Más de mil personas asisten al doble concierto navideño de la Banda Santa Cecilia de Teruel
Se celebró en el Teatro Marín
Segundo de Chomón pululó de nuevo por Teruel durante el concierto navideño de la Asociación Cultural Banda Santa Cecilia con la proyección de su corto La casa encantada, sobre el que se había adaptado música de banda. La temática de esta película rodada en 1907 se ajusta a la perfección al concierto de terror que por la tarde ofrecieron, en dos sesiones consecutivas, los músicos de Santa Cecilia.
Este no fue el único guiño al cine, ya que hasta el Teatro Marín también se desplazaron Mickey Mouse, el Pato Donald Goofy o Buster Keaton, cuyo cine mudo sirvió de compañía visual al viento, la cuerda y la percusión. “Hace varios años que hacemos homenajes al cine mudo”, relató Sebastián Guitarte, presidente de la asociación cultural Banda de Santa Cecilia.
El terror fue el leitmotiv de un concierto que está planteado para entretener a toda la familia, por lo que las piezas interpretadas no causaron un gran pánico en la sala pero sí muchas sonrisas y sonoros aplausos. Guitarte explicó que algunas de las partituras interpretadas han sido utilizadas para películas míticas como Los Gremlins o Cazafantasmas, pero no todas las piezas que tocaron eran temas de película.
La nota más alegre la pusieron Diego Monleón y Carlos Hernández, que usaron como instrumento solista un par de lijas. Los dos lijadores demostraron ante un sorprendido público que casi cualquier objeto sirve para hacer música. “Se trata de guiños graciosos que se ajustan muy bien a este concierto”, explicó Guitarte, quien recordó que en anteriores recitales navideños arrancaron notas a tazas de té o incluso máquinas de escribir.
Algunos de los músicos de la banda cumplieron ayer un doble papel artístico: musical –por un lado– y escénico, por otro, ya que se convirtieron en actores para meterse en el mono de los Cazafantasmas.
Como maestros de ceremonias actuaron los dos payasos Fornigas en Renglera, que fueron los encargados de ir hilando todas las piezas hasta completar un concierto que, un año más, sorprendió al público.
En total al escenario del Teatro Marín se subieron un centenar de músicos a los que la actuación les valió un doble aplauso porque se realizaron dos sesiones. “Ya llevamos varios años que duplicamos las sesiones para poder atender a todos los interesados y aún así se llenan las dos”, comentó el responsable de la Banda de Música Santa Cecilia.
Guitarte reconoció que se trata de uno de los conciertos favoritos para los músicos de la banda porque “aunque todos tienen algo especial, el de Navidad está lleno de magia y cosas divertidas”.
Dos sesiones completas
Las entradas para la sesión de las 19 horas estaban agotadas desde hace varios días mientras que poco antes de iniciarse el concierto de las 17 horas a penas quedaban una veintena de localidades libres. El concierto lo disfrutaron 1.100 personas que abonaron un precio simbólico de 3 euros por la entrada.
El dinero recaudado se destinará íntegramente a Manos Unidas y la Asociación Española Contra el Cáncer, “ya que ambas ONG cumplen este año su 60 aniversario”, justificó Sebastián Guitarte.
