Los niños del CRA Palmira Plá descubren su patrimonio cultural y natural

Las escuelas que forman el CRA Palmira Plá han realizado en las últimas semanas del curso 2020-2021 diversas actividades didácticas con el objetivo de fomentar el descubrimiento del patrimonio cultural y natural que se encuentra en el entorno del centro educativo.

Para ello, los profesores de las aulas de Allepuz, Gúdar y Cedrillas programaron con el Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra un programa de excursiones, charlas y exposiciones que ofreciera oportunidades de aprendizaje para el alumnado de Infantil, Primaria e incluso Secundaria.

La primera actividad consistió en una excursión de todo el alumnado del centro educativo de Gúdar a los prados y bosques que hay en el Camino Viejo a Valdelinares. Fue una oportunidad para conocer cómo aprovechaban el terreno hace décadas construyendo bancales aterrazados para su cultivo, muros de piedra para organizar los pastos, casetos de piedra seca para protegerse de las tormentas o pilones para no perderse durante las ventiscas y nevadas.
 

Los cambios sociales y económicos han causado el abandono de estas pequeñas parcelas agrícolas y su aprovechamiento como praderas para el ganado favoreciendo el desarrollo de arbustos y árboles. En los prados y en el joven pinar pudieron descubrir algunos de sus habitantes, como los insectos, los hongos, los musgos o los líquenes, y las funciones que desempeñan en estos ecosistemas.

El día siguiente los estudiantes de Secundaria de Allepuz y su profesor realizaron un itinerario interpretativo de la naturaleza y de los usos del territorio por el monte de la Dehesa. A lo largo del mismo, se conocieron los diferentes tipos de rocas, algunos de los fósiles que albergan, el origen y las formas del relieve abiertos por el modelado fluvial y las aguas de arroyada.

Fue una ocasión para conocer algunas de las plantas más representativas de esta montaña, sus adaptaciones y las relaciones que tienen con los animales que dependen de ellas. Se comprendía muy bien los usos agrícolas de los terrenos próximos al fondo del valle del Alfambra y los ganaderos de la parte alta (la Dehesa). Se encontraron varios restos arqueológicos consistentes en trozos de piezas de cerámica (algunas pintadas) de uso doméstico que pueden tener más de doscientos años de antigüedad.
 

Con los más pequeñines de la escuela de Cedrillas se programaron dos visitas al castillo, una con el grupo de Infantil y otra con los de primero y segundo de Primaria.

En el aula se dio una charla previa para recordar los usos, las partes y los tipos de castillos, así como un adelanto de lo que se vería poco después. En la animada excursión llegó el momento de visitar la torre de entrada, asomarse a las murallas, reconocer los cimientos de la antigua iglesia y de disfrutar de la estupenda panorámica que les permitió conocer el pico Peñarroya y el Javalambre, las cimas de las sierras de Gúdar y de Javalambre (y de la provincia de Teruel), y más cerca, los montes Castelfrío y Hoyalta en la sierra de El Pobo. Y, todavía más cerca pero más entrañable para los niños, reconocer sus viviendas, el colegio, el polideportivo o el lugar donde viven sus yayos o trabajan sus papás.
 

La semana siguiente, fueron a descubrir el Museo de Cedrillas con los alumnos de tercero y cuarto de Cedrillas. Es un lugar muy interesante. Las dos primeras plantas están dedicadas a los paisajes, la historia, los monumentos y las tradiciones de Cedrillas, explicados mediante paneles, audiovisuales, maquetas y objetos antiguos. “Fue muy divertido pues algunos alumnos explicaron a sus compañeros cómo se celebraban ciertas fiestas como el trance o la romería de Santa Quiteria, y nos contaron alguna divertida jota”, explicó el responsable del Centro Cultural del Chopo Cabecero, Chabier de Jaime. En el segundo piso hay una pequeña sala de proyección en la que se vio un audiovisual sobre el patrimonio cultural del Parque Cultural del Chopo Cabecero del Alto Alfambra y otro sobre los usos y el paisaje de este árbol tan especial. Allí mismo, se hizo un juego de pistas para conocer más sobre los castillos, templos, masías, majadas, peirones, molinos y otros edificios de uso industrial de los diez pueblos que componen el Parque Cultural.

Los alumnos de quinto y sexto de Primaria recorrieron los prados que hay cerca del sendero que lleva al nacimiento del río Mijares a través del pinar. Reconocieron las rocas y sus minerales, las partes de una flor, las características de los insectos, las funciones de los hongos, entre otras cosas. Identificaron algunas de las plantas más comunes en estos prados, diferenciaron el río Mijares de su afluente, el barranco de la Hoz y, al volver, disfrutaron con un sapo corredor que había salido de paseo esa mañana.

En la última semana, en las tres escuelas se presentó la exposición El chopo cabecero, un paisaje para el desarrollo rural formada por diez paneles en los que se trata del interés paisajístico, económico, cultural y ecológico de estos árboles aprovechados desde hace mucho tiempo por las personas mayores para obtener madera, leña y forraje.