El plan director del castillo de Alfambra apuesta por la recuperación del aljibe
Plantea crear un centro de interpretación en la iglesia de Alta y un recorrido por los restosAlfambra celebró su segunda jornada Castillos de Aragón y órdenes militares en las que se presentó el plan director del castillo de esta localidad, un documento que han elaborado el arqueólogo Javier Ibáñez y el arquitecto Javier Gutiérrez y que servirá para marcar los pasos en el proceso de conservación, restauración y difusión de estos importantes restos que son Bien de Interés Cultural. La recuperación del aljibe es una de las cuestiones más importantes y para la proyección turística de este espacio se plantea la adecuación de un centro de visitantes en la antigua iglesia Alta y recorridos señalizado con el menor impacto posible.
El alcalde de Alfambra, Francisco Abril (PAR), destacó la importancia del plan director para empezar la recuperación del patrimonio del castillo ya que marca “las líneas de trabajo” y los pasos a seguir.
Abril mostró su agradecimiento al Departamento de Educación, Cultura y Deporte de Aragón que ha aportado financiación para este estudio y aseguró que en el plazo de los dos próximos años podría hacerse visitable este espacio, si se logra la financiación que se ha solicitado al Fondo de Inversiones de Teruel (Fite) en la nueva línea para recuperación del patrimonio. El consistorio aportaría 20.000 euros y el Fite 180.000.
El plan supone un estudio profundo del castillo para poder elaborar un diagnóstico de su estado y prever las acciones necesarias para su protección, conservación, investigación y difusión. El ámbito de actuación del plan incluye, además de los restos del castillo, la iglesia Alta y el entorno próximo de las laderas del cerro.
El trabajo aún no está completo ya que está pendiente de la campaña de excavaciones que se van a desarrollar a través del taller de empleo que comenzó su actividad el pasado mes de febrero y que tiene un año de duración. Esa labor dará mayor información sobre los restos.
Excavaciones arqueológicas
El arqueólogo Javier Ibáñez explicó que lo primero que se va a hacer van a ser una serie de sondeos para completar el plan director y dentro del mismo se contemplarán una o dos fases de excavación sistemática del conjunto, con esta información se procederá a la restauración y se fijará el recorrido potencial para el flujo de visitantes y la forma más adecuada para exponer los restos al público .
El arquitecto Javier Gutiérrez señaló que lo que se pretende es “recuperar las huellas y consolidarlas porque el grado de deterioro es muy avanzado y hay que consolidarlo para no perderlo”, así como la recuperación de las laderas para que no se vaya todo lo que hay.
Asimismo, Gutiérrez señaló que el estudio arqueológico dará nuevas estructuras que van a salir a la luz y habrá que descubrirlas, conservarlas y exponerlas y destacó que hay que recuperar el aljibe que es la parte más importante que está en pie y en la iglesia de Santa María se propone un espacio de recepción al visitante.
Las intervenciones arquitectónicas estarán enfocadas a la consolidación de los restos, no a su reconstrucción, por lo que todas las actuaciones que se realicen deberán hacerse de manera que se distingan claramente de las preexistencias. Las actuaciones se apoyarán en los datos de la investigación arqueológica.
El plan propone intervenciones para la estabilización de taludes, la consolidación de estructuras, la creación de recorridos adecuación de accesos y el modelo de gestión.
El arquitecto señaló que lo que hace falta es que llegue la financiación para que los planteamientos recogidos en el plan se puedan llevar a cabo.
En representación del Departamento de Educación, José Ramón Morro recordó que desde 2015 hay un plan de identificación y conocimiento de toda la arquitectura defensiva y militar de Aragón y que en la provincia de Teruel se está trabajando en distintos castillos. “Apostar por esta arquitectura defensiva entendemos que es bueno para Teruel”, subrayó mientras recordaba el potencial turístico de estos recursos ya que en los siete castillos visitables de la provincia el año pasado se recibieron 140.000 visitas.
Al acto asistió también la propietaria del castillo María José Sanz que recordó que su padre adquirió el castillo en 1976 en una subasta pública porque “pensaba que era beneficioso para el pueblo y que se lo quedara el pueblo” y confió en que estos pasos que se están dando permitan dar proyección a este espacio que “tiene mucha historia”. “Esperemos que traiga mucha gente y que cree puestos de trabajo”, comentó.
Durante las jornadas en Alfambra también se presentó el libro del historiador turolense Rubén Sáez Los castillos de Aragón y las órdenes militares.