Síguenos
La II Open Stol Torremocha muestra la habilidad para despegar y aterrizar La II Open Stol Torremocha muestra la habilidad para despegar y aterrizar
Treinta aeronaves de diferentes tipos y procedencias participaron este fin de semana en la II Open Stol Torremocha. Arturo Martin Polo / Arturo Polo-Ena

La II Open Stol Torremocha muestra la habilidad para despegar y aterrizar

La competición premia que los pilotos tomen tierra o la abandonen en la menor distancia posible
banner click 244 banner 244
banner click 236 banner 236

La II Open Stol Torremocha se celebró este fin de semana en el aeródromo de este municipio turolense. Se trata de una prueba aeronáutica en la que los pilotos tienen que afinar su habilidad para tratar de despegar y aterrizar en la menor distancia posible. El evento estuvo organizado por el Aeroclub Montes Universales con la colaboración de la Federación Aragonesa de Deportes Aéreos y el Gobierno de Aragón.

La estupenda meteorología permitió la llegada de unas 30 aeronaves a lo largo del fin de semana procedentes de diferentes puntos del país, así como de Portugal, Francia, Bélgica y Suiza.

Durante el fin de semana también se celebraron charlas aeronáuticas y la presentación del libro Después del viento, a cargo del piloto de montaña Gerardo Bielsa, compuesto por numerosos y divertidos relatos aeronáuticos y de montañismo que se desarrollan en el entorno del Valle de Benasque y el aeródromo de Castejón de Sos. 

El diseño de las aeronave y sobre todo su peso máximo, es determinante a la hora de conseguir un despegue y aterrizaje en la menor distancia posible, pero también la técnica de vuelo empleada por cada piloto, la estrategia en la configuración de la aeronave y su pericia para saber volarlo a la mínima velocidad posible.

El mejor despegue fue en 36 metros y el mejor aterrizaje en tan sólo 33,5 metros. La espectacularidad de la prueba atrajo a un gran número de aficionados a la aviación de todas las edades. 

Una vez más, los socios de este pequeño aeroclub se volcaron con la organización de un evento para difundir el vuelo deportivo entre la población, fomentar el vuelo entre los deportistas y mejorar sus habilidades.

Tras la comida de hermandad ofrecida por el aeroclub, se procedió a la entrega de trofeos y artículos de reclamo gracias a la colaboración de Turismo de la Diputación Provincial de Teruel y Joyería Fabregat.