El Festival del Castillo de Alcañiz traerá a 'La Celestina', '¡Ay Carmela!' y 'Mastodonte'

El auditorio al aire libre del cerro de Pui Pinos en Alcañiz será la sede del Festival del Castillo de Alcañiz, que entre el 30 de junio y el 14 de julio celebrará su 30 aniversario con tres citas teatrales de primer nivel durante otros tantos fines de semana veraniegos en la ciudad.

El ciclo se abrirá el próximo viernes 30 de junio con la representación de La Celestina, una adaptación contemporánea de uno de los clásicos de la literatura española y universal protagonizada por Anabel Alonso. Para el 7 de julio, Asier Etxeandía traerá su Mastodonte, y la clausura del festival tendrá lugar el 14 de julio con otro clásico teatral, ¡Ay, Carmela! con María Adánez y Pepón Nieto. Las entradas para las tres citas ya se encuentran a la venta. Todas las representaciones darán comienzo a las 23.00 horas.

Un festival veterano

Desde que inició su andadura en 1993, hace justo tres décadas, el Ayuntamiento de Alcañiz a través de su concejalía de Cultura  el Festival ha organizado un ciclo que ya llevado hasta la capital del Bajo Aragón importantes espectáculos de marcado carácter nacional e internacional, convirtiéndose en un referente  cultural provincial.

Hasta 2002 el Festival Castillo de Alcañiz ocupó un espacio provisional junto al Castillo Calatravo de Alcañiz, referente patrimonial de la ciudad y del que toma su nombre. Y a partir de esta fecha, su localización se trasladó al Anfiteatro de Pui Pinos, equipamiento construido al aire libre en una de las laderas del cerro donde se ubica el castillo.

El Festival del Castillo nació con la finalidad de especializarse en producciones de calidad tanto de teatro como de música y danza, y cada año se realiza el máximo esfuerzo para traer una programación de carácter generalista pero manteniendo su personalidad propia.

Así la innovación, la vanguardia y la adaptación a una realidad plural y diversa son los valores que el Festival Castillo de Alcañiz quiere reivindicar. Y en esta edición lo consigue a través de la revisión de tres clásicos, con un elenco de actores y productores de alto nivel.

Grandes mitos

El primero, La Celestina, constituye uno de los tres grandes mitos universales que ha creado la literatura española, alrededor del papel de Anabel Alonso como la conseguidora de esa tragicomedia de Calisto y Melibea.  La obra se ha representado en los mejores teatros de España con notable éxito y la excelente dirección de Antonio C. Guijosa, responsable de estupendos montajes como Iphigenia en Vallecas (2 Premios MAX en 2019), Tito Andrónico, Sólo un metro de distancia o Las cartas de Cristián.

Por su parte, El Mastodonte de Etxeandía es uno de los principales exponentes de un autor rompedor y de gran éxito actual, en este caso a través de la música. Reúne al poliédrico carácter del artista bilbaíno con la pulcritud y el saber hacer del multi instrumentista italizano Enrico Barbaro. Más allá del disco que han publicado, el directo es una experiencia sensorial y emocional a través de la vivencia de un ser humano, desde la vida anterior a su nacimiento pasando a la niñez, adolescencia, el descubrimiento de la pasión y el amor, la madurez, la pérdida, el perdón y la muerte.

Y la representación del ¡Ay, Carmela! a cargo de María Adánez y Pepón Nieto nos vuelve a trasladar a un universo que trasciende la versión cinematográfica de una de las grandes obras contemporáneas del teatro español. Los dos actores dan vida a Paulino y Carmela, en uno de los montajes más ingenioso y divertido sobre el acontecimiento más ruín y gris de la historia contemporánea española. Escrita por Sanchis Sinisterra cuando todavía no existía el concepto de memoria histórica y sí el de miedo, el dramaturgo supo sustituir la profundidad dramática por la comedia, para poder publicar una obra insustituible y que sigue de plena vigencia.

Premio Trovador

Aparte de la programación de los espectáculos, el festival incluye la concesión del Premio Trovador, que esta año será para Anabel Alonso, la actriz encargada de abrir el ciclo el 30 de junio con La Celestina.

Instituido en 1998, reconoce en cada edición la trayectoria y el trabajo de creadores destacados en las artes escénicas y musicales. El galardón que se otorga consiste en una escultura de cerámica inspirada en una de las pinturas murales del Castillo de Alcañiz, El Trovador, que simboliza la música y el teatro. Representa la figura de un músico subido a un árbol y formaba parte, junto con la Rueda de la Fortuna, del importante conjunto de pintura gótica mural del siglo XIV de la Torre del Homenaje de la fortaleza alcañizana. Diversos artistas han recibido este galardón, que este año será para la intérprete Anabel Alonso, quien precisamente da el pistoletazo de salida a esta edición 2023 del Festival del Castillo.