La Asociación Amigos de Gallocanta reconoce la trayectoria de Antonio Torrijo y José Miguel Pueyo
Las actividades del Día de la Despedida congregan en el entorno de la laguna a cientos de personasLa Asociación Amigos de Gallocanta nombró a José Miguel Pueyo y a Antonio Torrijo Grulleros de Honor en el 25 aniversario de la Fiesta de las Grullas, que reunió a más de un centenar de curiosos y aficionados a la naturaleza en las distintas actividades que organizó el colectivo en las diferentes localidades de Teruel y Zaragoza que rodean el humedal.
Las bodas de plata de la Fiesta de las Grullas ofrece durante todo el fin de semana un programa de actividades tan apretado como interesante que reparte los focos de atención por las distintas localidades que circunvalan la laguna.
La jornada de hoy arrancará con el pasacalles Los Churros por las calles de Gallocanta, que arrancará desde el albergue Allucant a las 10:15 horas. La música callejera será el preámbulo para la apertura del mercado artesano que reunirá a casi 40 paradas en el frontón de Gallocanta que acogerá, además, la actividad infantil Juega con San Quintín en la que se plantearán juegos tradicionales. Antes de la comida popular a la que los visitantes podrán apuntarse a lo largo de la mañana por 5 euros el cubierto precederá un vermú musical con la orquesta Bucardo.
Avistamientos
La actividad del 25 aniversario de la Fiesta de las Grullas arrancó con la observación para asistir a la saluda de las grullas. En una mañana gélida que puso a prueba la templanza de los asistentes, los organizadores decidieron trasladar la actividad del mirador donde se había planteado inicialmente al entender que las condiciones de viento permitirían disfrutar mejor del espectáculo en otro de los puntos de la laguna.
La reunión se había previsto en el Centro de Interpretación de la Laguna de Gallocanta, aunque los miembros de la Asociación Amigos de Gallocanta vieron que ese no iba a ser el sitio más favorable para pra ver la salida de las aves en busca de comida. “Nos hemos movido hacia el pueblo de Tornos a una zona que se conoce como la Dula y que es una antigua explotación de arena. Allí hemos visto la salida de las grullas, que permanecen durante la noche refugiadas en grupos dentro de la laguna y en cuanto empieza a amanecer salen a buscar comida hacia el valle del Jiloca para aprovechar los rastrojos de los cultivos de maiz. El espectáculo es verlas salir en bandos desde la laguna”, explicó Vicente Rosado, miembro de la Asociación Amigos de Gallocanta.
Por la tarde el espectáculo vuelve puntual al vaso de la laguna coincidiendo con la caída del sol.
“Desde principios de noviembre y hasta mitad de marzo permanecen en Gallocanta una cantidad invernante de grullas. En el último censo, que se realizó este jueves, se contabilizaron unos 6.700 ejemplares. Ahora es un número bajo porque es pleno invierno, pero Gallocanta tiene unos picos de más de 80.000 ejemplares en la tercera semana de febrero”, dijo el experto.
Sobre el peso de la población que acoge el humedal estos días, Rosado reconoció que “ha habido años en los que el censo ha sido mayor porque el alimento en la laguna era mayor. Recuerdo hace un par de años, coincidiendo con una granizada que hubo antes de la recogida de la cosecha y que hizo que hubiera mucho grano en los campos, el número grullas invernantes fue de más de 20.000. Ahora es la cifra adecuada a la disponibilidad de alimento”, dijo Rosado que añadió que Gallocanta se han sumado desde no hace mucho tiempo la Laguna del Cañizar y el embalse de Lechago, donde también paran algunos grupos.
El Día de la Despedida es el anticipo a los primeros movimientos migratorios de estas aves, que arrancan cuando empieza a alargar el día. En poco tiempo comenzarán su viaje los individuos reproductores. Y es que aunque en invierno estos animales tienen un comportamiento gregario, en las zonas de cría se vuelven territoriales y los adultos que van a criar buscar viajan los primeros para tener los mejores terrenos.
Míriam Julián, procedente de Zaragoza, llegó a Gallocanta junto a su amiga Marián Mercadal por indicación la hija de ésta, Sara, que trabaja como periodista en Calamocha. Su debut en el avistamiento de grullas arrancó en la capital del Jiloca, donde se hospedaron para estar más cerca de la laguna. “A las 7:00 horas estábamos en el Centro de interpretación de la laguna”, recordaban tras la actividad. “Ha sido un momento muy bonito porque después de ver ocultarse la luna ha salido las grullas y la experiencia ha sido muy bonita”, dijo Julián, que añadió a continuación que había “hecho mucho frío”. Los intrépidos madrugadores se enfrentaron a temperaturas de -7 grados que pasaron factura especialmente a las manos. Así lo vivieron Francisco Biel y sus acompañantes. Este viajero valenciano recordaba el intenso frío de la mañana “sobre todo en las manos”. Bien destacó que “el amanecer ha sido bonito. Se veía la luna al ras de la laguna y de repente ha empezado a sonar el trompeteo que hacen y han empezado a levantarse. Primero ha pasado un bando de 15 o 20 y después ha sido una barbaridad lo que pasaba por encima de ti”.
