Jarque de la Val se prepara para convertirse en el mejor mirador del firmamento

Tras haber estrenado este verano un sistema de iluminación de baja contaminación lumínica que, además, es regulable, Jarque de la Val se prepara para acoger el primer punto de observación del firmamento en un área urbana. “Se planteó hacer un mirador astronómico urbano, que es algo que no hay en ningún sitio”, explicó el alcalde de Jarque de la Val, Diego Edo. Este observatorio se incluye dentro de la actuación que está llevando a cabo la Comarca en la que se prevé la instalación de 14 de estos puntos a lo largo de este año.

El municipio de la Comarca de Cuencas Mineras solicitó al programa Leader la renovación del alumbrado  “orientándolo a la observación astronómica con el estándar del Starlight”, explicó su alcalde, Diego Edo, que explicó su intención de mantener el estándar del que ya dispone la comarca.

Para ello, a la hora de renovar el parque de alumbrado del municipio se apostó por luminarias de tecnología led PC Ámbar.

Jarque de la Val se encuentra obre una colina, en cuya cima se halla una iglesia que conforma un balcón privilegiado para contemplar las estrellas. “Para potenciar esta actividad y evitar que el alumbrado entorpeciese la observación, era necesario sustituir la iluminación existente, que consistía en lámparas led con temperatura de color fría (3500 K) y un elevado flujo al hemisferio superior. Asimismo, había calles oscuras y se incumplían todas las normativas lumínicas”, explica la empresa Smart-Lighting, responsable del nuevo sistema lumínico.

Alternativa

“La alternativa propuesta fueron luminarias Led con PC Ámbar que, al estar por debajo de la línea de observación y contar con un componente espectral de azules mínimo, garantizarían la oscuridad del cielo nocturno”, continúa la información publicada por la compañía.

Para poder acometer el proyecto de instalar un mirador astronómico en suelo urbano junto a la antigua iglesia se incluyó en la iluminación de la torre del edificio un sistema de iluminación que permite la regulación de la luz. “Se pone toda la torre de color rojo. Es el modo en el que el ojo bloquea la contaminación lumínica y permite ver el cielo en todo su esplendor”, explicó Edo.

“La iluminación ya está terminada. Solo tenemos que hacer algunos ajustes”, confirmó el edil, que señaló que la gestión de la iluminación se llevará desde el Multiservicio Rural.

Edo insistió en el carácter “urbano” del mirador, para que “la gente pueda llegar en coche” hasta la plaza del Ayuntamiento para instalar allí sus telescopios. Para mejorar la experiencia se ha habilitado un  punto de conexión wifi para geoposicionar los aparatos de observación, y subrayó que “toda la iluminación del municipio está orientada a que se pueda hacer una observación en las mejores condiciones”, dijo el edil.

Además, se han programado también determinados escenario de colores para que la iluminación del pueblo cambie en fechas señaladas como el 23 de abril, cuando proyectará la bandera de Aragón y  el 8-M se pondrá en morado, por ejemplo.

En total se han invertido 90.000 euros para la renovación de 52 luminarias además de la iluminación ornamental de la iglesia.