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Josep Arbiol, maestro y gestor cultural: “Con Desafío Buñuel, Teruel ha encontrado su fórmula perfecta” Josep Arbiol, maestro y gestor cultural: “Con Desafío Buñuel, Teruel ha encontrado su fórmula perfecta”
Josep Arbiol acompañado de Alejandra Fritis, alianzas por el cine y la educación

Josep Arbiol, maestro y gestor cultural: “Con Desafío Buñuel, Teruel ha encontrado su fórmula perfecta”

La Habana acogerá en enero la Muestra Internacional de Cine Educativo (MICE)
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Maestro de escuela “como titulación más importante a nivel emocional, además de alguna licenciatura y máster de esos que los jóvenes hacen ahora a pares o por obligación”. Valenciano de sentimiento y raíz, mediterráneo de alma e internacionalista de vocación, Josep Arbiol nació ligado a su Cinema Paradiso “en el cine de mi tíoabuelo, y la educación y el séptimo arte navegan por mis venas, arterias y otros poros ocultos de mis entresijos”. Ahora trabaja de lleno con su equipo en el cierre de la Muestra Internacional de Cine Educativo (MICE) a celebrar en enero en La Habana, donde también estará presente el rally Desafío Buñuel.

-Usted, valenciano, es casi primo hermano de los turolenses.

-Si sigues la carretera saliendo de València hacia el norte y un poco antes de llegar a Sagunto te desvías en dirección noroeste llegas a la localidad donde nací, Estivella, uno de los últimos pueblos de habla no castellana que limitan con la zona aragonesa valenciana. De allí hacia arriba, hacia arriba: el Torico. Aún recuerdo que mis abuelos tenían los médicos en València o Teruel. “El de la panxa milor el de Terol”. Evidentemente la historia hermana, más que “aprima” nuestros pueblos, y la lengua nunca fue un punto de desencuentro entre nuestros campos, entre nuestros caminos.

-Continuamente viajando por el mundo entero, participando en muestras y certámenes. Mucho más que un ciclo de proyecciones al uso, ¿qué es para usted un festival de cine?

-Son lugares de aprendizaje donde he ido interiorizando y absorbiendo conocimientos, comportamientos y formas de hacer y de ver. Momentos de encuentros que me han marcado, desde la persona totalmente desconocida que te ha dejado con la boca abierta con sus argumentos a la gran estrella que, de repente, está hablando contigo y conoce la MICE porque alguien le ha hablado de ella o porque, sencillamente, la conoce. Lugares de inspiración para mi trabajo o de saber dónde no hay que errar en la próxima edición. Y sobretodo, puntos de encuentro de gente que al final se va convirtiendo en tu familia, en tus amigos alemanes, coreanos, mexicanos, cubanos, extremeños, rusos… Es, sin olvidar mis raíces y mostrándolas con orgullo, embeberme del mundo, embeberme del cine, aportar humildemente lo que de mí y de mi tierra pueda dar.

-Ya haciendo balance del año, participó como jurado en la pasada edición del rally cinematográfico Desafío Buñuel. ¿Qué recuerdo guarda de la propuesta turolense? ¿Qué tiene el Desafío de especial?

-Igual se me enfadan los de Desafío Buñuel, pero el primer recuerdo, el más hondo, fue mi reencuentro con la gente de Teruel. Redescubrir Teruel. En cuanto al Desafío un aplauso al trabajo, al empuje, a la cordialidad, al empeño, a la propuesta ad hoc para una ciudad que vive, que participa, que la hace suya. Teruel durante esos pocos días era un plató. Era cine. No es un festival localizado en unas pocas salas, con grandes artistas de alfombras rojas, que también los había. Era un continuo trajín de rodaje, de participación. Valencia, sea por su tamaño o por lo que sea, nunca ha logrado que un festival sea EL festival, como lo es en San Sebastián, Málaga, Sevilla o Valladolid. La MICE, por ejemplo, es mucho más EL festival, cuando salimos a los pueblos. Teruel ha encontrado su fórmula. Adaptada a su tamaño, adaptada a su idiosincrasia. Y estoy seguro que, poco a poco, con el tiempo, se convertirá en un hito entre los festivales. ¿Qué Teruel no existe? En algunas cosas más que mi tierra. 

-Usted que es educador, no hay mejor forma de aprender que espabilando con las cámaras y desde el trabajo en equipo, ¿verdad?

