El primer autorretrato de Goya se exhibe desde este viernes en la exposición sobre Goya y Buñuel del Museo Lázaro Galdiano
La consejera Mayte Pérez asiste en el centro expositivo madrileño a la incorporación del cuadroEl primer autorretrato conocido de Goya se exhibe desde este viernes en la exposición Goya y Buñuel. Los Sueños de la Razón, en el Museo Lázaro Galdiano, una muestra organizada por el Gobierno de Aragón y la Fundación Ibercaja. El lienzo propiedad de la Fundación Ibercaja, que habitualmente puede contemplarse en el Museo Goya, muestra un Goya adulto rondando la treintena. Destaca su gran calidad pictórica y ocupa un lugar destacado en los autorretratos que el pintor se hizo a lo largo de su vida, tanto en los individuales como los integrados en otros retratos y pinturas religiosas.
El acto de incorporación de la obra ha contado con la presencia de Mayte Pérez, consejera de Educación, Cultura y Deporte, del Gobierno de Aragón; José Luis Rodrigo Escrig, director general de la Fundación Ibercaja; Elena Hernando, directora del Museo Lázaro Galdiano, y Amparo Martínez y José Ignacio Calvo, comisarios de la exposición.
“Esta es una muestra más del esfuerzo que hace el Gobierno de Aragón por divulgar y proyectar el arte y a los artistas aragoneses más allá de nuestra Comunidad”, ha explicado la consejera Mayte Pérez. Asimismo, ha recordado que Aragón ha recuperado el lugar que merece dentro de la cultura gracias a su presencia en las grandes ferias de arte como ARCO, la feria del cómic de Barcelona o la la feria del Libro de Madrid. “Entendemos la cultura como un derecho de la ciudadanía y trabajamos para que llegue a todo el territorio”, ha añadido.
El Autorretrato de Goya
El magnífico Autorretrato de Francisco de Goya y Lucientes, realizado en óleo sobre lienzo, mide 59,6 por 44,6 centímetros y conserva el marco original, del último cuarto del siglo XVIII. Es el primero conocido de los numerosos autorretratos realizados por Goya y ha sido fechado en torno a 1775, justo en el momento de llegar a Madrid a pintar para la corte.
La edad que aparenta es la de un adulto en torno a los 30 años, que presenta la cara redonda y llena, y con entradas en el cabello sobre su amplia frente. Sus patillas son largas, a la moda de mediados de la década de 1770. Viste una casaca de abrigo o de invierno, de paño de lana pardo, que evidencia que la pintura se hizo en invierno. Goya se retrató en actitud casi romántica, con una larga melena negra que cae sobre la espalda y hombros de manera intencional, en contraste con el fondo ocre oscuro de la pintura. La luz realza de forma magistral los rasgos faciales, con unos ojos muy expresivos, que trasmiten una fuerte personalidad y una gran carga emotiva. El cabello lo pintó con pincel de finísimas cerdas, que dejan su huella a fin de sugerir el cabello natura. El retrato está resuelto con gran maestría y pulcritud, con la pintura estirada al modo mengsiano.
El cuadro estuvo durante el siglo XIX en Zaragoza, y perteneció a don Mariano de Ena y Valenzuela, en 1955 el Autorretrato fue vendido a la primera marquesa de Zurgena, doña María del Carmen Silvela y Castelló, residente en Madrid. En 1961, se mostró en Madrid con motivo de la exposición Francisco de Goya. IV Centenario de la Capitalidad, celebrada en el Casón del Buen Retiro. Posteriormente pasó por herencia a Blanca Gómez-Acebo y Silvela, segunda marquesa de la villa de la Solana. En 1988 y1989, cuando se contempló el Autorretrato en Madrid, Boston y Nueva York en la exposición Goya y el Espíritu de la Ilustración, ya pertenecía a Doña María Fernanda Méndez Nuñéz y Gómez- Acebo, condesa consorte de Elda e hija de la anterior propietaria. Finalmente, el 2 de abril de 1997 los condes de Elda lo vendieron a Ibercaja.
