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'Jardines en el aire' que abren los vanos del Molino del Gato de Albarracín a la naturaleza 'Jardines en el aire' que abren los vanos del Molino del Gato de Albarracín a la naturaleza
'Jardines en el aire' es una exposición que ha abierto ventanas a la naturaleza en los muros del Molino del Gato de Albarracín

'Jardines en el aire' que abren los vanos del Molino del Gato de Albarracín a la naturaleza

Una exposición muestra creaciones a partir de elementos naturales que perduran en el tiempo
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Cruz Aguilar

Cuadros pequeños y grandes, de diferentes tamaños pero con un denominador común: todos ellos permiten llevarse a casa una pequeña porción de naturaleza. Para los que viven en algún pueblo de Teruel es tan fácil como asomarse a la ventana, pero para aquellas personas que están rodeados de asfalto y coches contar en el salón con pedacito de verde, aunque sea de 20x20 es una tabla de salvación. Lo sabe bien Eva Yuste, que desciende de Moscardón y tiene en Valencia una tienda que se llama La Florería, que está especializada en la creación de piezas elaboradas a partir de elementos naturales pero tratados para que permanezcan impasibles al paso del tiempo. “No trato flores frescas, no vendo nada que se marchite”, explica, y lo justifica porque no le gusta eliminar un elemento natural de su hábitat –aunque sean cultivadas para tal fin”, aclara– para que se eche a perder en una semana.

Ahora varias decenas de sus creaciones se exponen, bajo el título de Jardines en el aire, en el Molino del Gato de Albarracín, donde estarán hasta el 31 de agosto y regresarán en febrero, con el fin de darles una mayor visibilidad puesto que están en el interior y ahora es la terraza el espacio más utilizado por los clientes del establecimiento.

Rosas como recién cortadas

En su taller en Valencia también hace otras propuestas, como “ramos de rosas que se conservan como si estuvieran recién cortadas” o centros florales. “Hago todo lo que me piden, desde un pequeño cuadro hasta todo un mural”, especifica, para añadir que este tipo de decoraciones están muy en boga actualmente y se utilizan en establecimientos como tiendas, restaurantes, hoteles o espacios de congresos y reuniones de empresas.

La base de las obras que cuelgan de los muros del Molino del Gato es el musgo preservado, pero a partir de ahí añade todo tipo de decoraciones que van desde otras especies de musgo hasta hojas o flores, sin olvidar la cuerda o la madera.

El tipo de elementos que añade depende de si el cliente quiere “algo más sobrio” o se decanta por una temática más alegre. En cualquier caso, el resultado final es un aspecto natural y una pequeña pieza de arte floral que no necesita ningún tipo de mantenimiento, ni siquiera agua e incluso es mejor mantenerla alejada de la luz directa. “Eso es lo que más sorprende a la gente, que se trate únicamente no de maltratarlos más que de cuidarlos, es toda una ventaja”, argumenta la propietaria de La Florería.

Eva Yuste está contenta con la afluencia que ha tenido la exposición en Albarracín y asegura que su objetivo más que comercializar sus trabajos era dar visibilidad a su empresa, puesto que está empezando en el negocio. Relata que tenía mucho interés en exponer en el Molino del Gato porque es uno de sus sitios preferidos de la Sierra de Albarracín, donde veranea todos los años. “Siempre suele haber cuadros y pensé que mis jardines quedarían muy bien aquí”, recalca la autora.