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El Parque Lineal de Lechago está prácticamente acabado, a falta solo de pequeños detalles El Parque Lineal de Lechago está prácticamente acabado, a falta solo de pequeños detalles
Un vecino de Lechago camina por el Parque Lineal, camino de la zona de El Arca. J. L. R.

El Parque Lineal de Lechago está prácticamente acabado, a falta solo de pequeños detalles

La Asociación Amigos de Lechago exige que esto sea solo el principio de una actuación mayor
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José Luis Rubio
Un vetusto chopo cabecero trasmochado vigila la zona de El Arca en la que empieza (o termina, según se mire) el Parque Lineal de Lechago, cuyas obras están prácticamente terminadas y que ha encontrado mejoras en su ejecución para hacerlo aún más atractivo. Sin embargo, la extrema mocedad de los árboles que se incluían en el proyecto preocupa a los miembros de la Asociación Amigos de Lechago, que han seguido con atención el progreso de los trabajos. Actualmente, el parque está completado a falta de la instalación de cuatro bancos previsto a lo largo de su trazado de 450 metros, de la instalación y puesta en servicio de las placas solares con las que se alimentará el motor que llevará el agua a la fuente instalada en la zona recreativa del Arca y de su inauguración oficial a cargo de la Confederación Hidrográfica del Ebro, como ejecutora de los trabajos.

Agustín Martín, miembro del colectivo Amigos de Lechago, confirmó, no sin cierta satisfacción y junto a al arranque de la zona peatonal, que el Parque Lineal “prácticamente está acabado. Solo falta por colocar las plazas solares para que alimenten el motor de pulsión para la fuente y colocar algunos bancos en las soleras que ya están puestas a lo largo del paseo”.

El proyecto, presupuestado en unos ajustadísimos 100.000 euros y redactado por la Confederación Hidrográfica, consta de un paseo peatonal que, a lo largo de 450 metros, conecta la Fuente de las Ermita del Santo Cristo con el manantial del que bebe este chorro, conocido como El Arca. El planteamiento inicial contemplaba una plataforma accesible para personas con movilidad reducida de grava, en la que se plantarían diversos ejemplares de árboles autóctonos para dotar de sombra al paseo. Además, se ha adecuado el acceso a la zona del Arca donde se han dispuesto dos bancos y una fuente.

La CHE ha ejecutado, además, algunas mejoras sobre el proyecto inicial. Martín destacó que “a medida que se iba ejecutando la pobra, desde la Asociación íbamos haciendo sugerencias de cosas que se podrían incorporar a la obra y que no estaban implícitamente en la misma, y eso supone un coste añadido”. Entre esas mejoras, destacó el ensanchamiento de la plataforma del paseo, que estaba prevista con una achura de 2,5 metros y que ha pasado a contar con más de tres. También se ha llevado a cabo una “ampliación de la zona del Arca”, prolongándola unos 20 metros sobre el tramo soterrado y entubado de la  acequia, así como la limpieza de las dos orillas de esta canalización de agua. También se han practicados rampas de acceso para dos fincas, situadas al otro lado de la rambla de Cuencabuena, junto a la que discurre el paseo.

Sin embargo, aunque el miembro de Amigos de Lechago valoró que “ha quedado bien”, no tardó en poner el “pero” a la plantación de árboles. Y es que este colectivo reconoce su sorpresa al ver unos ejemplares tan pequeños. “Esperábamos algo con más empaque”, sentenció Martín que incluso señaló algunos plantones secos. Sin embargo, desde la CHE les habrían respondido que las raíces de estas unidades estaban en buen estado por lo que se confía en que en cuanto empiece a llover la planta recuperará su brío.

Reivindicaciones


Esta semana, la Asociación Amigos de Lechago trasladó a los diputados de PP, PSOE y Ganar Aragón, así como a la Diputación de Teruel y al Ayuntamiento de Calamocha una carta en la que se recordaba que el Parque Lineal que está a punto de estrenar Lechago es solo una parte de un proyecto más grande. Aunque este colectivo reconoce que el proyecto inicial resultaba “agresivo con el medio ambiente y problemático hidrológicamente” no se muestra dispuesto a dejar pasar “una inversión a la que el Estado se comprometió con Lechago”.

La respuesta tanto del alcalde pedáneo como del Ayuntamiento de Calamocha ha sido positiva y se han postulado “a favor de las peticiones que se hacen desde la Asociación”, aseguró Martín. Los consistorios quieren impulsar la apuesta de un proyecto de biodiversidad en el propio pantano y “hacer un espacio de uso que sirva para algo”, añadió para recordar que “el pantano ahora no puede usarse para usos recreativos como bañarse, pescar o navegar”. “Lo que se quiere es que ese espacio que está ahí, sacarle un rendimiento económico. Se podrían crear empresas de recreo con patines o canoas y algún espacio para abrir un merendero y una zona de ocio, como en el pantano de San Blas y otros embalses de la Confederación”, explicó Martín, que se mostró ilusionado por la posibilidad de que la propuesta del Ayuntamiento pudiera salir adelante.

Mientras, la Asociación sigue “pidiendo la inversión pendiente a la que se comprometió (...) entre el Ministerio con Cristina Narbona y la Junta de Afectados de Lechago para hacer el gran Parque Lineal”. Y a pesar de que reconocen en la misiva las limitaciones a las que está sujeto ese compromiso, no dejan de reclamar una actuación en la margen izquierda de la rambla de Cuencabuena hasta la ermita y en las dos orillas hasta la cola del pantano. “No queremos que se pierda una cuantía económica a la que se había comprometido el Estado con Lechago (2,5 millones) y que ahora se ha quedado reducida a  100.000 euros”, insistió Martín, insistiendo en que lo ejecutado es apenas una cuarta parte del proyecto global.