Los poetas de Teruel salen del ostracismo con el espíritu de Lennon en el ambiente

Dicen que los versos tienen poco público, pero el ciclo Poesía y más echa por tierra esa afirmación en cada una de sus reuniones. Un pequeño escenario, un micro y el espíritu de John Lennon en el ambiente es todo lo que hace falta para arrancar los poemas más desnudos, algunos satíricos, otros descarnados, de los creadores turolenses. Para muchos poetas resulta difícil salir del ostracismo y hay quienes guardan para sí los escritos más íntimos, otros prácticamente todos los sentimientos que ponen sobre el papel, pero también los hay que disfrutan compartiendo  su lírica. Más de medio centenar de personas acudieron este sábado al ciclo Poesía y más en el pub Lennon  de la capital, donde se escucharon poemas inspirados por amigos, abuelas, madres, rock metal o el análisis poético.

Poesía y más es un ciclo organizado por la Plataforma de Poetas por Teruel, que aglutina a 45 escritores de toda la provincia. Nacho Escuín, que es uno de los impulsores, destaca la importancia que tiene el colectivo para reforzar “ese sentimiento de unión” entre los turolenses apasionados por la literatura. “Es muy importante porque hay mucha gente haciendo cosas, pero de forma desordenada”, relata, para añadir que el interés existente por la poesía queda patente en el éxito de público que tienen todos los encuentros.  Escuín comenta que, entre los integrantes, hay personas “con una vocación más profesional” y libros publicados, pero otros que se van sumando al calor de los versos de los compañeros.

Un sueño

Isabel Martínez, de Villarquemado forma parte de la plataforma y reconoce que participar en el ciclo Poesía y más ha supuesto para ella “cumplir el sueño” de compartir sus poemas con personas interesadas en la literatura. “Ver a gente con tanta sensibilidad que te acompaña me ha dado la vida”, reconoce, para añadir que, además, le encanta escuchar a otros, sobre todo por lo mucho que le aportan: “Yo soy muy básica en las palabras y ellos utilizan el lenguaje muy bien”, dice. Toda su poesía procede de ir anotando ideas, sin iniciar un proceso de trabajo, algo que tiene pendiente, aunque desconoce “si dará resultado”.

El encuentro lo presentó el turolense Jesús Cuesta, que ofreció también una de sus obras dedicadas al sentimiento que le inspira la fiesta de las Bodas de Isabel y su participación en ella. Tras él subió al escenario Isabel Martínez, con un poema dedicado a su abuela y al recuerdo que todavía queda en ella de sus palabras y sus ojos azules.

Una de las intervenciones más divertidas fue la de Carlos Casas, que leyó un “poema de zasca”, como él mismo lo definió, escrito hace ya 35 años. El titular de una noticia publicada en DIARIO DE TERUEL, El puente acabó diciendo sí, le inspiró a crear un soneto dedicado a su amigo y compañero de trabajo Jesús Iranzo, instándole a que los puentes cuya construcción supervisaba en esos años, en la ciudad de Teruel y en el Matarraña, terminaran “con cachirulo y entonando una jota”, para no ser menos que el sevillano que citaba el periódico.

Los versos que despertaron una mayor sensibilidad entre el público por su enorme fuerza creativa y la dureza de las palabras fueron los de TIFF, Tiffany Garzo Camón, que fue una de las artistas invitadas. La joven, que es de Sariñena (Huesca) aunque muy vinculada a Teruel porque estudió Bellas Artes en la ciudad, deambula en sus obras “por la crudeza del interior, lo oscuro y lo doliente, siempre desde experiencias íntimas propias”, según describe ella misma.

La otra artista invitada fue Marisol Julve, turolense y maestra que concibe la poesía “como el lenguaje de la belleza, pero también como la voz de los más vulnerables, el clamor de las injusticias y, ante todo, como un acto de generosidad”, explica.

A su vez, declamaron algunos de sus poemas Lourdes Sanz, Mario Hinojosa o Nacho Escuín. Alix Queen subió al escenario con dos propuestas diferentes pero con gran intensidad en el manejo del lenguaje, un poema intimista y otro inspirado en el último trabajo del grupo de rock metal Disonanzia.

 

Una de las autoras que se estrenó este sábado en el ciclo fue Begoña Pascual, que escribe poesía desde los 14 años, pero no suele compartirla. Es reticente a hacerlo “por pudor”, en primer lugar porque se trata “de un material sensible e “íntimo, no es una mercancía fácil para exponer al público”, asegura. Ese motivo, y que le “horripila” el hecho de “vender” su producto y “exponerse” como un producto de mercadotecnia es lo que le ha llevado a rechazar la edición de su trabajo. Compartió en Teruel una antigua creación inspirada en la primera vez que analizó, junto a sus compañeros de Filología Hispánica, un poema en clase. Asegura que lo pasó fatal por ese “descuartizamiento sanguinolento” ­–que es lo que plasmó en el poema utilizando como metáfora el cuerpo humano–, hasta el punto de dejar de escribir e incluso abandonar la lectura de la poesía durante años.  También participaron en Micro Abierto Juan Cañada, Helena Navarro o Jorge Sánchez, entre otros autores.

Vermú literario en San Julián

Para los que se hayan quedado con ganas de más poesía, el Vermú Literario de San Julián contará este domingo con la participación de Cristina Giménez. Será a partir de las 12:00 horas en el Alfar de los Górriz.

Por otra parte, siete autores turolenses participarán el próximo sábado 2 de marzo en un encuentro de poetas en Zaragoza en la Casa de las Zitas, donde también acudirán otros siete creadores de la capital aragonesa. Los turolenses que estarán presentes en la cita serán Nacho Escuín, Marisol Julve, Cristina Giménez, Fabián Navarrete, Ángeles Portolés y Jorge Martínez Zarzoso.