Teruel se vuelca con el comienzo de la sexta edición del rally de cine Desafío Buñuel

Los cinco equipos participantes en el Rally Cinematográfico Desafío Buñuel 2023 tomaron ayer la salida en la particular competición que convierte anualmente a la ciudad mudéjar en un gran plató de rodaje, con 48 horas por delante -ya han consumido la mitad- de las que tendrán que extraer petróleo para rodar, montar y sonorizar un cortometraje.

Justo antes de la tomar la salida, a las 12 horas desde la plaza del Torico en un acto presentado por el cómico aragonés Rafa Maza, que contó con la presencia de la alcaldesa turolense Emma Buj y el director de Desafío Buñuel, Pimpi López Juderías, los cinco actores profesionales que participan -uno en cada equipo-, visitaron el Mausoleo de los Amantes y ofrecieron una rueda de prensa para compartir sus sensaciones previas al inicio del certamen.

El gran Guillermo Montesinos, inolvidable soldado republicano de La Vaquilla de Belanga o el taxista de Mujeres al borde de un ataque de nervios de Almodóvar, entre otros muchos papeles, aseguró que “Desafío Buñuel no es inaudito pero sí extraordinario”, y valoró un concurso en el que “hay que hacer un corto como se hacen los largos, con calidad y profesionalidad”. El de Castellón reclamó además que iniciativas como Desafío Buñuel “tengan un poco más de atención mediática en el contexto español, porque es mucho más reconocido en México que en la provincia de al lado”.

Alicia Orozco, veterana actriz que debutó con seis años, hace ahora 67, y que acaba de representar a Sor Bernarda en el musical La Llamada y rodar en series de TV como Hit, aseguró sentirse “como Bette Davis, entre tanta gente joven con ganas de hacer cosas”, y entre bromas aseguró que el próximo año regresará a la séptima edición del certamen “aunque sea como acomodadora”.

Jimmy Barnatán actuará a las órdenes de Ferrán Brooks en Solo te pedí las putas llaves, y explicó ayer que el cine “no solo ayuda a cumplir los sueños personales, que es lo de menos, sino que nos permite convivir con alegría y siendo mejores personas”.

Mamen Camacho, que dio vida a Rosalía Ortiz en Gran Reserva y Esperanza Beltrán en Servir y proteger de TVE, explicó que el cortometraje que protagonizará, Y un jamón de Chus Verdú Seva, “es divertidísima aunque no quiero desvelar nada”, si bien “lo realmente divertido va a ser esta locura de rodar en dos días. Ponerse de acuerdo varias personas que no se conocen para materializar una idea y convertirla en una película es precioso”.

Por su parte Juancar Vellido, conocido por películas como No somos nadie de Jordi Mollá o El espinazo del diablo de Guillermo del Toro, se mostró fascinado por “el reto maravilloso de tener que contar una historia, en solo 48 horas y con un equipo de profesionales a los que acabo de conocer”. “Esto no es competir”, afimó Vellido, “sino compartir”. Vellido participa con el equipo que dirige el mexicano Pato Rivera (El mal de Inés), que logró el billete para el VI Desafío Buñuel tras ganar la pasada primavera la primera edición del festival hermano Desafío Buñuel México.

Los guiones participantes reúnen algunas características que tienen que cumplir para participar. Entre otras cosas tiene que aparecer obligatoriamente un jamón, un colgante diseñado por Joyería Tena y un automóvil, además de una serie de localizaciones interiores y exteriores en las que Teruel sea reconocible. Y otra condición es que deben estar de algún modo inspiradas en el cine de Luis Buñuel, en concreto en la película El discreto encanto de la burguesía, ganadora de un Óscar hace ahora medio siglo. Alicia Orozco afirmó que La señora, el corto que está rodando con la directora pucelana Sofía Corral, “no tiene nada de burgués y poco de discreto, pero es encantador”, y Barnatán aseguró que “el propio reto que plantea el Desafío Buñuel ya es lo suficientemente surrealista”. Según el actor y cantante “si había algo que caracterizaba a Buñuel y su obra es la libertad, y en esta ocasión los directores van a tener el campo libre para ser libres creando, con la ayuda de los actores, que no somos más que estorbos imprescindibles”.

Sobre la dificultad de crear un corto en 48 horas, Montesinos, que está rodando La ceremonia del círculo a las órdenes de la aragonesa Marina Badía, aseguró que “es un gran ejercicio para los actores y el resto del equipo”. “El cine se caracteriza no por la improvisación, pero sí por la rapidez. Pero la rapidez para reflexionar y hacer las cosas bien y de forma profesional”. Barnatán coincidió y matizó que “no está mal que al actor se le ponga un petardo en el culo para que espabile y se le quite la tontería”.

A este respecto, el director de Desafío Buñuel, Pimpi López, añadió que “aunque el cortometraje en sí se va a rodar, montar y sonorizar en 48 horas, ya hay mucho trabajo previo, de meses”. Se refirió a la preproducción que han llevado a cabo el auxiliar de dirección turolense con el que cuenta cada equipo, “que se han encargado de pedir permisos, buscar localizaciones y dejarlo todo listo”.

Este año esos auxiliares son Elena Joven (La señora), Ángela Ripoll (Y un jamón), Mónica Górriz y Claudia Bellosta (El mal de Inés), Maite Joven (Solo te pedí las putas llaves) y Sixto Abril (La ceremonia del círculo).

Actividades paralelas

Los equipos competidores deberán entregar el cortometraje montado y sonorizado a las 12 horas de mañana, sábado, antes de que ya por la noche se conozca el veredicto del jurado, en una gala abierta al público que tendrá lugar en el auditorio del parque de Los Fueros. Ayer dedicaron todo el día en rodar en interiores y exteriores distribuidos por todo Teruel, mientras en el Teatro Marín se proyectaba El discreto encanto de la burguesía y Alberto Cobos, director gerente de la Fundación Dinópolis presentaba el último hallazgo de los investigadores turolenses, el de un gran ornitópodo, Oblitosaurus bunnueli, bautizado en homenaje al director de Calanda.

La proyección de una selección de cortometrajes del Festival Internacional de México y el concierto de Joel Reyes pusieron el punto final a la noche.

Jornada de hoy

Durante la jornada de hoy, mientras los directores, técnicos y actores apuran las últimas horas de trabajo, se realizarán cuatro actos abiertos al público en el Jardín de San Pedro, que es el centro neurálgico del Desafío Buñuel. A las 18 horas se presentará el monográfico Buñuel y la Literatura, 40 años de la revista Turia, a propósito de las cuatro décadas que este año cumple la revista literaria editada en Teruel y dirigida por Raúl Carlos Maícas. A partir de las 19.30 horas se proyectará el documental Goya, el ojo que escucha, de José Luis López-Linares, presentado por la productora ejecutiva Ruth Gabriel. El documental es un homenaje a Jean-Claude Carrière (1931-2021), el que fue guionista y brazo derecho de Luis Buñuel, que en su último viaje a España revisitó los lugares icónicos de Goya para interpretar la pintura del aragonés desde su punto de vista único y genuino.

La proyección de una selección de cortometrajes que han participado en anteriores ediciones de Desafío Buñuel, a las 22.15 horas, y un concierto de Jhana Beat, a partir de las 23.15 horas, cerrarán la jornada de hoy.