El Club Voleibol Teruel ha entregado este lunes su novena Supercopa a la ciudad y a su patrona, Santa Emerenciana, en un acto atípico por la Covid-19 que ha arrancado poco antes de las siete de la tarde en la Diputación de Teruely que se ha prolongado en el Ayuntamiento y en la Catedral.
El equipo turolense ha sido recibido a las puertas del Palacio Provincial por el vicepresidente de la institución, Alberto Izquierdo, y el diputado delegado de Cultura, Turismo y Deporte, Diego Piñeiro, quienes han coincidido en poner en valor la labor del club y el “orgullo” que suponen para la ciudad y para la provincia.
“Sois un éxito que nos une, que lleva el nombre de la provincia y de la ciudad de Teruel por toda España, por lo que no podemos más que agradeceros lo que estáis haciendo por la provincia que, al final, es una promoción que nos cuesta poco y supone mucho”, ha dicho Izquierdo.
El presidente del club, Carlos Ranera, ha agradecido el recibimiento y ha reconocido que para ellos también es un “gran orgullo” poder llevar el nombre de Teruel, palabras similares a las que ha pronunciado después a las puertas del Ayuntamiento, donde ha continuado la visita y les ha recibido la corporación municipal.
Allí, Ranera ha tenido unas palabras de agradecimiento con la afición, por el “ejemplo de comportamiento” que tuvieron durante el partido, y ha destacado el trabajo de los jugadores y del cuerpo técnico, que “hicieron vibrar” al Pabellón Los Planos.
En la misma línea, la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha recordado que se trata de la quinta Supercopa consecutiva que ha conseguido el equipo y ha bromeado con que ya no sabía qué decir, porque en sus cinco años al frente del consistorio turolense había tenido que recibir este trofeo. “Lo cual me alegra enormemente”, ha indicado.
En entrenador del CV Teruel, Miguel Rivera, ha señalado que para ellos es un “honor” entregar la copa a la ciudad y ha destacado el trabajo de los jugadores, porque, según ha señalado, no solo ganan, sino que “trabajan de forma constante” para alcanzar la victoria.
También el capital del club, Thomas Ereu, ha reconocido que estaban “muy contentos” por brindarle la copa a la ciudad y ha manifestado que ya es como una tradición empezar la temporada ganando la Supercopa, por lo que espera que eso les augure buen año.
El Club Voleibol Teruel ha entregado este lunes su novena Supercopa a la ciudad y a su patrona, Santa Emerenciana, en un acto atípico por la Covid-19 que ha arrancado poco antes de las siete de la tarde en la Diputación de Teruely que se ha prolongado en el Ayuntamiento y en la Catedral.
El equipo turolense ha sido recibido a las puertas del Palacio Provincial por el vicepresidente de la institución, Alberto Izquierdo, y el diputado delegado de Cultura, Turismo y Deporte, Diego Piñeiro, quienes han coincidido en poner en valor la labor del club y el “orgullo” que suponen para la ciudad y para la provincia.
“Sois un éxito que nos une, que lleva el nombre de la provincia y de la ciudad de Teruel por toda España, por lo que no podemos más que agradeceros lo que estáis haciendo por la provincia que, al final, es una promoción que nos cuesta poco y supone mucho”, ha dicho Izquierdo.
El presidente del club, Carlos Ranera, ha agradecido el recibimiento y ha reconocido que para ellos también es un “gran orgullo” poder llevar el nombre de Teruel, palabras similares a las que ha pronunciado después a las puertas del Ayuntamiento, donde ha continuado la visita y les ha recibido la corporación municipal.
Allí, Ranera ha tenido unas palabras de agradecimiento con la afición, por el “ejemplo de comportamiento” que tuvieron durante el partido, y ha destacado el trabajo de los jugadores y del cuerpo técnico, que “hicieron vibrar” al Pabellón Los Planos.
En la misma línea, la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha recordado que se trata de la quinta Supercopa consecutiva que ha conseguido el equipo y ha bromeado con que ya no sabía qué decir, porque en sus cinco años al frente del consistorio turolense había tenido que recibir este trofeo. “Lo cual me alegra enormemente”, ha indicado.
En entrenador del CV Teruel, Miguel Rivera, ha señalado que para ellos es un “honor” entregar la copa a la ciudad y ha destacado el trabajo de los jugadores, porque, según ha señalado, no solo ganan, sino que “trabajan de forma constante” para alcanzar la victoria.
También el capital del club, Thomas Ereu, ha reconocido que estaban “muy contentos” por brindarle la copa a la ciudad y ha manifestado que ya es como una tradición empezar la temporada ganando la Supercopa, por lo que espera que eso les augure buen año.