-Las decisiones que comporta un trabajo creativo en equipo a la par que difíciles y complicadas son a la vez las que más espíritu de cooperación, de ayuda, de respeto crean. Saber que cada uno tiene su función en la cual se puede opinar pero que hay que respetar, que tu fallo puede estropear el trabajo comunitario, que, a pesar de los egos del cine, una obra cinematográfica es la unión de miles de esfuerzos es una lección práctica que transmites, o lo intentas al menos, a tus educandos. Siempre que acaba una película, a mi alumnado le hago esperar a que, con respeto, lean los títulos de crédito, o al menos, el gran volumen de ellos. El cine es una obra de arte grupal, de la unión de muchos esfuerzos.

-La directora Carla Simón destaca el séptimo arte como eje transformador de la sociedad: “Si las salas de cine de autor estuvieran llenas, viviríamos en una sociedad más despierta, más empática, más humana”.

-Esta misma conversación la tuve con Carla con motivo de la presentación de su película en el Festival de Zlin. Estaba sorprendida de la calidad de la programación del festival infantil más antiguo de Europa. Una programación compuesta por una amalgama supercromática de propuestas donde el niño, el joven, disfrutaban desde un punto de vista multicultural y crítico alejado de los cánones de la industria norteamericana y secuelas seguidistas. El cine de autor, el cine que refleja el enterno, la cultura, la idiosincrasia, las lenguas originarias, las maneras… abren mentes, desglobalizan a la par que ayudan a entender el mundo. Totalmente de acuerdo con Carla: el cine podría ser un arma de empatía masiva.

-Como responsable de la MICE, ahora en enero van a celebrar la edición más internacional, ni más ni menos que desde La Habana. “Eso habría que verlo, compay”.

-“Eso lo verás, compañero. La MICE La Habana ya está en candela”. Es un reto maravilloso. Fue un poco casual aunque una casualidad deseada, como un embarazo de esos de “ya que ha salido así, que sea con gusto”. Fui en agosto a La Habana a buscar material y contenidos para la MICE València 2020 Foco en Cuba. La cordialidad, el trato, el nivel cultural y educacional de la gente cubana me subyugó. El segundo día ya estaba en casa de Jorge Perugorría, ahora ya Pichi, tomando unos ronsitos y cerrando su apadrinamiento de la MICE, el Ministerio de Cultura, el de Educación, la Embajada Española en Cuba, la Red Unial, la Fundación Guillén… me abrieron sus puertas. ¿Por qué no hacer una MICE en Cuba? Cené con Haydée Milanés: ¿Qué no nos cantarías algo en la clausura? Myrta Ibarra, José María Vitier, Marilyn Solaya y el mítico ICAIC, la gran fábrica del cine cubano, diciéndome, estás son nuestras condiciones económicas con la vergonzosa situación del bloqueo: lo que tenemos lo ponemos a disposición del cine y la educación. Y aún esperando a Silvio... quién sabe. Cuba es la isla de los sueños y me lancé de cabeza. Como surge la magia, sin pensar en lo difícil, en las complicaciones, persiguiendo un unicornio azul.

-Promover la educación audiovisual más allá del consumismo globalizado…

-Desde la industria, el mundo de la educación audiovisual sólo se contempla desde el punto de vista de la lectura de imágenes. Antes de la MICE, asistiendo con las producciones de mi alumnado a diferentes festivales, esas escrituras eran una excusa. A veces hasta veías claro que eran una excusa para acceder a subvenciones públicas. Desde MICE hicimos la arriesgada apuesta de darle la vuelta. Nosotros le dimos el protagonismo a la escritura de imágenes del alumnado y la parte profesional iba a ser muy selecta, muy elegida, muy alejada del circuito consumista. A nivel económico ha sido una apuesta catastrófica pero a nivel educativo es perfecta. Cuando, no solo nuestra exportación internacional, sino que más secuelas y festivales inspirados en la estrategia MICE han ido apareciendo por todo el mundo, el esfuerzo pionero se ha visto recompensado. Eso si, no creo que nunca podamos vivir de esto.

-Y ustedes reivindican el cine antes que las series de qualité tan de moda.

-Ja, ja, ja. Quizás nos hemos quedado un poco antiguos. Reivindicamos el cine. Nada contra las series. Reivindicamos la magia de la sala y la respiración del vecino de asiento. Reivindicamos el acto social y la emoción compartida. Pero todo nuestro respeto a las series. Reivindicamos la creación delante del marketing sin despreciar el mercado televisivo de las series. Tal vez, como están tan de moda y de tan fácil accesibilidad no es tan necesaria su promoción. Pero, ¿la sensación de ver Los olvidados en una sala oscura o de ver El asesinato de Gianni Versace en Netflix? Yo no tengo ninguna duda sobre mi elección.

-Dice Alain Bergala que desde el punto de vista pedagógico no es bueno mezclar las cosas: “Una serie es una serie, un clip es un clip, un videojuego un videojuego. Si mezclamos todo ya no se piensa”. Hay que ser competente en cada una de las materias. ¿Está de acuerdo?

