La restauración de la iglesia de Burbáguena continuará con la torre y el portalón
La redacción del proyecto ha sido adjudicada por el Gobierno de Aragón al arquitecto Sergio Izquierdo
El arquitecto Sergio Izquierdo ha sido el elegido por Gobierno de Aragón, a través del Departamento de Suelo y Vivienda, para realización del proyecto de la segunda fase de restauración de la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles de Burbáguena. La adjudicación, con un presupuesto de 67.345 euros, cuenta con un plazo de dos meses y está previsto, según palabras del propio arquitecto, que a principios o mediados de octubre sea entregado el proyecto, de forma que en 2019 puedan comenzar sin más demora las obras de rehabilitación.
Esta nueva intervención, según los informes realizados por Izquierdo, rondará los 500.000 euros de presupuesto y se centrará, en esta ocasión, en la reforma de la torre, el portalón y algunas otras intervenciones puntuales de menor importancia como la recuperación del sistema eléctrico.
Esta fase del proyecto, según Izquierdo, “está relacionada con la anterior pero por temas presupuestarios la reforma de la torre no se pudo acometer en su día”. Ya en la reforma del año pasado, se aprovechó para hacer un estudio del estado constructivo y estructural de la torre ayudado por una plataforma de 50 metros de altitud, pues algunas de las partes de la misma no eran accesibles por otra vía. Desde la altura, se realizó un reconocimiento en el que los daños avistados, ya avisados por los vecinos, fueron mayores de los esperados. “Cuando subimos a la parte alta había chapas del chapitel sueltas, piezas de ladrillo erosionadas y con riesgo de caída e incluso pudimos acceder al interior y la estructura de madera se encontraba, en parte, con síntomas de pudrición muy avanzada”, comenta el arquitecto. Con estos desperfectos, se advirtió en un informe del riesgo de caída de elementos por la falta de estabilidad de la torre e incluso riesgo de “problemas mayores” si no se actuaba de manera “inmediata”.
Fruto de esas advertencias, el Gobierno de Aragón, a través del Fondo de Inversiones de Teruel (Fite), ha intervenido para terminar de consolidar la reforma de toda la iglesia, tanto la parte previamente resturada como ahora la torre y el portalón. Ya el año pasado, entre junio y octubre, se realizó una primera fase de reforma, en la que Izquierdo elaboró un proyecto que fue ejecutado por la empresa valenciana Contrafforte Restauro SL, compañía que también se va a encargar de las obras de restauración de la torre de la Catedral de Teruel. En esta primera intervención, se restauró el cimborrio y la cubierta de la nave principal.
Con todo ello, esta iglesia está cerca de verse en unas condicones que parecían imposibles de imaginar años atrás, pues su mal estado y problemas estructurales fueron fruto de gran polémica durante años en el pueblo. La iglesia permaneció cerrada durante largo tiempo debido al riesgo de derrumbe y, ante la falta de actuación, los vecinos decidieron boicotear las elecciones locales en 2012 no presentando a ningún candidato a las mismas hasta que no se solucionara el problema. Además de esta actuación, también realizaron campañas de recolección de fondos y consiguieron, con el dinero reunido, subsanar, al menos de manera temporal hasta la llegada de las reformas definitivas, algunos desperfectos de la construcción.
Los arreglos no son algo actual, pues varios se han ido sucediendo a lo largo del tiempo. El propio Izquierdo en 2003 realizó un estudio geoténico en el que se descubrieron humedades que afectaban al subsuelo y que hacían que se estuvieran desplomando las columnas del interior de la iglesia. Sin embargo, al reparar las redes urbanas de agua del pueblo ese problema, de mayor urgencia que los actualmente subsanados, se solventó. Posteriormente, de manera previa a las intervenciones del año pasado, también se atirantó el cimborrio por su parte interior. Además de estas dos, en las inspecciones recientes también se apreciaron otras reformas, aunque de “poco relieve”, aseguró Izquierdo.
