Derrota inesperada del Pamesa Teruel en casa del colista (3-1)

Inesperada derrota del Pamesa Teruel en Lugo ante un colista que no pareció serlo en todo el partido. El Arenal Emevé supo contener un buen inicio del Pamesa Teruel, aprovechó los numerosos errores no forzados de los aragoneses y terminó sobrepasando al conjunto de Maxi Torcello, que suma su segunda derrota de la temporada.El duelo ante el  colista era una prueba de fuego para los muchachos de Maxi Torcello. Era un encuentro para no cometer errores y acabar con esos problemas de regularidad que le estaban costando puntos al Pamesa Teruel. 

Con la camiseta gris, el conjunto turolense saltó a la pista del Arenal Emevé con ganas. Lo demostró en el inicio, sumando el primer punto del encuentro. Sin embargo, su rival también comenzó con buen pie y puso en apuros el bloqueo de Xavi Fresquet, que partió como titular dejando a Áxel Téllez en el banco. Tampoco jugó de inicio Zelayeta, después de regresar del Panamericano.

Tras el tanteo de los primeros puntos, en los que el Arenal Emevé estuvo a la altura de su rival, los locales supieron encontrar las debilidades del equipo de Maxi Torcello y se pusieron por delante, obligando a detener el encuentro al técnico argentino. Los lucenses se fueron a tres puntos y la cosa se puso cuesta arriba en el primer set. Tan solo Aharón Gámiz estaba jugando a su nivel habitual, salvando en varias ocasiones a su equipo. Le faltaba conectar al equipo naranja si no quería sufrir más de la cuenta ante el colista.

Una tímida reacción, con Emilio Ferrández encabezando el ataque, hizo que el cuadro local también pidiese una pausa que le sentó de maravilla. Desde el tiempo muerto, Arenal Emevé encontró su mejor versión gracias a las labores de Linares, que fue el mejor de los suyos.

Los de Lugo se fueron en el marcador y llegaron a estar cinco puntos por delante. La situación era inesperada y compleja para el equipo aragonés, que pudo recortar diferencias para llegar con vida a la recta final de la primera manga. Sin embargo, un error garrafal de Miguel Ángel Martínez puso el 24 en el casillero de los de casa, que aprovecharon el regalo y se llevaron el primer parcial de la tarde (25-21).

Una marcha más

Ante un Arenal Emevé muy serio, el Pamesa Teruel tenía que meter una marcha más. Miguel Ángel Martínez empezó el segundo set dejando claro que el equipo quería reaccionar, con un potente remate. El colombiano empezó a conectar cañonazos por encima del muro lucense y el cuadro turolense empezó a carburar.

No obstante, los de José Valle seguían encontrando premio con los ataques de Frías, que encadenó varias buenas acciones para igualar el electrónico (3-4). Un trabajado ataque de los de Torcello pudo ser el punto de inflexión. Con dos de ventaja en el marcador, el Pamesa empezó a hacerse fuerte sobre la pista y el Arenal Emevé ya no atacaba con tanta comodidad como se había visto en la primera manga. Con Miguel Ángel Martínez enchufado el panorama era bien distinto. El colombiano lo hacía todo: remataba, bloqueaba y obligaba a pedir tiempo muerto a José Valle (5-9).

Pero cuando mejor parecía estar jugando el bloque de Torcello, el panorama volvía a ponerse complicado. Los locales lograban  acabar con el buen momento de los turolenses con un Juanfran Frías magistral (10-10). Los siguientes puntos cayeron del lado visitante para alivio de un Maxi Torcello al que le tocó pedir tiempo muerto para reorganizar ideas. Víctor Méndez y Rubén Lorente estuvieron muy acertados en la red y le dieron un par de tantos a su equipo. El bloqueo naranja funcionaba y el set se le volvía a poner de cara al Pamesa (12-16).

Lorente dirigía el juego del bloque de Torcello a las mil maravillas. El colocador llevaba la batuta y ponía la bola en el lugar que quería en cada punto. En el saque también estuvo acertado y con su rotación el Pamesa llegó hasta el vigésimo punto con seis de ventaja (14-20). Arenal Emevé bajó la intensidad y el Pamesa Teruel supo aprovecharlo. La segunda manga subió al marcador visitante después de un dominio apabullante, sobre todo en la segunda mitad del set. Ese era el camino (17-25).

