Las notas de Santa Cecilia Sax Esemble suenan en clave de esperanza y de vida en el concierto contra el cáncer

“Un espacio para la música en el que dejar fluir las emociones, un concierto con alma”. Estas eran las primeras palabras que se oían en el Auditorio de la Escuela Municipal de Música Antón García Abril Ciudad de Teruel, en el concierto Cáncer en Clave de Sol, toda una declaración de intenciones que anunciaba el emotivo viaje al que la música llevaría a quienes se citaron en este encuentro, de música y vida porque “unir música y cáncer es relacionar dos maneras intensas de vivir la vida” como decía en la presentación Sara Salvador.

Textos íntimos escritos desde la experiencia de quien ha vivido en sus carnes esta enfermedad y para quienes la música es otra parte sustancial de su día a día se mezclaban con la emoción de la música, que “calma, serena.. es una caricia para el alma y si, además, es compartida, tiene el efecto sanador del encuentro, de crear junto a otros, de lograr evadirnos por un momento de la enfermedad y hacernos volar entre notas y silencios a un mundo mágico arropadas por otros músicos”, continuaba su intervención Salvador.

Dirigidos por Sebastián Guitarte y Marta Toledo, los saxofones, el piano y la percusión del Santa Cecilia Sax Esemble desplegaron un conocido repertorio de música pop con la que invitaron a “transitar por diferentes emociones, a conocer una realidad para muchos cercana, a recordar a personas queridas que han estado enfermas de cáncer y a agradecer a quienes han acompañado el camino”.

De eso iba este concierto, de cuando la enfermedad hace que mirar hacia delante sea difícil, de dar valor a todo lo vivido para lo que la música nos ayuda, del apoyo de los amigos y la gratitud. Canciones como Chiquitita y La chica del espejo para hablar de quienes son un apoyo; Another day of sun para recordar esos días duros y de miedos pero también de fuerza como la de la canción Resistiré. Los distintos músicos fueron pasando por el escenario para interpretar otros temas cargados de fuerza y muy reconocibles por el público como Vivo por ella, Gracias por la música o La vida es bella, para acabar interpretando todos juntos temas como Hakuna Matata, Viva la vida y Vivir, con la que acabó el concierto, que hablan de esperanza, de futuro y de gratitud. Porque de eso trataba ese concierto, de hablar del cáncer con otra clave, con Clave de Sol.