La provincia de Teruel, escenario de una nueva película de Manu Ochoa

Tres escritores, tres relatos y tres historias que cobran vida en el nuevo largometraje de Manu Ochoa, The Jairi. Este jueves se estrenó en el Cine Maravillas esta película co-dirigida por Raquel Esteban y rodada en varios escenarios de la provincia de Teruel, Pirineos y Santander. 75 minutos de ficción, de cine de autor, en el que el director, recurre al blanco y negro, para relatar tres ficciones independientes en diferentes épocas de la historia.

Ese era precisamente el objetivo del cineasta, llevar al espectador a épocas pasadas, jugar con el tiempo y para conseguirlo, pensó en los parajes de Teruel, donde ya había trabajando anteriormente y donde el tiempo parece correr más lento. Pueblos con pocos elementos anacrónicos, que permitían situar al espectador en tiempos ya pasados. Cella, Alba del Campo, Gea de Albarracín, Torrebaja, Aldehuela, Peralejos, Guadalaviar, son algunos de los municipios que Ochoa eligió para contar su historia. También en la capital, en la Fonda del Tozal, estuvo el objetivo del cineasta.

El rodaje fue sencillo, rápido y eficaz. Con pocos recursos, apenas dos o tres cámaras, la experiencia y habilidad de Ochoa hicieron el resto. La minuciosa preproducción era el truco del director, que dejó todos cabos bien cerrados para después, poder trabajar mejor. Vestuario y localizaciones estaban claros en la mente de Ochoa, que ayudado por Raquel Esteban, se rodeó también de un buen equipo de actores, muchos de ellos participantes de las Bodas de Isabel y del colegio Pierres Vedel.

Las tres historias

Ochoa explica que la película se compone de tres historias, “una ambientada en la actualidad, otra en la época del cine negro, como en los años 70 u 80 y  otra a principios del Siglo XX”. La primera de ellas narra la investigación que lleva a cabo un hombre en Sallent de Gállego, la siguiente sería un surrealista atraco en cine mudo y la última, La casa azul, basada en la novela que lleva su nombre, un surrealismo mágico de principios del siglo pasado. 

Esta última fue la que se rodó en Teruel con actores de las Bodas de Isabel y con Yago Sánchez, Celia Lahuerta y Ronny Sánchez, del colegio Pierres Vedel, protagonistas de esta historia. 18 minutos en los que Raquel Esteban se puso al frente de la dirección con la ayuda de Ochoa. No era la primera vez que ambos trabajaban juntos, pues el año pasado el cineasta ya visitó la capital turolense para rodar Irracional con alrededor de 80 actores de la ciudad. Ahí se conocieron, cuando Esteban realizó un cameo en el largometraje. 

Tras ese encuentro, Ochoa se puso en contacto con Esteban para dirigir La casa azul, una de las tres partes que componen The Jairi, y ella aceptó. “Es la primera vez que participo en el mundo del cine y me ha encantado”, comenta Esteban, “es un lenguaje maravilloso, un arte en el que confluyen todas las artes, hay música, escenografía, coreografía, teatro, hay muchas cosas interesantes”, continúa.

Ambos destacan que el trabajo conjunto ha sido estupendo. “Trabajar con Manu desde el primer momento ha sido muy fácil, porque he ma dado libertad total, ha sido súper generoso con un montón de códigos míos surrealistas que yo quería introducir y él me lo ha permitido”, dice Esteban. “Es un profesional con muchísima experiencia, muy rápido y efectivo, y para mí eso ha sido importante”, añade.

Ochoa fue quién hizo la primera adaptación de la novela, sin embargo, Esteban quiso introducir algunos cambios para que quienes no hubieran leído la novela, pudieran entender todo mejor, y así fue. “Creí necesario adaptar algunas cosas, porque la novela es maravillosa, un derroche de imaginación que te sorprende y te hace reir porque es única”, sostiene Esteban, quien también se encargó del vestuario y del castin de actores en Teruel.

Tras la presentación en el Cine Maravillas, La casa azul y The Jairi, podrán llevar caminos separados. El objetivo es mover ambos trabajos por festivales de manera independiente. La casa azul se adaptará como cortometraje, y The Jairi continuará con esta y las otras dos historias que lo componen.