La historia de Teruel sale a la calle en una fiesta que busca acercarla a los ciudadanos
Visitas especiales y recorridos guiados para mostrar el resultado de las investigacionesAcercar la historia a los ciudadanos y poner en valor el patrimonio más cercano a través de los expertos que mejor lo conocen es el objetivo de la Fiesta de la Historia que entre el 19 y el 27 de octubre se está llevando a cabo en Teruel. Se trata de una iniciativa impulsada por el grupo de investigación Argos, de la Universidad de Zaragoza, y que integra un completo programa con charlas, visitas guiadas y rutas por diferentes espacios.
Se trata de una actividad que ya ha celebrado dos ediciones en Zaragoza y este año se han sumado los campus de Teruel y Huesca. El coordinador de la actividad en Teruel y arqueólogo Jesús Franco, planteó que dan a conocer las investigaciones que se están realizando en torno al patrimonio, para que la gente lo disfrute y lo valore. Él mismo fue el encargado de hacer un recorrido por las diferentes calles del yacimiento de La Caridad, donde aprovechó para contar la historia vinculada al yacimiento y mostrar a la vez la importancia del yacimiento.
“Entre Valencia y Zaragoza sería de las ciudades más importantes del momento, con entre 2.500 y 3.000 personas”, relató. Sus ocupantes eran celtíberos, pero los encargados del diseño de la urbe fueron sin duda romanos que proyectaron calles rectas con claras estructuras viarias y aceras perimetrales con desagües bajo ellas. Una ciudad totalmente moderna para la época y la primera de cierto tamaño construida en llano. Además, se da la circunstancia de que estuvo ocupada por apenas tres generaciones, “la construyeron los abuelos, vivieron los hijos y la abandonaron los nietos”, relató Franco, quien planteó que se levantó por la cercanía con los ojos de Caminreal, de donde obtenían el suministro de agua, y las minas de hierro de Sierra Minera, y estuvo ocupada entre los siglos I y II antes de la era.
Excavar para conocer el pasado
En su visita, de casi tres horas de duración, intentó inculcar a los asistentes el interés por el patrimonio y el valor que tiene la realización de una excavación arqueológica para profundizar en el pasado de la provincia.
De manera previa, por la mañana, el director del Museo de Teruel y arqueólogo, Jaime Vicente, y la arqueóloga Beatriz Ezquerra, realizaron una visita guiada por la exposición Non Modo Bellum, que se cierra de forma definitiva hoy tras cinco meses y por la que han pasado un total de 23.000 personas.
Otra de las actividades incluidas en el calendario de la Fiesta de la Historia que mejor acogida tuvo fue la visita guiada a la Torre de la Catedral, llevada a cabo por Pedro Luis Hernando, profesor de historia del arte y director del Museo de Arte Sacro. Se realizaron dos sesiones porque las dimensiones del interior de la torre limitaron el aforo a diez personas y hubo mucha gente que quedó en lista de espera.
En este sentido, Franco comentó que las rutas propuestas son “especiales” ya que ofrecen a los interesados en la historia la posibilidad de realizar visitas diferentes con los mayores especialistas de ese patrimonio.
Las propuestas culturales continuarán hoy con dos visitas al Centro de Interpretación de la Batalla del Alfambra por la mañana y a la muralla de Teruel por la tarde. Mañana lunes habrá un recorrido por el cementerio de Teruel y el martes se hará un viaje a los almacenes del Museo de Teruel, la zona más desconocida del centro expositivo. El miércoles habrá una charla sobre el primer dinosaurio descubierto en Teruel y el jueves concluirán las sesiones con una visita guiada al archivo histórico provincial de Teruel.