Los danzantes de Alcalá y La Iglesuela perpetúan una tradición multicolor

Los niños y niñas de Alcalá de la Selva y La Iglesuela del Cid cumplieron este domingo con su tradición más colorida, que consiste en la realización de sendos ancestrales dances en honor a su patrona. En la localidad de Gúdar-Javalambre, la actividad se inició en el pueblo y culminó, ya por la tarde en la puerta del Santuario de la Virgen de la Vega. En el Maestrazgo la procesión también partió del pueblo y terminó en la ermita del Cid, donde las pastoras y gitanas demostraron por la tarde su fervor a la Virgen del Cid antes de regresar al pueblo de nuevo.

En Alcalá de la Selva el sol acompañó a los danzantes desde la plaza hasta la ermita. Algunos niños llevaban los trajes de herencia familiar mientras que otros estrenaron los que ha costeado el Ayuntamiento y ha cosido de forma artesanal la modista local Cistina Farrás.
 

Imagen restaurada

Encabezaban la marcha los moros y cristianos a caballo, que representan La Embajada, seguidos de los ocho danzantes, guiados por los tres graciosos o pastores, la pequeña talla de la Virgen de la Vega que se conserva en la iglesia de Alcalá de la Selva y que este año ha sido restaurada, y la banda de música de Linares de Mora.

Ya en el barrio de la Virgen de la Vega se celebró la misa, en la que se ha presentado la restauración de parte de las pinturas de la ermita barroca, que se está ejecutando gracias a un convenio con la Universidad de Valencia y con el apoyo de la Diputación Provincial de Teruel. Además, se aprovechó la presencia de numerosos fieles para pedir colaboración para continuar con los trabajos.
 

Durante la homilía el párroco de la localidad, Héctor Pérez, felicitó a los cuatro pueblos de la Hermandad de la Virgen de la Vega, que son Gúdar, Linares de Mora , Valdelinares y Alcalá de la Selva, por haber dado un nuevo e importante impulso a esta institución histórica que facilitará conservar y mejorar el santuario mariano más visitado de la provincia de Teruel.

Por la tarde se representó el Dance de Alcalá de la Selva, con gran afluencia de público al caer en domingo. Como novedad, este año se ha contratado un sistema de megafonía profesional, lo que permitió que el público pueda seguir mejor los textos del teatro popular que recitan danzantes, graciosos y embajadores.