El Calamocha apura sus agónicas opciones en la última jornada

La situación del Calamocha se ha tronado crítica. Casi  desesperada después de que le pasado fin de semana no lograse sumar los tres puntos y cayese derrotado en Binéfar. El equipo del Jiloca depende ahora de lo que hagan los demás, eso sí, siempre contando con que este domingo despida la temporada con una victoria.

El Calamocha cerrará la campaña en Jumaya con la complicada visita del Robres para intentar una carambola que le permita mantenerse en la máxima categoría del fútbol regional.

Después de haberse asegurado el quedar fuera de las plaza de descenso directo. los pupilos de Dani González suspiran ahora por no caer eliminados por los arrastres que puedan provocar los equipos de Segunda RFEF que pierdan la categoría. Con el Ejea matemáticamente descendido, ahora las expectativas calamochinas pasan porque Dani Aso logre que el Huesca B protagonice un buen final de competición y logre sacar al filial oscense de la zona de descenso y que ni el Tarazona ni el Brea pierdan su puesto en Segunda RFEF.

Una situación que sí podría verse aliviada si finalmente es un equipo del grupo aragonés el que suba en los playoff de ascenso.

El propio entrenador aseguraba que el equipo se ha repuesto del bajón experimentado hace dos semanas, cuando pinchó contra el Cuarte en el que posiblemente fuera el peor partido del equipo esta temporada. El técnico aseguraba que la plantilla esta “mirando más para arriba. Esperando que vengan resultados favorables” y celebró el que el Calamocha ha “salvado el descenso directo” para estar ahora pendiente de “qué pasa con los arrastres”.

En esta coyuntura, los de Jumaya disputarán la última jornada de la competición sin conocer cual será su futuro, que se decidirá por lo que ocurra en  las próximas semanas en el Grupo III de la Segunda RFEF. “Van a pasar por lo menos quince días sin que sepamos cual es el futuro del Calamocha”, reconocía al respecto el técnico calamochino sobre una situación que calificó de “cruel”.

El entrenador del Calamocha recalcó la importancia de los tres puntos en disputa este domingo. “Hay que salir a ganar porque nunca se sabe qué puede pasar”, aseguró Dani González, sin rebajar un ápice la tensión del partido.

Sin embargo, la atención del Calamocha deberá estar en otros terrenos de juego, tanto de su categoría como de la Segunda RFEF.

Última semana de trabajo

El inminente final de la competición no ha supuesto un cambio en la rutina de entrenamientos del Calamocha que ha vivido estos días como “una semana más de trabajo”, relató González, que aseguró que “según el planning de toda la semana ha sido como una semana más” para afrontar el encuentro del domingo contra el Robres “como un partido más” sin “nada especial”.

El equipo “sabe que cada vez tiene menos balas y que la última es esta”, explicó el técnico. “El equipo sabe que tenemos que salir a ganar. No hay otra”, resumió el míster.

El viernes se celebró el último entrenamiento del equipo antes de que el Calamocha de por terminada su temporada. 

Efectos colaterales

El futuro inmediato del primer equipo del Calamocha podría condicionar la proyección del de Primera Regional. 

El nuevo entrenador del filial, Dani González, sigue así trabajando en la sombra para el segundo equipo calamochino ya que una eventual pérdida de categoría del Calamocha de Tercera podría cortar la progresión de la segunda estructura, que después de haber liderado la clasificación buena parte de la temporada, ahora lucha por una plaza en Regional Preferente. “El objetivo es también salvar este equipo para que el otro pueda hacer su liga normalmente y pueda luchar por el ascenso”, dijo González.