El set que lo cambia todo

El tercer set comenzó con igualdad, pero con el equipo de casa marchándose tímidamente en el marcador. Los primeros puntos fueron para un Arenal Emevé que volvió a ser capaz de encontrar las fisuras en el bloqueo de los naranjas. Con un par de block outs, el cuadro de José Valle obtuvo una renta de dos puntos, que terminó siendo solo de uno debido a un error en el marcador (4-3).
Víctor Méndez volvió a hacerse gigante en la red para darle la vuelta al electrónico y poner a los suyos con la misma ventaja de la que disponía el Arenal tan solo unos minutos antes (4-6).
La diferencia era mínima, pero el Pamesa Teruel parecía estar convencido de que quería llevarse el triunfo de Lugo. Aharón Gámiz se encargaba de defender para que Miguel Ángel Martínez, Emilio Ferrández, Vildósola y Víctor Méndez llevasen la iniciativa a la hora de atacar. Con esas piezas, el cuadro turolense abrió la brecha hasta los tres puntos y obligó al entrenador local a pedir un tiempo muerto (7-10).

Una pipe de Emilio Ferrández dejaba claro de que la cosa funcionaba a pesar de que la renta no subía de los dos puntos. El choque estaba muy parejo y cualquier detalle podía marcar las diferencias. Un block out y un saque directo dejaron al Arenal Emevé a tan solo un punto del Teruel. En el siguiente punto, un penalti bien finalizado por el conjunto local instalaba el empate en el marcador y el nerviosismo en el banco de Torcello, que detenía el compromiso con un nuevo tiempo muerto (16-16).

Los errores individuales volvieron a suponerle una losa muy pesada al Pamesa Teruel en esta fase del encuentro. Los lucenses llegaron a los veintes con dos de ventaja, por lo que la presión era para los visitantes. Los puntos estaban en juego (21-19). En la recta final, el Arenal no se puso nervioso al verse por delante en el marcador y de hecho se puso con bola de set. Linares desaprovechó su saque y Ferrández forzó un block out salvador para devolver el empate (24-24).

Sin embargo, Linares se repuso de su propio error y trabajó para tener la tercera bola de set a su favor. El fallo en el servicio mantuvo vivo al Pamesa Teruel, que, por medio de Miguel Ángel Martínez logró ponerse un punto por delante solo por un momento.  El cuadro lucense aprovechó una free y volvió a tener opción de cerrar el tercer parcial. Schulz hizo el punto 28 y dejó al Pamesa Teruel sin opciones de sumar los tres puntos en casa del colista (28-26).

Desconexión total

Aunque el equipo de Torcello no estaba jugando nada mal, el marcador no le resultaba favorable. Y eso hacía que la situación fuese complicada para los aragoneses. En la cuarta manga, el Pamesa tenía que ganar para poder conseguir al menos dos puntos de su visita a Lugo. 

No obstante, el comienzo de set no fue el esperado, ya que el Arenal Emevé se puso dos puntos por delante y Maxi Torcello tuvo que volver a detener el duelo. El tiempo muerto le sentó bien al conjunto visitante que puso la igualada con un par de buenas acciones. Sin embargo, las rachas se intercambiaban a un lado y a otro de la red, por lo que los puntos subían de uno en uno al marcador (6-5).

Una vez más, los errores no forzados le pasaban factura al Pamesa Teruel, que veía como su rival se marchaba a dos puntos. Maxi sentaba a Fresquet y le daba entrada a Áxel Téllez, que todavía no había jugado. El mexicano le daba oxígeno a los suyos con un buen bloqueo en la red. El cambio funcionaba, pero el saque seguía fallándole al Pamesa Teruel (12-9). Téllez insistía en reducir las diferencias, pero Linares y Frías volvían a sacar su mejor versión para ampliarlas. Cuatro puntos arriba el Arenal cuando el cuarto set ya había superado su ecuador. La victoria cada vez parecía más lejana (17-14).

El Pamesa se iba saliendo poco a poco del partido a medida que el cuadro local sumaba puntos y se acercaba al 20. El choque no estaba visto para sentencia, pero poco le faltaba (19-15). Ya nada le salía al Pamesa Teruel y Maxi Torcello buscaba una última alternativa con Guillem Pont. El árbitro colaboró con una decisión polémica que aumentó la ventaja de los locales hasta los seis puntos y terminó de hundir a los naranjas (22-16). En un último intento, el conjunto turolense se acercó, pero finalmente fue el conjunto de Lugo el que terminó llevándose los puntos. La tarde para el Pamesa Teruel terminó siendo del mismo color que su camiseta, gris.