El último triunfo del CD Teruel ante un rival de procedencia catalana fue el 12 de marzo ante el Badalona Futur. Antonio García/Bykofoto
Cuatro años y medio sin caer en Pinilla ante un rival catalán
22 victorias y 10 derrotas del CD Teruel en casa contra equipos de Cataluña
Pinilla no es un lugar agradable para los rivales del CD Teruel. Bien lo saben los últimos diecinueve equipos que han visitado el feudo del Ensanche, ya que todos ellos se han marchado sin poder sumar los tres puntos. El próximo en hacerlo será el Gimnástic de Tarragona, que llegará con el doble objetivo de acabar con la imbatibilidad del cuadro rojillo ante su afición y de paso mejorar los registros de los equipos catalanes a su paso por la capital mudéjar. Desde mayo de 2019, el CD Teruel no cae ante un rival de la comunidad vecina y el saldo de enfrentamientos es positivo, ya que el conjunto turolense suma un total de 22 victorias, 14 empates y 10 derrotas frente a equipos de Cataluña.
El encuentro del próximo domingo ante el Gimnástic de Tarragona se le presenta al cuadro de Víctor Bravo como una buena oportunidad para mantener el buen rendimiento como local, que el conjunto rojillo mantiene desde hace dos temporadas.
Y puede hacerlo ante un rival cuya procedencia se le da bastante bien a los turolenses. El cuadro de Pinilla se ha enfrentado a lo largo de toda su historia en 46 ocasiones oficiales ante equipos catalanes como local, llevándose el triunfo en un 47% de los enfrentamientos y empatando en otro 30% de los compromisos disputados en territorio turolense. Las derrotas ante conjuntos procedentes de Cataluña en Pinilla solo ocupan un 22% del total de duelos disputados.
Las cifras son esperanzadoras. Para encontrar la última vez que el equipo rojillo cayó en su feudo ante uno de la comunidad catalana hay que retroceder casi cuatro años y medio en el tiempo. Concretamente, la última derrota del CD Teruel ante un cuadro de esta procedencia fue el 4 de mayo de 2019, cuando el Olot dejó en la cuerda floja al equipo aragonés y selló su permanencia en la Segunda B al endosarle un doloroso 1-4 .
Esa temporada, precisamente, fue la que contó con más tropiezos del CD Teruel ante conjuntos catalanes. El primero llegó en octubre de 2018, en la décima jornada de competición ante el CF Peralada; el segundo fue en diciembre frente al Espanyol B, con victoria ante el Barça B de por medio; y el tercero, y previo al del Olot, fue en Enero de 2019, en el primer encuentro del año ante el Cornellà.
Antes del regreso al fútbol nacional en la temporada 2010-2011, el CD Teruel cayó en Copa del Rey en septiembre de 2001 ante el Figueres por 1-2 en el campo de Pinilla antes de llevarse una tunda (8-0) en su visita al Alt Empordá.
La mejor forma de redimirse fue superando a L’Hospitalet en la primera visita de un equipo catalán a Pinilla de los últimos veinte años, con gol de Arcega. Esa campaña, los turolenses ganaron dos, perdieron dos y empataron tres de sus duelos directos ante oponentes de Cataluña en su campo. Un año más tarde, el CD Teruel demostró tenerles tomada la medida, ya que solo cayó en una ocasión a pesar de terminar perdiendo la categoría (ante el Reus Deportiu en la tercera jornada por 0 goles a 3).
Después de ese curso, los rojillos solo se enfrentaron a equipos de Cataluña en diferentes fases de la Copa Federación. En el 2012, el equipo venció en Pinilla al Badalona, contra el que también empató en 2017. En el año 2018, ya de vuelta en la Segunda RFEF, los turolenses vencieron en la competición copera al Cornellá en casa.
El año pasado, los turolenses cosecharon registros similares con tres triunfos y cuatro empates jugando ante su público ante clubes de Cataluña.
El domingo en Pinilla surge una nueva posibilidad de prolongar la buena dinámica ante rivales de una zona geográfica que exporta talento y fútbol a raudales, pero que no son capaces de adaptarse al bloque turolense cuando acuden a sus dominios.
