Las retretas y el pregón dan el pistoletazo de salida a la Semana Santa en Calamocha
La periodista Silvia Lario reivindicó en su pregón la particularidad de la Semana Santa calamochinaLas retretas de las bandas de las cofradías calamochinas y el pregón que se pronunció ayer por la tarde marcaron el inicio de la Semana Santa en Calamocha. Las primeras se pudieron escuchar en el recinto ferial de la villa mientras que el segundo acto tuvo lugar en el auditorio.
La amenaza de lluvia obligó a la Junta de Cofradías a cambiar de ubicación el escenario de las bandas calamochinas, que estaba previsto que se celebrase en el parking frente al centro de salud, más próximo al teatro. El acto comenzó con puntualidad a las cinco de la tarde.
Unas trescientas personas arroparon a los cofrades que interpretaron sus retretas en el pabellón de la Institución Ferial. Actuaron, por orden, la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén con su banda de percusión; la de la Oración de Jesús en el Huerto con sus singulares carracas; la del Santísimo Ecce Homo con sus cornetas, tambores y bombos, y la del Santo Cristo, que también cuenta con estos tres instrumentos.
Sin embargo, este año no participó la banda de la Cofradía de Jesús Atado a la Columna. El escaso número de miembros para esta fecha impidió que se volviesen a escuchar las características matracas durante el acto que marca el pistoletazo de salida de la Semana Santa en Calamocha.
Pregón
A las seis de la tarde, en el teatro-auditorio de Calamocha comenzó el acto de pregón. Lo hizo con un vídeo promocional de la Semana Santa firmado por la productora calamochina El Molino Audiovisual donde se reflejaba cómo vive la villa jilocana estos días.
A continuación, la presidente de la Junta de Cofradías, Mª Ángeles Royo, hizo una breve intervención para dar paso a la pregonera Silvia Lario, de quien dijo que “no necesita presentación”.
Lario lleva treinta años como cofrade de la Oración de Jesús en el Huerto. Licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Valencia, ha sido directora de la televisión local de Calamocha y de Onda Cero Calamocha, fue presentadora del programa Se escribe con jota en Aragón TV y, actualmente, dirige el magacín de Radio Calamocha. También ha ejercido como concejal del Ayuntamiento y presidente de la Comarca del Jiloca. Su trayectoria, como ella explicó en su pregón, le ha valido para contemplar la Semana Santa de Calamocha desde varios prismas, incluyendo su paso por la Junta de Cofradías.
En su discurso, recordó cómo en los años ochenta del siglo pasado un grupo de personas decidió reactivar esta celebración en Calamocha atrayendo a los más jóvenes, añadiendo instrumentos a las bandas y abriendo la participación a las mujeres. Sin embargo, para ella, ahora se necesita un nuevo revulsivo.
“Vivimos momentos complicados para nuestro medio rural, lo cual no es ajeno a la Semana Santa de Calamocha”, dijo. En ese sentido, se refirió a la laicidad creciente y la despoblación, por la que cada vez hay menos habitantes y, por tanto, menos candidatos a ser cofrades están haciendo mella. “Eso hace que los casi 800 cofrades que tenemos no se vean en las calles”, sentenció.
Lario recordó sus inicios en la cofradía a la que pertenece, los nervios por tener los trajes listos para cada procesión, el dolor en los brazos por tocar la carraca y la ilusión con la que lo hacía cuando pasaba cerca del convento de las religiosas concepcionistas que, en su clausura, elaboraron buena parte de los hábitos en aquella época. También, cómo el Viernes Santo preparaban la imagen de su hermandad, un armazón con cabeza y manos que a los más pequeños les resultaba muy curiosa.
Además, se declaró culpable de haber arrastrado a su marido y a sus hijos hasta la Oración de Jesús en el Huerto, y alabó a quienes, año tras año, se alistan en las filas de las cofradías pequeñas como la suya, la de Jesús Atado a la Columna o la de aquellas que no tienen banda.
Lario también destacó el silencio y el respeto que se respira en las procesiones de Calamocha y que arropan a los cofrades desde las aceras. Para ella, es difícil entender por qué ni Teruel ni Aragón han acogido la celebración de estas fechas en Calamocha como Semana Santa a promocionar.
Por último, apeló a la responsabilidad de las familias para mantener vivas las cofradías de la localidad y animó a todos los cofrades a sacar sus hábitos y dar brillo a sus zapatos para vivir con fervor y los valores cristianos estos días en Calamocha.
El acto terminó con las retretas de la Casa del Tambor y del Bombo del Jiloca, a la que Lario puso como ejemplo de lo que puede conseguir la comarca cuando se une con un buen propósito.
La tarde terminó en la iglesia de Santa María La Mayor con una misa en memoria de los cofrades fallecidos. En ella participó la Agrupación Coral de Calamocha y sirvió para imponer los hábitos a los nuevos cofrades.