Dulzura y laceración: Lamberto Alpuente publica su quinto libro, ‘Sorbete de cactus’

Con cierto retraso sobre el calendario previsto, ya que la idea es que estuviera en la calle en Navidad, por fin se ha publicado Sorbete de cactus, quinto poemario que firma el autor turolense Lambreto Alpuente. Consta de una colección de cuarenta nuevos poemas que reflejan fielmente la forma de concebir la escritura de su autor, cada vez más cercano a la prosa poética y menos a las rimas y métricas clásicas. La obra está prologada por Gonzalo Montón e ilustrada por Laura Villarroya Sanahuja, y será presentado el próximo viernes 22 de marzo, a partir de las 20 horas, en el Espacio Luvitien de la capital turolense.

Tras Barbitúricos y otros licores (2013), La sombra erecta (2016), La bondad del payaso (2018) y Crónica de una vida lambertable (2020), el turolense plantea Sorbete de cactus como el cierre de un círculo que comenzó hace una década, en cuanto a experimentación literaria. Una especie de punto y aparte antes del cual Lamberto Alpuente ha exorcizado buena parte de los espíritus que le llevaron a la poesía y ha encontrado su auténtica voz, que tiene mucho que ver con textos directos, duros y descarnados.

Se ofrecen pocas -o ninguna- licencias al lirismo cómodo y convencional; y frecuentes muestras de humor negro, de acidez y de ironía que van de lo más local -empieza a molestar que en esta puta ciudad AEMET no dé ni una / y gélido y luego solitrón y solsticio de negacionista / con la bruja en su escoba acurrucada en la amargura y lluvia aniñada / y carreteras cortadas y hectáreas calcinadas y homicidios encubiertos- a lo más universal -Pese a los exabruptos, los lunes, la bohemia, pese a la barbarie, / la mediocridad y las telarañas, estoy vivo, como de costumbre.

Con todo no es un poemario triste ni oscuro, ni siquiera homogéneo en su planteamiento. “Los poemas están colocados en el libro por orden cronológico”, explica el propio autor, y los primeros están escritos justo después de pasar la pandemia. “Por eso quizá la primera parte del libro transmite cierta inseguridad, cierta frustración, pero después se de una especie de renacimiento, se refleja una búsqueda de libertad y de resurgir”. En ese sentido el escritor afirma que en alguno de sus poemas el libro “se recrea esa parte extraña de la vida en la que eres ni tan joven ni tan viejo, ese punto ciego en el que te encuentras cuando tienes 40 o 42 años, como es mi caso”.

Otro poeta turolense, Nacho Escuín, ha definido Sorbete de cactus como uno de los libros más interesantes de los publicados en el transcurso del 2023 al 2024, y desde luego como el más contundente, y acaso más maduro, de Lamberto Alpuente. “Es un poeta de raza, instintivo, radical en su propuestas y decididamente romántico”, que “no entiende de obstáculos formales” ni dudan en llevar sus libros “a lugares aparentemente desconocidos pero necesarios”, afirma Escuín.

Diálogo con el lector

La poesía de Alpuente, que roza y como mínimo emparenta con el dadaísmo de principios del siglo XX, apela en frecuentes ocasiones a la segunda persona del singular, como una provocación directa al lector, con quien Alpuente siempre intenta establecer un diálogo íntimo, privado y sin intermediarios. Otra cosa es que a veces esa pequeña dosis de esquizofrenia necesaria para escribir poesía le lleve a establecer ese diálogo consigo mismo. “Me gusta situar al lector en primer plano y que este se sienta aludido, efectivamente. Pero también es cierto que escribir poesía significa entrevistarme a mí mismo”.

Gonzalo Montón, prologuista del quinto poemario de Alpuente, describe sus textos como una mezcla entre “dulzura” y “dolor”, entre “alegría” y “tristeza”, que no es ni más ni menos que aquello a lo que apela el título de la obra, Sorbete de cactus, una fusión entre la frescura del azúcar congelado y lo amargo de la herida punzante.

También ofrece Montón una valiosa recomendación al lector, y para ello recuerda que fue Lorca quien dijo que la poesía “es la unión de dos palabras que uno nunca supuso que pudieran juntarse”. Dice el profesor y cinéfilo que no desespere el lector si los versos de Lamberto a veces se resisten a la comprensión y escapan al entendimiento. “Reléelos con sosiego” y sin prejuicios, dice, y “solo entonces todo cobrará sentido, y comprenderás que el imaginario poético de Lamberto contiene pasillos oscuros flanqueados por puertas secretas”.

Solo los pasillos estrechos y las puertas escondidas conducen a lugares realmente interesantes.

Ejemplares a la venta en las librerías Senda y Escolar

Como los anteriores poemarios de Lamberto Alpuente, Sorbete de cactus se ha autopublicado gracias a una campaña de crowdfunding a través de la plataforma lanzanos.com, que recaudó los 2.250 euros necesarios a través de 105 apoyos. La distribución del poemario entre los mecenas ya ha comenzado, pero si alguien que no participó en la campaña desea adquirir un volumen puede hacerlo en las librerías Senda y Escolar de Teruel.