El Autorretrato de Goya joven ha formado parte de las mejores exposiciones que sobre el pintor aragonés se han hecho en los últimos años en Madrid, Boston, Nueva York, Lille, Londres, Zaragoza y otras ciudades de España, ocupando un lugar destacado en las mismas.
Cerca de 5.000 personas han visitado Goya y Buñuel. Los Sueños de la Razón
El Gobierno de Aragón y Fundación Ibercaja, en colaboración con Fundación Goya en Aragón y Centro Buñuel Calanda, han organizado la exposición Goya y Buñuel. Los Sueños de la Razón, inaugurada el pasado 13 de diciembre en el Museo Lázaro Galdiano de Madrid, que podrá visitarse hasta el 4 de marzo de 2018. Desde su apertura cerca de 5.000 personas lahan visitado.
La muestra, comisariada por Amparo Martínez y José Ignacio Calvo, pone de manifiesto el enorme potencial creador de los dos aragoneses y analiza el espíritu crítico y curioso que les permitió explorar las posibilidades del arte para cuestionar la realidad de sus propios contextos históricos.
El discurso expositivo se compone de pinturas y grabados de Goya, fotogramas y secuencias en pantalla de películas de Buñuel, documentos y libros que proceden de colecciones públicas y privadas como Museo de Zaragoza, Museo Goya-Colección Ibercaja-Museo Camón Aznar, Museo del Prado, Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Museo Lázaro Galdiano o Filmoteca Española entre otros. Todo ello apoyado con textos y rotulaciones que vertebran los contenidos de acuerdo a los propósitos de la muestra. Acompañando la exposición se presentará, además, la edición de una publicación con ensayos de destacados especialistas en la obra de Goya y Buñuel.
En la muestra se establecen convergencias entre los dos genios. Ambos compartieron un audaz interés por la naturaleza humana, ambos fueron creadores magistrales de atmósferas innovadoras y tenaces luchadores a la hora de encontrar los medios de expresión con los que identificarse y ambos viajaron no solo al interior de sus mentes sino también al exterior geográfico.
Sin embargo, las diferentes mentalidades, épocas, culturas y motores creativos que sitúan a Francisco de Goya y a Luis Buñuel en posiciones muy distantes. Goya, hijo de las postrimerías del Antiguo Régimen y ávido observador del mundo que le rodeaba, desarrolló en su madurez un espíritu crítico y una visión subjetiva de ese mundo, lo que lo sitúa en los cimientos del pensamiento moderno. Buñuel forjó su personalidad intelectual en el clima de libertad y vitalismo de la época de las vanguardias históricas, para adentrarse igualmente en posturas críticas y de fuerte componente subjetivo. Los dos asumieron el reto de mirar con valentía a su interior.
La exposición no pretende emparejarlos bajo el supuesto de que ambos persiguieran objetivos comunes, pero sí resulta factible confrontarlos a través de categorías de nivel más abstracto, como se puede observar en las diferentes secciones en las que se ha estructurado la muestra: el afán de explorar el mundo y aprender de él, el sentimiento de incomodidad ante lo defectuoso, la libertad creativa y su derivación hacia la subversión y, finalmente, la mirada desinhibida hacia el interior. A ello se añade un cierto número de evocaciones o citas concretas que Buñuel quiso hacer de Goya, que quedan más en el terreno de lo anecdótico que de la influencia efectiva.
Goya y Buñuel. Los Sueños de la Razón es un gran proyecto expositivo con un programa de itinerancias que comenzará en Zaragoza y está previsto continuar en ciudades de Estados Unidos y Sudamérica. Todo ello con el objetivo de dar a conocer el universo de dos grandes creadores cuyo influjo fue más allá de nuestras fronteras.