La subasta de ganado de Cantavieja demuestra el compromiso del sector por la mejora genética
Juste destaca la importancia de que los jóvenes “sigan invirtiendo en el territorio y mantengan vivos los pueblos”La Feria Ganadera de Cantavieja cerró su edición número 113 con su tradicional subasta de animales en la que la mayoría de los lotes ofertados se adjudicaron y que demostró el interés de los ganaderos por mejorar genéticamente sus explotaciones. Una labor que cuenta con el apoyo económico de la Diputación Provincial de Teruel, el Ayuntamiento de Cantavieja y la Comarca del Maestrazgo.
La subasta, realizada a la manera tradicional: a mano alzada, comenzó pasadas las 12.00 horas. Se subastaron 40 reses de vacuno de las razas charolés, blonda de Aquitania, Freddy y Limousine y un centenar de ovino (rasa aragonesa y ojinegra) y participaron siete ganaderos de vacuno y en ovino hubo cuatro para rasa aragonesa y cinco para ojinegra.
Se adjudicaron prácticamente todos los lotes de vacuno, salvo dos toros limousines, y de ovejas quedaron hembras de ojinegra todos los animales estaban inscritos en los Libros Genealógicos de animales selectos.
Fernando Guillén, director de la subasta, recordó que la misión fundamental de este acto es incorporar “ganado selecto a las explotaciones con el consiguiente aumento de la productividad y el valor económico”.
Guillén afirmó que la de la Feria de Cantavieja es la más destacada de la provincia y que supone “un valor económico importante para las explotaciones ganaderas”.
El alcalde de Cantavieja, Ricardo Altabás, resaltó la larga trayectoria de esta subasta. “La llevamos haciendo muchos años y es como semillicas pequeñas que van germinando porque esto ha permitido ya que haya varias explotaciones ganaderas del Maestrazgo que tienen sus cartas de calidad de razas selectas y pueden venir a subastar a esta feria o a cualquiera y esto se consigue a través de facilitarles que puedan comprar los mejores animales con la mejor genética, para eso estamos las administraciones”, resaltó Altabás.
En cuanto al desarrollo general de la feria, el alcalde de Cantavieja se mostró satisfecho por la gran afluencia de público que señaló que, a diferencia de hace unos años cuando la actividad se concentraba en el domingo, ahora se reparte y el sábado también recibieron muchos visitantes, mientras que el domingo era el día más centrado en los profesionales, debido a la subasta.
Altabás agradeció también el trabajo y la implicación del sector en el desarrollo del certamen, en un año especialmente complicado por la irrupción de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE).
La subasta contó con la presencia del presidente de la Diputación Provincial de Teruel, Joaquín Juste, y con el director general de Comercio, Ferias y Artesanía del Gobierno de Aragón, Javier Camo, quienes resaltaron el impulso económico que supone esta feria en la zona.
El presidente provincial valoró el espíritu emprendedor de los ganaderos. “Es un orgullo volver a Cantavieja y ver que los jóvenes siguen invirtiendo y acudiendo a la subasta. Es un orgullo que la gente joven siga arriesgando y siga quedándose en el Maestrazgo, en toda la zona y siga manteniendo vivos nuestros pueblos que es lo que queremos y es de lo que se trata”, subrayó Juste que recordó que la DPT dedica 120.000 euros para este tipo de ferias y en el caso de la de Cantavieja han recibido en torno a 10.000 euros.
El director general de Comercio, Ferias y Artesanía destacó que la Feria de Cantavieja es “una tradición centenaria” y aseguró que eso significa “perseverancia y tradición”, así como el relevo generacional, lo que lleva a “la dinamización del territorio”.
Javier Camo afirmó que la agricultura y la ganadería son “dos de los pilares fundamentales de la economía y referentes en el Maestrazgo” y aseguró que desde el Gobierno de Aragón se seguirán apoyando estas iniciativas.
El director general recordó que estos certámenes son también un lugar de encuentro para los habitantes de la comarca. “Los ganaderos intercambian experiencias, amplían conocimientos y fortalecen las relaciones sociales y por supuesto se dinamiza el territorio, se genera riqueza y se genera empleo, por tanto, esto es importante. Es la esencia de las ferias que debemos mantener”, argumentó.
