Los campeones de jota aragonesa de 2022 se citan en Mora de Rubielos
Asisten joteros de categoría benjamín, infantil, juvenil, ordinario y extraordinario
El patio del castillo de Mora de Rubielos acogió este domingo a la crema de la jota con una actuación de los campeones del CXXXVI Certamen Oficial de Jota Aragonesa 2022.
Prácticamente todos los campeones se sumaron a una Gala en la que la joven morana Úrsula Tomás, campeona en la categoría benjamín, hizo las veces de anfitriona. La actuación, que arrancó puntual a las 23:00 horas, se prolongó más allá de los 100 mínutos de expectáculo. Así, la fortaleza morana, dentro de la programación del Festival de los Castillos y Puerta al Mediterráneo, cerró la gira de la Gala de los Campeones de la pasada edición del Certamen con las actuaciones de los ganadores de cada categoría.
En el capítulo de canto intervinieron Úrsula Tomás Abril, Bernardo Alós Ortiz, Adrián Alós Ortiz, Estefanía Pérez Lara, Darío Longares Longares, Mª Pilar Escuer Fernández de la Vega, Álvaro Ezquerra Asín y Lorena Larrea Moya. Mientras, María Ripol Soriano y Sergio Ripol Soriano, Candela Pérez Llopart y Guillén Artigas Plaza, Sofía Sanz Merino y Miguel Tomas Romero, Aarón Roses Ibáñez y María Pilar Aquilué Madurga y Esther Gimeno Garbajosa y Adrián Tomás Bernal compartieron su baile con los más de 300 asistentes.
Gala
La Gala, presentada por Astrid Morató, estuvo acompañada por la rondalla dirigida por el profesor de la Asociación Jotera, Jorge Yagüe, y contó con la colaboración de la Asociación Jotera Mora de Rubielos y sus profesores César Rubio y Joaquín Biel.
El alcalde de Mora de Rubielos, Hugo Arquímedes Ríos, se felicitó ayer porque la localidad hubiera podido reunir en un mismo escenario todo ese talento y no descartó que el evento pueda tener continuidad en el futuro.
Festivales de los Castillos de Aragón nació hace cinco años, a partir del festival Puerta al Mediterráneo. En 2018 se decidió trasladar el éxito de su formato y recuperar otros festivales en castillos que desaparecieron a lo largo del tiempo. Además, pone en valor cada uno de los castillos sede de los Festivales y supone una importante herramienta contra la despoblación en las zonas rurales.