Pilar Bandrés, de Hondarribia, acompañó a “unos amigos a ver lo que son los grullas”. Bandrés y su marido son amigos de José Miguel Pueyo y no quisieron perderse el homenaje en el que se le nombró Grullero de Honor.
Visita al castillo
Después de haber cogido fuerzas tras el espectáculo de la salida de las grullas, los participantes en la actividad se desplazaron hasta la localidad de Berrueco, de 32 habitantes censados, donde se subió al castillo para conocer un poco más la historia de la zona. La fortaleza, datada del siglo XIV, se levantó en la ubicación de una edificación anterior de origen árabe y hoy goza de protección como Bien de Interés Cultural.
Junto a los torreones que todavía se mantienen en pie, Felipe Rosado explicó las características del humedal y su relación con las grullas. “El paseo explicativo se hace para informar a la gente que participa de los valores culturales y naturales (de la zona)”, confirmó.
Rosado reconoció que a los visitantes les sorprende cada edición de la Fiesta de las Grullas “los paisajes de horizontes muy lejanos en los que tanto los amaneceres como los atardeceres son magníficos. Ver tanta extensión, sobre todo desde sitios como el Castillo de Berrueco, se puede ver toda la laguna. El ver u paisaje con horizontes muy lejanos no es muy habitual en otras zonas de España”, dijo.
La mañana se completó la actuación del mago Asier, que encandiló a los pequeños y también a los mayores logrando vincular la magia de proximidad con las grullas, y después se desarrolló la actividad infantil El Baúl de la Naturaleza en la que un guía de GuiaTe de Daroca enseñó a los más pequeños a interpretar señales de animales en la naturaleza.
Grulleros de Honor y Mayor
La jornada tuvo uno de sus platos fuertes con el nombramiento de José Miguel Puerro y Antonio Torrijo como Grulleros de Honor.
Uge Fuertes, de la Amigos de Gallocanta, explicó que “son el germen de esta asociación y han sido los bastiones a los que todos los demás nos hemos ido añadiendo” por lo que encontró “normal” que los dos homenajeados “estén ilusionado” porque, añadió, es “el reconocimiento desde dentro de casa a la gente que está trabajando y haciendo ciencia ciudadana “.
El título de Grullero de Honor no se había concedido nunca en las 25 ediciones de la Fiesta de las Grullas. “Normalmente el título se llama Grullero Mayor, pero este año hemos querido hacer una mención especial. Al tratarse de dos miembros de la Asociación y ser el 25 aniversario es un poco especial”, dijo Fuertes, en referencia a un reconocimiento que hasta ahora no se había entregado a los miembros de la Amigos de Gallocanta.
Además, se entregó la grulla conmemorativa de Grullero Mayor a Iñaki Peña. “Peña fue el primer Grullero Mayor que se concedió por parte de esta asociación hace 18 años. No coincide el número de fiestas con el de Grulleros Mayores porque se empezó más tarde. Cuando se nombra a alguien Grullero Mayor se le entrega una estatuilla preciosa que dona Allucant y que es obra del escultor Ascaso. El primer año que se dio este premio aún no existía la estatuilla y se ha creído conveniente dársela ahora a posteriori”, explicó Fuertes.
XXV Aniversario
La Asociación Amigos de Gallocanta ha logrado en estos 25 años dar a conocer los valores de este humedal. Tras este cuarto de siglo de actividad se ha logrado “poner a la laguna en el mapa”. De hecho, una inmensa mayoría de los visitantes que participaron en las actividades procedían de otras provincial. Muchos habían llegado desde la ciudad de Zaragoza, aunque también hubo participantes de la Comunidad Valenciana o del País Vasco, entre otras procedencias. En otras ediciones se ha registrado incluso visitantes procedentes de terceros países.
Uge Fuerte valoró “muy bien” la XXV edición de la Fiesta de las Grullas, después de que cerca de 60 personas arrancasen desde el alba viendo el espectáculo de la salida de las aves. El buen tiempo del fin de semana contribuyó, sin duda, a que el número de participantes en las actividades fuese elevado y la actuación de magia reunió a más de cien personas.
Para Fuertes, en estos 25 años “ha cambiado mucho el tipo de personas que vienen a visitar la laguna. Hace 25 años la laguna la visitaban principalmente ornitólogos y mucha gente extranjera que sabía que éste era un punto importante para la invernada de las grullas, pero últimamente se ve cada vez más turismo familiar”.