Los ganaderos acudieron muy interesados en la subasta para mejorar genéticamente sus explotaciones. Aurelio Badal, productor de vacuno del Maestrazgo, asistió para comprar y destacaba que esta cita es “un evento muy cualificado” y “uno de los principales que hay en la Comarca que mueve mucho dinero y muchísima gente”.
Daniel Ros, ganadero de una explotación de ovejas de raza rasa aragonesa en Perales del Alfambra, era el segundo año que participaba en la subasta de Cantavieja. “Voy más a la feria de Cedrillas, pero vine el año pasado y me cuadró así que vuelvo porque necesito algunos machos”, explicó.
Junto a la exhibición del ganado vacuno, ovino y equino, el certamen de la capital del Maestrazgo contó con 160 puestos de mercado donde los visitantes también aprovecharon para hacer sus compras.
El secadero Sierra Maestrazgo de Castellote lleva 30 años acudiendo a la Feria de Cantavieja y siempre tienen una buena acogida. “La gente ya nos conoce y viene a por nuestro jamón y la cecina de toro”, explicó Inmaculada Bernal, en el puesto de este establecimiento. Gabriel Coman, gerente de Quesos de la Val, de Mezquita de Jarque, señaló que se notaba algo menos de movimiento quizá por la coyuntura económica actual, pero lleva 14 años en este certamen y sus productos son conocidos.
Una edición complicada en la que se han extremado las medidas de sanidad animal
La Feria de Cantavieja ha estado marcada este año por la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) que se transmite por la picadura de un mosquito y se ha detectado al menos en 26 explotaciones del Maestrazgo. La incertidumbre sobre la celebración del certamen se mantuvo hasta la última semana y, finalmente, el Ayuntamiento de esta localidad de forma conjunta con el sector tomaron la decisión de celebrarlo, según recordó el alcalde de Cantavieja, Ricardo Altabás, que incidió en que se ha hecho “controlando sanitariamente al máximo”.
Altabás señaló que siempre los controles sanitarios son muy estrictos, tanto en al desinfección de los pabellones como en los controles y las analíticas a los animales y en esta ocasión aún se han incrementado estas medidas.
Por otro lado, el alcalde de Cantavieja recordó que la subasta se realizó incluso con la pandemia de coronavirus y resaltó que es “un apoyo fundamental para el sector ganadero”.
El alcalde de Cantavieja agradeció en la apertura de la subasta todo el trabajo que han realizado los ganaderos y dijo que su compromiso era “impresionante”.
El presidente de la Diputación Provincial de Teruel, Joaquín Juste, indicó que debido a esta enfermedad se han tenido que activar los protocolos correspondientes y que se había estado esperando a que desde Madrid se dieran las indicaciones oportunas. Aseguró que había sido una alegría “que no se haya tenido que suspender” la feria. “Los ganaderos tienen ganas y quieren seguir trabajando”, afirmó.
Juste defendió la importancia de apoyar a los productores en estos momentos. “Ante situaciones excepcionales, hay que tomar medidas excepcionales y el Ministerio primero porque es el que más presupuesto tiene y luego el Gobierno de Aragón se tienen que implicar y ayudar a los ganaderos”, defendió el presidente provincial.
Juste se mostró partidario de que haya compensaciones para los ganaderos afectados y que también se invierta en investigación para resolver el problema.
Aurelio Badal, que tiene una explotación de vacuno con 130 animales, es uno de los afectados con 20 reses enfermas y relataba que está siendo “muy complicado”. “Personalmente me afecta muchísimo ver cómo enferman mis animales”, comentó. En cuanto a las medidas que se han adoptado, indicó que para “estar tranquilos” han optado por desparasitar a los animales interior y exteriormente y sobre la desinsectación se mostró un poco escéptico porque habría que repetir el proceso cada cinco días.
A pesar de esta coyuntura sanitaria, Cantavieja ha vivido su feria con una gran afluencia de público y los ganaderos han demostrado que seguirán haciendo frente a estas dificultades.