Andrés Lardiés, miembro de la Asociación Aragonesa de Vehículos Históricos: "Nosotros arreglamos los coches porque llevarlos a que los restauren fuera es impagable"

La Asociación Aragonesa de Vehículos Históricos participó el pasado fin de semana en la feria Antiquarius, que celebró su décima edición en el recinto ferial de Calamocha. Los vehículos participantes durante el sábado y el domingo se expusieron en el recinto ferial y también desfilaron por la localidad. Andrés Lardiés es uno de sus integrantes y este sábado estuvo en Calamocha con su Jensen Healey.

-Uno de los momento más esperados tras la inauguración de Antiquarius ha sido la llegada de los vehículos antiguos. ¿De dónde vienen?
-Venimos de Zaragoza. Allí tenemos nuestra sede junto a la Facultad de Veterinaria. Cada uno de nosotros tenemos nuestro coche y venimos con él.

-¿Cómo ha sido el viaje desde Zaragoza y hasta Calamocha?
-Tranquilo. Unos hemos venido por carretera y otros con el coche en remolque porque si no tardaríamos demasiado tiempo. Los que venimos por carretera el vehículo más lento va primero y los demás van detrás. Hemos venido por la autovía.

-¿A qué velocidad puede ir el más lento?
-El Buick ha ido a 90 km/hora y los demás nos adaptamos. Cuando llegamos al puerto de Mainar, nos ponemos a 70 Km/hora para poder subir. Los más lentos son los que han traído en remolque.

-¿Qué vehículos han viajado en remolque?
-Un Ford T -que fue el primer vehículo que se comercializó-. y un Ford A amarillo.

-Han traído a Calamocha una variedad muy amplia de vehículos en cuánto a épocas y modelos. ¿Cuál es su vehículo?
-Es un Jensen Healey, del 70. Es un coche inglés pero con el volante a la izquierda, aunque también hemos traído vehículos con el asiento de conductor a la derecha. Aquí también hay un MG   y un Mustang, entre otros.

-¿Qué diferencia hay entre los vehículos históricos y clásicos?
-El histórico tiene que llevar en la matrícula una H y hay que hacerlo histórico como tal. El resto son coches clásicos y llevan una matrícula normal. Ahora parece que se quiere hacer una ley para hacer más sencillo que sea considerado histórico pero no todos los coches pueden ser históricos, tienen que ser emblemáticos por algo.

-¿Qué se podría tener en cuenta?-Por ejemplo, que sea un deportivo en concreto. Hay modelos de los que hemos traído aquí como el Mustang, el MG o el Jensen que podrían ser históricos pero otro no lo sé. Un Renault 5  por ejemplo habría que ver, un Seat 600, seguro que sí. Habría que verlo, tendrían que tener algo que los caracterice para que tengan un valor histórico.

Viajes y ferias

-Han participado en Antiquarius. ¿Los fines de semana se dedican a viajar y a ir a ferias con sus vehículos?
-Acudimos donde nos invitan y si no quedamos para almorzar y vamos a algún pueblo que nos llame la atención.

-¿El mantenimiento de estos vehículos históricos es complicado?
-Lo complicado es cómo se compran. A veces no están bien y hay que desguazarlos completamente. Nadie te lo puede tocar, porque si tienes que restaurar un coche y tienes que llevarlo a que te lo hagan eso es impagable. Este Jensen hubiera ido a la chatarra. Los tenemos que arreglar entre nosotros. Algunos de nuestros asociados saber lo que no está escrito, pero claro pasa el tiempo y algunos van faltando, aunque también hay jóvenes que saben. Otros vehículos que han venido sí que estaban bien cuando se compraron.

-¿Hay gente joven a la que le interesan los vehículos históricos?
-Curiosamente nuestros hijos no están interesados pero sí que hay jóvenes a los que les gusta este mundo.

-Además del Jensen Healey, ¿tiene algún otro vehículo antiguo?
-Tengo un Ford Cortina, que tenía el motor reventado y también lo restauré. Es un Ford Cortina del 73 y también es emblemático. Lleva el mismo motor que llevaban los primeros Ford Sierra. Era tan bueno ese motor que luego lo pusieron en el Cortina.

-¿Han participado con sus vehículos en otras ediciones de la feria Antiquarius de Calamocha?
-En mi caso es el segundo año que vengo, porque nos invitan a esta feria y también hemos ido a la feria de Sariñena. Pero con esto de la covid, ha habido dos años en los que no podíamos ir a las ferias.

-¿Qué hicieron durante los años de la pandemia? ¿Pudieron salir?
-Lo que hacíamos era quedar unos pocos y nos íbamos a algún pueblo cercano, pero en petit comité.