Ana Belén Griñón Marín, astrofísica: “Me gustaría que cualquier niña luchara por lo que quiere y no se dejara cortar las alas”
“El ser humano es hoy lo que es gracias no solo a los hombres, sino a mujeres por desgracia olvidadas”Ana Belén Griñón Marín (Andorra, 1986) trabaja en el centro de excelencia Rosseland Centre for Solar Physics de la Universidad de Oslo (Noruega). Protagonista del mes de febrero del calendario Pioneras 2023, se sintió atraída por las estrellas desde niña y hoy se dedica a la pasión de su vida, la astrofísica.
-¿Tuvo algún referente femenino para decidir dedicarse a la astrofísica?
-Referente científica como tal nunca tuve cuando era una niña. Lo que sí tuve fue el ánimo, apoyo y ayuda de mis padres y hermanos, los cuales nunca me hicieron sentir inferior por ser mujer o me intentaron convencer de seguir otra carrera. No solo no me cortaron las alas, sino que me ayudaron a aletear y volar muy alto.
-¿Cree que es importante que existan esos referentes para potenciar la presencia de las mujeres en la ciencia?
-Sí, es muy importante que se sepa que tanto hombres como mujeres han logrado hitos muy importantes en la ciencia y que el hecho de ser de un género o de otro no debe influir en la publicidad que se haga de ellos. Lo importante es el avance que se hace científicamente hablando, por lo que si ese avance ha sido hecho gracias a una mujer, hay que dejarlo bien claro.
-¿Qué cree que hubiera sido de Einstein sin su mujer Mileva Maric?
-Nunca lo vamos a saber, tal vez Albert habría encontrado a otra persona que le ayudara o Mileva habría encontrado a un hombre como Pierre Curie que sí dio el sitio que se merecía a su mujer Marie. Lo que sí sabemos es lo que ocurrió y que no debería haber ocurrido. Esperemos que nunca más ocurra.
-La importancia de las mujeres en la astronomía ha sido grande.
-Creo que cada vez se van conociendo más nombres de mujeres que fueron muy importantes en la ciencia a lo largo de la historia. Sin embargo, todavía no lo suficiente y queda aún un camino largo que recorrer, en el cual debemos estar todos juntos para recordar a las nuevas generaciones que el ser humano es lo que es hoy en día gracias no sólo a hombres, sino también a mujeres muy importantes y, por desgracia, olvidadas.
-Por contra, científicas como Ruby Payne-Scott han sido fundamentales en el desarrollo de disciplinas como la radioastronomía, al ser las que impulsaron desarrollos científicos muy concretos, ¿Qué opina?
-Es cierto que hoy en día sí se reconocen trabajos y descubrimientos hechos por mujeres, tanto actuales como a lo largo de la historia, sin embargo estoy segura de que si pides a un grupo de personas que hagan una lista con nombres de científicos y científicas, un porcentaje muy alto de esos nombres van a ser de hombres. Por lo que todavía hay trabajo por hacer.
-Una de las grandes astrónomas que ha tenido España es Assumpció Català, que fue pionera en ámbitos como el estudio de las manchas del sol, que además es su campo de investigación. ¿Cómo debería visibilizarse más el trabajo de estas científicas?
-Poco a poco se van haciendo libros, películas, eventos públicos, actividades en los colegios… en los que se muestran y explican los logros que han conseguido grandes científicas a lo largo de la historia. Las nuevas generaciones ya están siendo criadas conociendo todas estas mujeres, por lo que creo que vamos por el buen camino.
-¿Cómo se siente al haber sido elegida para el calendario de Pioneras 2023, qué ha supuesto para usted?
-Muy agradecida e ilusionada. Cuando Belén Fuertes, jefa de la unidad contra la violencia sobre la mujer en la Subdelegación de Teruel, me llamó y me contó el proyecto, pensé que era una muy buena oportunidad de mostrar a las nuevas generaciones que hay mujeres que se dedican a trabajos que, en general, son ejercidos por hombres. Así que apenas lo pensé y acepté la propuesta.
-¿Le gustaría que eso inspirara y pudiera ayudar a las niñas y las jóvenes a optar a carreras científicas?
-Sí, pero sobre todo me gustaría que cualquier niña luchara por lo que quiere y no se dejara cortar las alas.
-¿Qué les aconsejaría?
-Que nunca se rindan, que todo lo que se propongan lo pueden conseguir. Si desean ser científicas, adelante, que “lo difícil se consigue, lo imposible se intenta”.
-¿Siente que lo ha tenido más difícil por ser mujer?
-Por suerte, nunca he sentido tenerlo más difícil por ser mujer; yo particularmente nunca me he sentido infravalorada o menospreciada.
-¿Somos conscientes de la aplicación práctica y de la importancia para nuestra vida cotidiana que tiene el campo de investigación al que usted se dedica, el de las manchas solares?
-Totalmente no. Siempre que doy charlas de divulgación intento expresar esa importancia dando ejemplos como el apagón que se produjo en Canadá en 1989 o el famoso evento Carrington, el cual dañó la tecnología más avanzada de la época, los telégrafos. Hoy en día dependemos a cada momento de aparatos electrónicos, los cuales dejarían de funcionar si se produjera una tormenta solar como la que se produjo en 1859.