-Si lo dice Bergala, Alain Bergala, pues... también se puede discrepar. Soy ateo hasta para los dioses paganos de la cultura o la política. Aunque formado en cine, mi mundo, del que vengo y el que amo, es el mundo de la educación. Bergala tiene razón. Mucha. Toda. No obstante, cuando uno esta en el aula, sin una legislación que te proteja, sin un curriculum en que decir esto está ahí, sin medios… lo primero que te planteas es que tu alumnado, en mi caso de Educación Primaria, se convierta en un ciudadano crítico y conocedor de los códigos y el lenguaje, tanto para poder expresarse como para darle armas antimanipulación. Es es el primer paso. Los códigos audiovisuales. Y después… cuanta razón el de Cahiers.

-El megaevento MICE es acogido por la Red del Universo Audiovisual de la Niñez Latinoamericana y Caribeña (Red UNIAL), un tejido con más de doscientos agentes e instituciones.

-Y 33 años de vida. Yo apenas llevaba 3 años dando clase y un visionario cubano, Pablo Ramos, ya estaba trabajando la base educomunicativa. No había enfocado una cámara y Pablo Ramos y otros miembros de Unial en Latinoamérica ya habían sentado bases de Educación Audiovisual cuando en España las cámaras en el cole valían sólo para hacer fotos. Pablo fue uno de mis gurús, vía epistolar. Nunca llegué a coincidir con él en persona pero esos pañales con la guía de la potencia latinoamericana con personas como la argentina Irene Blei o la mexicana Liset Cotera me modularon en mi empeño. Actualmente somos uno de los países punteros —creedme que lo somos, que no solo de Finlandias vive el hombre—, pero aprendimos mucho de países americanos o de Grecia, Corea del Sur o Irán entre otros. Actualmente la Red Unial la coordina Eileen Sanabria, que también es la directora de la 1ª MICE La Habana. Su esfuerzo y el de todo su equipo por estar siempre al día, en 33 años han cambiado muchas cosas, es de alabar y han modernizado la estructura y la han abierto. Desde aquí mi felicitación a la Rec Unial. 

-Infancia, adolescencia y juventud: Los estudiantes, protagonistas de los aprendizajes educomunicativos. Ahí es nada.

-Voy a completarte la pregunta: y los adultos. La educación es un proceso que dura toda la vida. Si bien es cierto que por cultura e imposición legal va más enfocada a la juventud, el aprendizaje es un proceso que no acaba. A veces sin ni tan siquiera planteárselo. Cuando me dicen que la MICE es un festival infantil suelo contestar que también lo es. Y juvenil . Y adulto. Y de arrugas. 

Pero sí, sin darle demasiados rodeos argumentales, la sociedad joven es audiovisual. No son nativos digitales. Les hemos de enseñar y mostrar los códigos. Por haber nacido con un smartphone en las manos no significa que dominen el lenguaje digital. Cuando yo nací había coches y tuve que ir a la autoescuela para aprender a conducir y las normas de circulación. Hemos de aprovechar las ventajas de la sociedad actual, su tecnología en positivo y buscarle utilización didáctica. Prohibir un teléfono en el aula no es el camino. El camino es enseñar a utilizarlo de la manera y en el momento adecuado. Ahora ya nadie se plantea prohibir un ordenador en clase por la posibilidad de acceder a contenidos digamos inadecuados desde él. Algún día no muy lejano, un teléfono será como un bolígrafo.

-Primeros premios de las tres ediciones del Desafío Buñuel y su making of serán proyectados en el marco de la MICE cubana, todo un lujo que seguro servirá de referente a escuelas de cine y Universidades.

-Tenemos un apartado dedicado a la presentación de festivales que se desarrollará en el mítico Centro Cultural Fresa y Chocolate en la Calle 23 del Vedado habanero. Justo delante del Icaic. Magia y mito a raudales. Y allí se presentará Desafío Buñuel y sus trabajos. Pero, os lanzo a los turolenses un Desafío: yo os presento vuestro festival y lo hago de todo corazón y con conocimiento de lo que hago, pero ¿no se decidiría ningún aragonés a venir a La Habana y presentar a Teruel, al Desafío y a Buñuel ante toda Latinoamérica y ante el mundo? Ahí os lo dejo, maños. ¿Hay arrestos?

-¿Cómo están siendo estos meses de preproducción de la muestra?

