El Lorca que bebió del surrealismo de Buñuel y Dalí cuando se alejó de ellos se presenta en Teruel
‘Así que pasen cinco años. Leyenda del tiempo’ podrá verse mañana en el Teatro Marín
Corría el año 1931, con una España sumida en un profundo cambio político y social con la llegada de la II República, cuando Federico García Lorca concluyó una de sus obras menos conocidas a la vez que más reveladoras de la personalidad del poeta y dramaturgo, Así que pasen cinco años. Leyenda del tiempo. La obra se representa mañana martes en el Teatro Marín de Teruel a cargo de la última promoción de la Escuela Municipal de Teatro de Zaragoza
Así que pasen cinco años, subtitulada a su vez Leyenda del tiempo, es una de esas piezas que aparecen citadas en todos los sitios pero que apenas ha sido representada por su complejidad técnica. Muestra a un Lorca que bebe del surrealismo de Buñuel y de Dalí y que se rebela contra el arte burgués, como habían hecho sus amigos de la Residencia de Estudiantes, con quienes en aquel momento estaba distanciado tras producirse un alejamiento.