Teruel vivirá su décima Baja Aragón con un nuevo récord de participación

La 39ª edición de la Baja-España Aragón volverá a poner a la provincia de Teruel en los GPS de los  mejores pilotos del planeta. La prueba por excelencia del off road nacional, que tendrá lugar los días 21 y 22 de julio, celebrará su décimo aniversario en la ciudad mudéjar con un nuevo récord de participación. 

La organización, a cargo de la empresa Octagon S2, confía en poder superar los 300 equipos inscritos para una de las carreras más prestigiosas del calendario automovilístico nacional y continental, que está dentro de las más importantes competiciones internacionales. Para una edición que tuvo que ser recortada de dos a tres días debido a la coincidencia con la jornada electoral prevista para el 23 de julio las principales novedades llegan de la mano de los coches eléctricos y de la etapa prólogo que determinará el orden de salida no solo para las motos, sino también para los automoviles.

Así lo confirmó Xavier Bartolí, presidente de Octagon S2, en la presentación que tuvo lugar ayer en el Salón de la Muralla de la sede del Gobierno de Aragón en Teruel, con presencia de Emma Buj, alcaldesa de Teruel; Manuel Rando, presidente de la DPT; José Ramón Morro, subdelegado de gobierno en Teruel; Arturo Aliaga, vicepresidente del Gobierno de Aragón y Consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial del Gobierno de Aragón; y Juan Esteve, director de relaciones institucionales de la Real Federación Española de Automovilismo. 

La Baja Aragón celebra su décimo cumpleaños en tierras turolenses y lo hace con una nueva edición que apunta a récord de participación. Un año más, la prueba por excelencia del off road contará con “los mejores pilotos del mundo”, aunque todavía no se desveló el nombre de ninguno de ellos debido a que el plazo de inscripciones todavía está abierto.

Como ya es habitual, tampoco se pudo conocer detalles del recorrido, pero sí que se supo que la 39ª Baja España-Aragón pasará por las comarcas de la Comunidad de Teruel, del Jiloca y de la Sierra de Albarracín, recorriendo un total de 600 kilómetros cronometrados. Un factor que aporta un gran atractivo a la prueba más importante de la provincia.

En la presentación, Manuel Rando reconoció la importancia la carrera y puso en valor la figura de Arturo Aliaga, que también recibió un reconocimiento por parte de la Real Federación Española de Automovilismo por su trabajo para “salvar” la Baja Aragón en las etapas más complicadas. Aliaga consideró que “sería un error que perdiéramos el camino andado”, ya que la cita del off road internacional es “barata para el impacto económico que tiene”. Siguiendo ese discurso, Emma Buj garantizó la continuidad de la prueba  “durante, al menos, los próximo cuatro años”, ya que es una de las citas “obligatorias del verano” tanto para la ciudad como para la provincia de Teruel.

El impacto económico de la prueba se sitúa por encima de los 18 millones de euros

Además de la importancia deportiva que adquiere la prueba, al ser la única del país puntuable para la Copa del Mundo FIA de Cross Country Bajas, la Baja España-Aragón volverá a generar un destacado impacto turístico y económico en la provincia. Xavier Bartolí situó la cifra por encima de los 18 millones de euros solamente en la ciudad.