Los niños de Albarracín crean los cuatro primeros cabezudos de su comparsa

Cuatro cabezudos de llamativos colores y un tamaño especial para que sean llevados por niños constituyen los primeros integrantes de la minicomparsa que el Ayuntamiento de Albarracín está creando con la ayuda de los más pequeños de la localidad. Frankestein; Sulley, de Monstruos SA, un payaso y el Sombrero Loco de Alicia en el País de las Maravillas serán los primeros en recorrer las calles de la localidad estas próximas fiestas, que arrancan el 13 de septiembre.

Se trata de unos cabezudos muy especiales para los niños puesto que los han construido con sus propias manos a través de dos talleres desarrollados en las dos últimas semanas y en los que han participado más de una treintena de pequeños.

La encargada de impulsar la actividad ha sido la concejala de Turismo y Cultura del Ayuntamiento de Albarracín, Laura Hernández, que además cuenta con formación en diseño y Bellas Artes y quien ha contado con la colaboración de varios vecinos con experiencia en el sector de la creatividad así como varios voluntarios de la Asociación de Madres y Padres (Ampa) de la localidad.

En la primera de las sesiones tomaron parte un total de 35 niños mientras que a la segunda, que se realizó este pasado jueves, asistieron unos 25 niños.

Adaptados a sus cuerpos

Hernández detalló que se trata de cabezudos de un tamaño específico para los cuerpos infantiles y realizados con una técnica adaptada a las posibilidades de los autores, que fueron niños de entre 5 y 13 años. “Los cabezudos profesionales se hacen con molde, llevan una capa muy endurecida de papel y cola, pero nosotros modificamos la técnica, compramos una base estándar, redonda y le aplicamos los volúmenes” a base de papel y cola, capas de yeso e imprimación, dijo Hernández. Los cuatro están ya prácticamente terminados –tras dos sesiones de cuatro horas cada una– y ahora sólo restan algunos pequeños detalles y el lacado, que se realizará con el objetivo de que la pintura sea más duradera.

Es la primera vez que se realiza un taller así en Albarracín y la concejala de Turismo y Cultura matizó que el objetivo es introducir a los niños en la tradición además de ayudar “a los que tienen miedo a perderlo”, dijo. Además, ya están pensando en completarlo con otros talleres durante el próximo verano para ampliar la minicomparsa también con gigantes de un tamaño específico para los niños.

La elección de los personajes la realizaron ellos mismos, buscando cuatro muy conocidos por todo el mundo y haciendo además un guiño con el payaso a uno de los cabezudos que había en el pueblo y que se perdió.

Los cabezudos son una pieza clave en las fiestas de Albarracín puesto que son los encargados, junto con las dulzainas, de dar inicio a los festejos patronales el día 13 a las 13:00 horas.

Por eso, como apuntó Laura Hernández, la idea “es hacer una comparsa mini para que ellos puedan disfrutarla y vivan la tradición y se diviertan de otra manera”. Los cabezudos de reducido tamaño se estrenarán este año después de los encierros y no en el acto de la comparsa grande, un momento destinado a que los niños corran delante de los cabezudos y no dentro de ellos, según indicó la responsable del taller de creación de cabezudos.