El CD Teruel viaja a Caspe en un intermedio copero

Con la mirada fijada en el partido del domingo contra Utebo, el tercero de la ronda regional de la Copa federación, el CD Teruel de César Láinez viaja esta tarde hasta el campo de San Miguel para enfrentarse en un partido amistoso con el Caspe. Un choque en el que se darán minutos a algunos jugadores que no han disfrutado de tanto tiempo sobre el terreno de juego, se dará descanso a otros que llegan más castigados por la intensidad de la competición y en el que, sobre todo, se buscará afinar la puntería en los últimos metros del ataque rojillo para maximizar la rentabilidad ofensiva del equipo.
El CD Teruel podrá bajar un poco el pistón esta tarde en San Miguel, aunque el propio entrenador aseguraba ayer que “seguimos en la misma dinámica de hacer las cosas bien y, sobre todo, de ser más eficaces de cara al gol en los partidos en los que dominamos, pero también dosificar los minutos a la gente”.
Láinez llegará con cuatro inquilinos en la enfermería. Edu Cabetas regresó al vestuario rojillo con un esguince de tobillo producido mientras entrenaba este verano, y aunque se ha perdido los primeros partidos con sus compañeros, y es poco probable que pueda participar esta tarde, sí que podría saltar al terreno de juego el domingo. El recién llegado Maxi Rosales sufre molestias en un gemelo desde hace unos días tras uno de los primeros entrenamientos con sus nuevos compañeros. Además, Fran se recupera del traumatismo que sufrió en el último partido en uno de sus tobillos y que obligó a su sustitución. Por último, Luis  Hernaiz también tiene molestias que aconsejan ser prudente en cuanto a su carga de trabajo.

En busca de la eficacia
Entre las conclusiones que ha podido extraer el cuerpo técnico del CD Teruel tras el empate registrado el domingo frente del Borja está la necesidad de mejorar la efectividad del ataque del equipo. “Llegamos al borde del área pero nos cuesta hacer gol. Tenemos que ser más eficaces en esas situaciones en las que estamos dominando al rival”, explicó el míster que, no obstante, se mostraba satisfecho porque “muchas de las cosas que queremos hacer, la gente las está haciendo”.  Esta tarde en Caspe, el CD Teruel llegará con “otro tipo de planteamientos” respecto de los que tenía en el último  encuentro en el “en la primera parte defensivamente estuvimos bien plantados y en la segunda les esperábamos en ampo contrario y robábamos el balón, lástima que no estuvimos un poco más certeros en el gol”.
Después de haberse medido al Castellón, un equipo llamado a estar en la mitad alta de la tabla de Segunda B, al Brea en dos ocasiones con sendas victorias o al robusto Borja, el partido de mañana tendrá al CD Teruel como más que probable dominador del juego, aunque el entrenador quiere evitar que eso se convierta en un arma de doble filo y tratará de mantener activada la concentración de sus jugadores durante todo el encuentro para evitar errores o, lo que sería peor, lesiones. “Lo que queremos es concretar todo lo que se está haciendo bien”, explicó Láinez.