaría?
-Por su valor arquitectónico la de Torre Sancho y Monte Santo, ambas en Villarluengo y de los mismos propietarios. La Torre Sancho es un ejemplo de estilo gótico, con ventanas góticas y una composición muy medieval, mientras que la de Monte Santo presenta un claro lenguaje renacentista. La Torre Sancho está cerrada, pero los propietarios se preocupan de su mantenimiento.

-¿El gran problema para su conservación es la falta de uso?
-Sí, muchos de los propietarios la han heredado pero no tienen nada que ver con el lugar y, al no tener ningún mantenimiento, en cuanto hay problemas en el tejado el edificio se viene abajo, se podrían caer en los próximos años. Algunas son de finales del XIII, se han mantenido durante muchos siglos y aunque la estructura general está bien, la mayoría tienen mal el tejado y, si no se repara, empezarán a aparecer patologías. Si no se hace algo, en muy pocos años el panorama será diferente y cinco están totalmente en riesgo.

-¿Qué se podría hacer?
-Un plan de gestión que sirva para dar prioridades, porque con arreglar los tejados y las cubiertas ya estás haciendo mucho. En estas cinco sí que habría que hacer algo más. Habría que hacer una selección para priorizar las actuaciones y empezar por ellas y seguir el ejemplo.

-El problema es que son de titularidad privada, no es así?
-Sí, salvo la ermita, sí, y las ayudas para este tipo de intervenciones son inexistentes, para los dueños es una carga.

-¿Hay interés por parte de las administraciones?
-En la comarca del Maestrazgo tienen mucho interés y sé que tienen en mente iniciativas.

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