Tercera Federación: La vida en un solo partido

Han transcurrido ya las diez primeras jornadas de liga en el grupo aragonés de Tercera Federación, y todavía es tremendamente difícil saber qué equipos están llamados a estar en la zona alta y cuáles deberán luchar por la permanencia en una categoría de la que se esperaba igualdad y competitividad, pero no tanto el atasco visible en una tabla estresante y electrizante. Una victoria permite a cualquier equipo dar un salto de canguro en la clasificación, una derrota complica la dinámica de cualquiera, el empate es un interrogante ante un futuro que se escribe cada partido, casi en cada jugada.

Si no, que se lo digan al Calamocha. Entre empates y la derrota en casa ante el Brea, el equipo del Jiloca se había metido en posiciones de descenso. Nada que un triunfo no pudiera solucionar. Llegó este miércoles, en el partido aplazado por el temporal en el campo del Almudévar, y de un salto los de Lagunas se ponen décimos, con doce puntos. Y ya no es que estén en mitad de tabla, como el Utrillas, con la misma puntuación. Es que repetir esa victoria, volver a sumar de tres, colocaría a jiloquenses y a mineros directamente dirigidos hacia las posiciones de play-off.

Diez en tres puntos

En realidad, casi cualquier equipo de la Tercera aragonesa está en esa misma tesitura. Valgan dos datos: entre la cuarta plaza que ocupa el Andorra, con 17 puntos, y el primer puesto de descenso que castiga al Almudévar, con once unidades, apenas seis puntos de distancia en la que se agolpan trece equipos. Pero es que el atasco es monumental a partir de la séptima posición. La marca La Almunia, con catorce puntos. Con los del Jalón y hacia atrás, una decena de equipos en apenas un partido de distancia; trece puntos para Épila y Fuentes, doce para Calamocha, Utrillas, Zuera y Fraga. Once para Monzón, Tamarite y Almudévar.

La consecuencia directa es que la clasificación no termina de romperse en la zona alta, el Binéfar es el más destacado y el Ebro se anima en la persecución, pero el resto de puestos hacia el ascenso siguen muy accesibles, tanto es así que el Andorra puede ser cuarto habiendo ganado menos de la mitad de sus partidos gracias a que sigue siendo tremendamente difícil de batir, apenas contabiliza una derrota en sus diez primeros encuentros. Se sobrepuso bien tras caer en Fuentes, ganó holgado en casa ante el Tamarite y ello volvió a impulsarlo en la tabla.

Es el premio para los regulares, destacarse en un grupo en el que los favoritos no terminan de serlo y los supuestos modestos son duros y rocosos. Caspe y Cuarte no despegan, el Brea se embarra en el fondo del pozo de Tercera, y los recién ascendidos resulta que rinden como si llevaran toda la vida. El Andorra es el más destacado, pero ni La Almunia ni Zuera están mostrando signo alguno de sufrimiento en la categoría. Así que la liga está como si acabara de empezar. Andorra tiene tiempo, ganas y fútbol para seguir creciendo desde su atalaya. El Utrillas, agazapado, puede aguardar su momento. El Calamocha borró su crisis de un plumazo con cuatro de seis en dos partidos. Pero nada está decidido, ni arriba, ni tampoco abajo.

Los goleadores

La tabla de máximos goleadores de la Tercera División aragonesa muestra un nombre propio procedente de Utrillas, un artillero que con seis dianas se coloca segundo en busca del pichichi de la competición. Se trata de Daniel Martínez Semper, Paki, hombre-gol del Ebro que marcha también segundo en la propia clasificación. El utrillense está un gol por debajo de Samitier, el punta estrella del líder Binéfar, y uno por encima de los cinco que llevan el caspolino Rotellar y Novials, del Huesca B. Gol muy repartido en el resto, con Moha y Gracia como artilleros en el Andorra con tres dianas, las mismas que Torcal en el Calamocha y Muñoz en el Utrillas.