El taller de empleo de Calamocha restaurará el paseo fluvial en el Jiloca

El taller de empleo de restauración y revalorización medioambiental promovido por el Ayuntamiento de Calamocha ha iniciado la formación de 9 alumnos en infraestructuras de jardines. Los alumnos del taller de empleo ampliarán y mejorarán el paseo fluvial del Jiloca a su paso por el casco urbano de Calamocha y recuperarán una arboleda  abandonada de chopo cabecero a los pies del río Pancrudo en el barrio rural de Navarrete del Río. El taller de empleo medioambiental, que tiene un año de duración, cuenta con un presupuesto de 200.000 euros, que financia el Inaem con el Fondo Social Europeo y el Ayuntamiento.

La directora del taller de empleo de restauración y revalorización de los bosques en galería de los ríos Jiloca y Pancrudo, María de Torre, manifestó que son 9 los alumnos, entre ellos una sola mujer, los integrantes del taller de empleo que empezó el pasado 1 de enero. El taller de empleo cuenta además, de la directora,  con el docente, Ricardo García.

La ingeniera forestal, María de Torre señaló que no todos los alumnos de taller de empleo son de Calamocha porque hay también de Monreal del Campo, Bueña y El Poyo del Cid. “Son alumnos que tienen entre los 32 y los 56 años, que estaban en el desempleo. Los alumnos cuando terminen el taller de empleo tendrán dos certificados de mantenimiento de jardines y de aprovechamientos forestales, éste último parcial”. 

Igualmente los alumnos recibirán formación en temas trasversales, caso de las nuevas tecnologías, igualdad de género, sensibilidad ambiental, orientación profesional con fomento para la creación de empresa y prevención de riesgos laborales.  Los alumnos del taller de empleo cobran desde el primer día el salario mínimo interprofesional, que es algo más de 800 euros mensuales.

La directora del taller de empleo explicó que una de las actuaciones que se va a realizar es el acondicionamiento del camino de la ribera del Jiloca desde el parque municipal de Calamocha hasta la altura del cuartel de la García Civil, 1,5 kilómetros. “Este camino se va hacer un paseo fluvial con la recuperación del camino, la plantación de especies, vallados de madera, instalación de mobiliario. Se va a trabajar desde un punto de vista sostenible en el diseño del paseo fluvial y en los materiales que se van a utilizar”.

La segunda actuación que hará el taller de empleo medioambiental de Calamocha es sobre una arboleda municipal de chopo cabecero, que está abandonada en el río Pancrudo a su paso por Navarrete del Río. 

Para realizar esta tarea los alumnos del taller de empleo aprenderán a escamondar los chopos cabeceros y hacer plantaciones con la finalidad de recuperar la arboleda y poder salida laboral en una actividad donde no existen en la zona empresas que lo hagan. “En las fiestas del chopo cabecero las escamondas se tienen que hacer principalmente con voluntarios”, apuntó el coordinador de la Fundación San Roque de Calamocha, Emilio Benedicto, quien resaltó la importancia que tiene el chopo cabecero en la cultura de las zonas altas de la provincia de Teruel. “Un chopo cabecero que está pendiente de su reconocimiento como Parque Cultural, que va a tener en la zona del Alto Alfambra”, recordó.

Alumnos

La única alumna, Yolanda García, 38 años, Monreal del Campo, confesó que estaba muy satisfecha en el taller de empleo donde había un buen ambiente y que le va a permitir conseguir la profesionalidad de grado dos en jardinería. “Nos llevamos bien y estoy contenta en el taller de empleo”, que le permite trabajar y formase durante un año. Yolanda García había trabajado antes de estar parada de dependienta.

Rafael Cueto, 44 años y vecino de Calamocha, reseñó que nunca había trabajado en tareas forestales. “He trabajado en la construcción y atendiendo a personas mayores en una estancia diurna en Sevilla durante 12 años hasta que vino la crisis. El taller de empleo es una oportunidad para formarse y una experiencia. Personalmente la naturaleza me gusta mucho y quiero sacar provecho al taller de empleo”.

Bioingeniería

El coordinador de la Fundación San Roque de Calamocha, Emilio Benedicto, comentó que paralelamente a la actuación del taller de empleo en el paseo fluvial del Jiloca se va hacer una restauración de riberas donde se va utilizar la bioingeniería, la técnica Krainer. 

Emilio Benedicto expuso que se cuenta en la Fundación San Roque de Calamocha con un presupuesto de 30.000 euros provenientes del grupo Leader de Jiloca-Gallocanta para esta actuación medioambiental de restauración en las riberas del Jiloca. Benedicto dijo que se aprovechará que estén los alumnos del taller de empleo para que vean y aprendan de técnicas que ejecutará una empresa especializada.

El coordinador de la Fundación San Roque de Calamocha indicó que se estaba pendiente del permiso de la Confederación Hidrográfica del Ebro y del Inaga para empezar la restauración de las riberas del Jiloca. 

La técnica krainer se empleará en los tramos más deteriorados por las avenidas del río Jiloca. La bioingeniería es una disciplina constructiva que persigue objetivos técnicos, ecológicos, estéticos y económicos aprovechando los rendimientos de las plantas y usando técnicas de bajo impacto ambiental. Se rechazan las escolleras de cemento. La técnica Krainer emplea la madera y la tierra, que con las plantas sujetan las riberas cuando se producen las avenidas en el río.  Benedicto destacó, por otra parte, la gran riqueza biológica que tiene el río Jiloca a su paso por Calamocha donde hay  nutrias, garzas, patos, entre las especies más populares. “Hay también especies muy singulares de caracoles y de ciervos volantes. El objetivo es apostar por el medio ambiente, ponerlo en valor  y que sea un recurso turístico de Calamocha”, subrayó.