-Una locura. Pero una locura preciosa. De cuatro infartos, diecinueve crisis de ansiedad y cincuenta “peroamiquiemmemandametremenesto”? Trabajamos junto con la Red Unial a base de mensajes de audio de whatsapp. Las comunicaciones con Cuba y la economía cubana y Miceana no son boyantes. A veces se te cae el mundo a los suelos y otras te vez encima del capitolio cubano. Te das cuenta de muchas cosas prescindibles que aquí parecen imprescindibles y de lo cómoda que es nuestra vida en Europa. Pero aprendes mucho de lo que es una sonrisa ante la adversidad, imaginación ante la carencia, creatividad a flor de piel, resistencia, orgullo, dignidad y lucha. No está siendo un camino fácil además de que es mi primera experiencia dirigiendo un festival allende de mis fronteras. Eso si, el equipo cubano que nos acompaña es de creer en ellas a ojos cerrados. Y siempre con una sonrisa, mi amol.

-¿En qué va a consistir la programación? ¿Cuáles van a ser sus principales secciones?

-Como MICE que somos, vamos a seguir manteniendo nuestra filosofía de ser la gran pantalla del cine realizado en el aula y por tanto, como en todas las MICEs el 70% del tiempo de proyección estará dedicado a ellos. Las películas escolares de colegios e institutos de la Comunidad Valenciana ya se están proyectando por toda Cuba y esperemos lleguen a entre 20.000 y 25.000 espectadores que no sólo se van a limitar a contemplarlas. Van a ejercer de jurados y de espectadores críticos. Películas realizadas por jóvenes de proyectos educomunicativos cubanos también estarán en competición entre ellos en La Habana y proyectadas en otras ciudades como Santiago u Holguín.

De cine profesional los cortos del Instituto Valenciano de Cultura se pasearán por el festival acompañando a largos como Buñuel en el laberinto de las tortugas, Picotazos contra el vidrio, La Banda, Five days to dance, Arrugas… hasta once largometrajes. Destacamos el concierto que dará Rafael Serrallet uno de los mejores intérpretes de guitarra clásica actuales que pondrá música en directo a las películas de cine mudo valenciano recuperadas por la Filmoteca del IVC. O dos películas de la guerra civil, una de ellas la producción aragonesa Gurs. Un congreso de educomunicación internacional de 20 horas, talleres de animación y un sinfín de actividades más completarán las actividades de la 1ª MICE La Habana. Es una apuesta muy amplia, ambiciosa y que estamos seguros va a sorprender hasta a los que confiaban ciegamente en nosotros

-En el foro se replantearán prácticas de innovación pedagógica con el cine. Y el encuentro establecerá alianzas estratégicas entre diversos proyectos e instituciones expertas a nivel mundial.

-Esa es la finalidad primera, principal y última. Desde València nos llevamos las más relevantes prácticas de éxito pero asimismo desde Irán, Corea, Turquía, Argentina, Taiwan, México, Bolivia, Alemania y Colombia se presentarán las últimas prácticas de educomunicación exitosas que hemos logrado llevar hasta la isla. Estoy muy interesado en las prácticas de orientación educativa mediante proyectos de trabajo audiovisuales que se van a presentar desde México y Valencia, si, también desde Valencia. Esperemos que, junto al ya mucho terreno recorrido por la Red Unial y la potencia y ganas de su renovado equipo las alianzas que ya funcionan en Latinoamérica puedan generar sinergias con otras organizaciones como CIFEJ, organización mundial creada en 1955 bajo los auspicios de la UNESCO, que colabora con la MICE La Habana. Los meeting points internacionales son lugares de intercambio y de creación de redes, y en ello tanto UNIAL como MICE saben donde pisan.

-Equidad, sostenibilidad, convivencia, etc. ¿La educación en valores estará también presente desde y con el cine?

-El papel empático del cine es fundamental en la transmisión de valores. Nos lo facilita a los maestros. Por tanto, ¿alguien entendería el renunciar a una herramienta facilitadora? Claro. No todo vale. Y la formación del profesorado es superimportantísima. He de reconocer que en València el Servicio de Formación del Profesorado se toma muy en serio esta tarea y profundiza en las necesidades del docente buscando facilitar su tarea pedagógica. Poco a poco se va mejorando. Si hace 30 años yo veía a Pablo Ramos y Cuba como punteros en Educación Audiovisual, nuestros proyectos ahora son vanguardistas a nivel mundial. Los valencianos muy buenos… pero en Aragón no os quedáis atrás.

-Un deseo para el año que pronto comienza.

-¿Sólo uno? Bueno, si sólo puedo pedir uno, tener a Alain Delon en mayo en la MICE Valencia en la proyección de El gatopardo y acercarlo a Teruel. ¿Puedo pedir un segundo deseo? A ver si dejamos de sufrir económicamente. Sabemos que el cine realizado por niños, niñas, jóvenes y estudiantes no es comercial pero somos la base del futuro espectador culto, crítico y educado. Una inversión a largo plazo. El inmediatismo, recuerden señores del cine, no nos ha dado resultado nunca.