Los joteros del futuro demuestran todo su potencial sobre el escenario en Utrillas
La villa minera acoge la XXX Concentración de Escuelas de Jota de la provincia de TeruelUtrillas acogió este sábado la trigésima Concentración de Escuelas de Jota de la provincia de Teruel, que reunión a once escuelas turolenses procedentes de Alfambra, Escucha, La Puebla de Valverde, Linares de Mora, Maestrazgo, Manzanera, Monreal del Campo, Montalbán, Mora de Rubielos, Cella y Utrillas. Junto a ellas, participó también una escuela de jota de la vecina provincia de Castellón, en concreto de la localidad de Viver. Ejercieron las labores de anfitriones los joteros del Grupo de Jota local, Cierzos de Aragón.
La jornada matinal comenzó a las 9:00 de la mañana con la recepción de los integrantes de las diferentes escuelas de jota por la localidad anfitriona . A continuación se dirigieron al pabellón municipal a celebrar la misa baturra.
Los primeros en salir al escenario fueron los miembros más jóvenes de cada una de estas doce escuelas participantes. Los encargados en romper el hielo fueron los alumnos de la escuela de Alfambra quienes, bajo las enseñanzas de Joaquín Biel, bailaron el Bolero de Caspe y la Jota de Teruel. Los siguientes en subir al entablado fueron los niños de Escucha, quienes dirigidos por Juan Carlos Serrano interpretaron con gran destreza La Canastera, la jota infantil. Los niños de Linares bailaron la Danza de los Pañuelos muy bien dirigidos por Teresa Perales. A continuación fue el turno de los del Maestrazgo que trajeron tres bonitas jotas enseñadas por Alejandro Briz. Con Eduardo Serrano, los jóvenes joteros de Monreal del Campo bailaron el bonito Vals de las Flores. Juan Carlos Aguayo trajo con los niños de la Escuela de Montalbán la jota que lleva su nombre recuperada hace unos años por los integrantes de esta Escuela en una verdadera labor de investigación. Los más pequeños de la escuela de Mora de Rubielos bailaron el Bolero de Caspe y la jota Primero de Mayo. Los vecinos castellonenses de Viver interpretaron las Seguidillas de Viver y la Jota Vieja dirigidos por Belén Escuín y Luis Gómez. Los pequeños joteros de la localidad anfitriona arrancaron los aplausos del público asistente con la jotas la Fiesta en Utrillas y la Hurtada de Albarracín, bajo las instrucciones de su profesora Mari Carmen López.
Tras una comida de hermandad compartida por joteros y familiares acompañantes comenzó la sesión vespertina con la participación de los joteros con más experiencia. De nuevo fue Alfambra los que arrancaron los primeros aplausos con la jota Primero de Mayo.
Sonaron también las rondallas para acompañar al resto de las escuelas que fueron desfilando por el escenario interpretando jotas tan diversas como La Danza Cesaraugusta, la Jota de San Lorenzo, Sitio de Zaragoza, Jota de la Dolores, Las espigadoras o el Bolero de Monreal, la Jota del Rabal, la de Pascua, la Jota de los Labradores. La escuela anfitriona terminó con la Jota de Gigantes y Cabezudos, sacando los últimos aplausos de un público entregado y con la que dieron por finalizada la trigésima edición de estas concentraciones de escuelas de jota que permiten a los joteros que empiezan tener mayor experiencia sobre el escenario, en el que se hacen muchos nervios, según aseguraban algunos de los presentes, pero en el que la convivencia, las sonrisas y el buen ambiente están presentes durante estas maratonianas sesiones joteras.
El encuentro concluyó con un intercambio de recuerdos entre las escuelas participantes en este evento y con la promesa de reunirse de nuevo el año que viene.