Los veteranos del CD Teruel sucumben ante el Levante en Pinilla
El partido amistoso disputado ayer en Teruel cerraba la iniciativa La Noche Más Mágica de recogida de juguetesLos veteranos del CD Teruel se llevaron poco premio de un partido en el que se echaron a las espaldas el peso del balón. A pesar de que los rojillos se adelantaron en el marcador a los pocos minutos de haber regresado de los vestuarios tras el descanso, el Levante tiró de oficio y logró romper a los turolenses en el momento en el que más les dolió. Sin embargo, y a pesar de que los locales rozaron el empate en las últimas dos jugadas del encuentro, lo más destacado es la cantidad de juguetes que se recogió a la entrada dentro de la iniciativa La Noche Más Mágica, en favor de Cáritas Diocesana de Teruel.
Bajo un sofocante sol de diciembre, que arremolinaba al respetable en las pocas zonas de sombra de la grada, el equipo dirigido por Ángel Martín Aranda saltó al césped como un Miura, ansioso por resolver el encuentro cuanto antes. Sin embargo, y a pesar de que durante los primeros veinte minutos fueron numerosas las llegadas rojillas a la portería rival, ninguna de esas acciones llegó a suponer un peligro real para el portero levantino.
El Teruel lo intentó con todas sus fuerzas. Y ese fue el problema. El último cuarto de hora del primer tiempo se le hizo largo al conjunto rojillo que veía como Bernat empezaba a ser una amenaza para la portería de Bodo.
Tras el descanso, los turolenses volvieron a jugar un fútbol más incisivo, y cuando se cumplía el minuto 50 llegaba la primera ocasión de verdadero peligro de las botas de Adriana Martín, pero su disparo impactaba en la espalda de un defensa.
Sin embargo, Bernat respondía con un chut en una contra que detenía Bodo.
Y mientras el técnico visitante pedía tranquilidad desde la banda porque “se puede hacer daño”, Diego sacaba oro de un pase desde la línea de fondo de Raúl para abrir el marcador.
En esa coyuntura, y cuando parecía que el Levante acusaba la falta de recambios, Morís hacía buena una contra y batía a Merenciano, que no llegó a pesar de su estirada. Y cuando el Teruel aún no se había repuesto del susto, llegaba un cañonazo desde la frontal de Bernat que marcaba el 2-1.
Los de Martín Albelda no daban crédito a lo sucedido, pero tras unos momentos de duda se echaron hacia delante decididos a empatar el partido.
Monforte distribuía en el centro del campo buscando en exceso a Adriana, que bien cubierta tenía pocas opciones de jugar el balón.
Los últimos instantes del juego obligaron al portero del Levante a esmerarse para salvar un disparo desde fuera del área y un remate de córner, que tampoco se consumó.
El director de Cáritas Teruel, Juan Marco, presente en Pinilla, no ocultaba su felicidad por la cantidad de juguetes recogidos, habiéndose llenado una furgoneta, como el año pasado. Marco alabó la colaboración del voleibol, del fútbol y de la natación.