El encuentro del próximo domingo ante el Gimnástic de Tarragona se le presenta al cuadro de Víctor Bravo como una buena oportunidad para mantener el buen rendimiento como local, que el conjunto rojillo mantiene desde hace dos temporadas.
Y puede hacerlo ante un rival cuya procedencia se le da bastante bien a los turolenses. El cuadro de Pinilla se ha enfrentado a lo largo de toda su historia en 46 ocasiones oficiales ante equipos catalanes como local, llevándose el triunfo en un 47% de los enfrentamientos y empatando en otro 30% de los compromisos disputados en territorio turolense. Las derrotas ante conjuntos procedentes de Cataluña en Pinilla solo ocupan un 22% del total de duelos disputados.
Las cifras son esperanzadoras. Para encontrar la última vez que el equipo rojillo cayó en su feudo ante uno de la comunidad catalana hay que retroceder casi cuatro años y medio en el tiempo. Concretamente, la última derrota del CD Teruel ante un cuadro de esta procedencia fue el 4 de mayo de 2019, cuando el Olot dejó en la cuerda floja al equipo aragonés y selló su permanencia en la Segunda B al endosarle un doloroso 1-4 .
Esa temporada, precisamente, fue la que contó con más tropiezos del CD Teruel ante conjuntos catalanes. El primero llegó en octubre de 2018, en la décima jornada de competición ante el CF Peralada; el segundo fue en diciembre frente al Espanyol B, con victoria ante el Barça B de por medio; y el tercero, y previo al del Olot, fue en Enero de 2019, en el primer encuentro del año ante el Cornellà.
Estadísticas con historia
Sin embargo, ese curso es un simple borrón en la impecable lista de enfrentamientos del CD Teruel en Pinilla a lo largo de su historia. Echando la vista atrás, en la campaña 1998-1999, primera en la que se veía las caras ante equipos de Cataluña, el bloque aragonés cosechó cuatro victorias, un empate y solo una derrota como local. También caería solo en una ocasión ante un equipo catalán en la 1989-1990, aunque en esta ocasión el grupo lo conformaban equipos de diferentes regiones españolas y el Lleida era el único representante de la comunidad catalana.Antes del regreso al fútbol nacional en la temporada 2010-2011, el CD Teruel cayó en Copa del Rey en septiembre de 2001 ante el Figueres por 1-2 en el campo de Pinilla antes de llevarse una tunda (8-0) en su visita al Alt Empordá.
La mejor forma de redimirse fue superando a L’Hospitalet en la primera visita de un equipo catalán a Pinilla de los últimos veinte años, con gol de Arcega. Esa campaña, los turolenses ganaron dos, perdieron dos y empataron tres de sus duelos directos ante oponentes de Cataluña en su campo. Un año más tarde, el CD Teruel demostró tenerles tomada la medida, ya que solo cayó en una ocasión a pesar de terminar perdiendo la categoría (ante el Reus Deportiu en la tercera jornada por 0 goles a 3).
Después de ese curso, los rojillos solo se enfrentaron a equipos de Cataluña en diferentes fases de la Copa Federación. En el 2012, el equipo venció en Pinilla al Badalona, contra el que también empató en 2017. En el año 2018, ya de vuelta en la Segunda RFEF, los turolenses vencieron en la competición copera al Cornellá en casa.
Idilio en los últimos años
A partir de entonces, el cuadro de Pinilla vivió sus mejores años como local ante equipos de procedencia catalana. En su primer año en la nueva categoría el CD Teruel venció cuatro de sus siete compromisos ante catalanes y empató los tres restantes.El año pasado, los turolenses cosecharon registros similares con tres triunfos y cuatro empates jugando ante su público ante clubes de Cataluña.
El domingo en Pinilla surge una nueva posibilidad de prolongar la buena dinámica ante rivales de una zona geográfica que exporta talento y fútbol a raudales, pero que no son capaces de adaptarse al bloque turolense cuando acuden a sus dominios.
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