Las condiciones meteorológicas propician que la berrea de este año sea “de las mejores”

Un tiempo de otoño típico, con humedad pero no mucho frío, está propiciando que los ciervos se encuentren cómodos para iniciar el ritual de apareamiento, la denominada berrea, que son los bramidos que el macho lanza para atraer a la hembra. Orihuela del Tremedal inició ya el 20 de septiembre las visitas guiadas al campo para admirar y, sobre todo, escuchar a los animales.

El alcalde, Rafael Samper, indica que la afluencia está siendo máxima y que los grupos de 15 personas se están cubriendo prácticamente en su totalidad, sobre todo los de la tarde, muchos de ellos ya completos hasta mediados del mes de octubre, fecha en la que, habitualmente, y a consecuencia del frío, concluye el periodo de celo de las hembras.

Samper señaló que la berrea de este año “está siendo una de las mejores” puesto que en años anteriores ha hecho más calor y, sobre todo, el campo estaba más seco, lo que repercutió en que “los animales adoptaran otros comportamientos”, mientras que este año “tienen el hábitat idóneo en cuanto a humedad y temperatura”.

Cada año participan en estas visitas guiadas entre 300 y 400 personas, dependiendo del periodo durante el que se extiende, ya que varía en función de la climatología, aunque prácticamente todas las salidas se completan.

La visita comienza en el Centro de Interpretación de los Montes Universales, en pleno centro de Orihuela del Tremedal y allí el guía les ofrece una explicación sobre la Reserva de Caza, que se extiende por 13 municipios de la Sierra de Albarracín. Además, el espacio cuenta con varios paneles dedicados a dar a conocer la flora y la fauna de la zona, entre la que los ciervos son los más destacados.
 

Evolución de las cuernas

Uno de los rincones favoritos para el visitante es el dedicado a explicar las cuernas de los ciervos, ya que hay toda una evolución completa de la cornamenta de un mismo ejemplar, del que se recogieron los cuernos desde su primer año de vida hasta su fallecimiento. Los cuernos son utilizados por los machos para enfrentarse a otros ciervos por una hembra y alcanzan su máximo esplendor entre los 7 y los 9 años, según explica Rafael Samper.

Después del recorrido por el centro de interpretación, los participantes se van al monte, al paraje de Cerro Gordo, donde hay una caseta o hide que permite observar a los animales sin molestarles.

Desde allí estos días los participantes han podido admirar al menos tres machos y, alguna tarde, incluso con sus doce hembras, relata el guía, Salva Llorens. Especifica que este año “los berridos son espectaculares” y, describe, “cuando está todo en silencio y, de repente, empiezan a lo lejos a berrear, como si estuvieran anunciando la noche, te sientes como en un bosque infinito de Alaska”.

Entre los participantes hay desde jóvenes muy interesados por el medio natural hasta familias y también mayores incluso de 70 años. “Hay de todo, desde gente muy vinculada con la naturaleza hasta urbanitas que no saben dónde van y lo ven como algo exótico, buscan el consumo de experiencias”, argumenta Llorens.

El interés por participar en esta actividad, que nunca está garantizada puesto que depende de animales en total libertad, es creciente y hay personas que reservan ya durante el verano. Otros se suman al recorrido porque están alojados en la localidad, sin saber muy bien con qué van a encontrarse.

Sin embargo, el balance de todos ellos tras la visita es muy bueno, y además durante los días que llevan realizando las rutas han visto no sólo ciervos, sino también un águila e incluso una familia de jabalís que localizaron pastando en el campo.

Las visitas de la mañana son entre las 7 y las 8:30 horas, mientras que las de la tarde se prolongan desde las 18:30 hasta las 20:30 horas. El precio por persona es de cinco euros y se recomienda llevar prismáticos para poder ver a los ciervos, ya que aunque la berrea consiste en escuchar sus bramidos, es habitual verlos durante el recorrido. Las visitas se realizan de martes a domingo.

Asociación turística

La Asociación de Empresarios Turísticos de la Sierra de Albarracín ha programado varias citas para poder escuchar y ver a los ciervos. Las próximas serán los días 27 al 29 de septiembre y entre el 2 y el 4 de octubre. Berrea bajo las estrellas es una actividad acompañada por guías expertos y conocedores del territorio que reúne astronomía, naturaleza y observación de fauna. Se desarrollará en los términos de Tramacastilla, Noguera y Bronchales y se podrá complementar con el patrimonio, gastronomía, comercio y productos km0, actividades y visitas que ofrece este territorio. Hay que realizar inscripción previa y los alojados en los establecimientos de la serranía tienen precios especiales para la actividad, que se desarrollará en grupos reducidos.