El CV Teruel inicia con mal pie su camino hacia el título. Los naranjas se vieron sorprendidos en su visita a Castellón donde LIlla Grau se quedó con la victoria, 3-1, después de algo más de dos horas de juego.
LIlla Grau se puso muy pronto por delante en el primer set. Ventaja que mantuvieron hasta los últimos compases de un parcial que terminaron dominando por 25-20. La segunda manga estuvo mucho más igualada. Los locales seguían por delante casi siempre e incluso Rivera tuvo que modificar sus planes iniciales introduciendo a César Martín como colocador. Tras llegar a igualar a 21 la incertidumbre se mantuvo hasta el 26-24 con el que se cerró el parcial.
El conjunto visitante recuperó la intensidad en el tercer set. Desde los primeros puntos las diferencias cayeron de su lado, ya con el capitán Thomas Ereu, ausente hasta ese momento, sobre la pista. El 16-25 final recortaba diferencias.
La igualdad presidió el cuarto set. Ninguno conseguía diferencias insalvables y ambos marchaban por delante en momentos puntuales, bien es cierto que los locales lo conseguían durante periodos más largos. De hecho llegaban al final con un marcador de 25-21que desató la euforia en el conjunto castellonense.
